El primer ministro ruso Mikhail Mishustin informó que dio positivo por coronavirus y que se retira temporalmente, convirtiéndose en el funcionario ruso de mayor rango al que se le ha diagnosticado la enfermedad.
“Las pruebas que hice para el coronavirus resultaron positivas”, dijo Mishustin en una conversación televisada en video con el presidente Vladimir Putin. “Como resultado, debo observar el auto-aislamiento y cumplir las órdenes de mis médicos, lo cual es necesario para proteger a mis colegas”.
Durante la comunicación con Mishustin, Putin apeló a los rusos a “tomar la infección del coronavirus y su propagación tan seriamente como sea posible”, haciendo un llamado a sus compatriotas para que sigan las órdenes de auto-aislamiento del gobierno durante los próximos fines de semana largos. “La fecha en la que el país pueda volver a la vida normal depende de la voluntad de cada uno de nosotros”, agregó.
Mishustin, que no mostró ningún síntoma aparente del virus durante su breve aparición, dijo que irá al hospital este mismo jueves. El portavoz de Mishustin, Boris Belyakov, dijo que aquellos que han estado en contacto con el primer ministro recientemente también serán aislados y examinados. Según el vocero del Kremlin, Dmitry Peskov, Mishustin y Putin se reunieron por última vez hace más de cuatro semanas.
El líder ruso ya nombó al viceprimer ministro Andrey Belousov, como primer ministro interino durante la ausencia de Mishustin. Putin dijo que seguirá buscando la aprobación de Mishustin para las decisiones de política económica mientras esté aislado. “Planeo permanecer en contacto activo por teléfono y videoconferencia”, dijo Mishustin.
Putin nombró a Mishustin como primer ministro apenas en enero de este año, con el objetivo de acelerar los esfuerzos para impulsar el crecimiento económico. Pero la agenda del ex jefe de impuestos fue rápidamente superada por la propagación del virus y el colapso de los precios del petróleo, la principal exportación de Rusia.
Si bien el gobierno se apuró a imponer restricciones de viaje para limitar el contagio –hasta ahora Rusia ha informado 106.498 contagios y sólo 1073 muertes–, los números han aumentado constantemente en las últimas semanas y Putin ha extendido las órdenes de permanecer en casa hasta el 11 de mayo.
En una videoconferencia con gobernadores regionales, el mandatario habría advertido que “la situación sigue siendo muy complicada. Rusia ha logrado ralentizar la propagación de la epidemia pero todavía no hemos pasado el pico” y dejó claro que deberá mantenerse “el riguroso cumplimiento de las medidas preventivas impuestas en las regiones”.