Misiones Para Todos

Un millón de personas reclaman a Google que incluya a Palestina en sus mapas

Aunque en redes sociales se extendieron las muestras de protesta y de apoyo a Palestina bajo las etiquetas #FreePalestine y #Standwithpalestine, Google ha señalado que no ha quitado la mención a Palestina de sus mapas porque «nunca estuvo allí», ¡una justificación peor que el pecado!

Casi un millón de personas han pedido a Google que incluya en sus mapas a Palestina, después de rumores sobre el supuesto cambio en las denominaciones que utiliza el motor de búsqueda que se extendieron por redes sociales y de que la compañía desmintió aclarando que el nombre de Palestina en realidad nunca estuvo en sus mapas.

Casi un millón de personas han firmado una petición dirigida a Google para que incluya a Palestina en sus mapas.

«Palestina no aparece en los mapas de Google. ¿Por qué? Israel, creado sobre tierra palestina, está claramente delimitado, pero no hay mención a Palestina. Según Google, Palestina no existe», argumenta la petición.

Además, denuncia que la omisión de Palestina supone un insulto para su pueblo y afecta a millones de personas que aspiran a una Palestina independiente y «libre de la ocupación y la opresión israelí».

Por todo ello consideran que Google es «cómplice de la limpieza étnica del Gobierno israelí» y piden que la empresa «reconozca Palestina en Google Maps y delimite e identifique claramente los territorios palestinos ocupados ilegalmente por Israel».

Aunque en redes sociales se extendieron las muestras de protesta y de apoyo a Palestina bajo las etiquetas #FreePalestine #Standwithpalestine, Google ha señalado que no ha quitado la mención a Palestina de sus mapas porque «nunca estuvo allí».

Sí ha admitido que un fallo en su sistema de etiquetado suprimió las etiquetas de Cisjordania y la Franja de Gaza.

Además del territorio palestino sobre el que se fundó, Israel mantiene bajo ocupación militar los territorios palestinos de la Franja de Gaza y Cisjordania –incluida Jerusalén Este– desde 1967, una ocupación no reconocida por la gran mayoría de la comunidad internacional y que podría suponer un crimen de guerra por la posterior colonización.

Además, el actual Gobierno israelí pretende la anexión de buena parte del territorio que ocupa, el valle del Jordán y las colonias de Cisjordania.

Fuente: www.naiz.eus