El nuevo director ejecutivo de Twitter, Elon Musk, informó que la red social restableció la cuenta del expresidente Donald Trump, luego de realizar una encuesta entre los usuarios, en la que una pequeña mayoría votó a favor de esa decisión. Sin embargo, el exmandatario aseguró que no está interesado en retornar a esa plataforma. Trump, vetado de Twitter por incitar a la violencia, lanzó en 2021 su propia red: Truth
La cuenta verificada del polémico exmandatario, volvió a estar en línea en las últimas horas y pasó rápidamente de un poco más de 100.000 seguidores a 25 millones, aunque aun lejos de los 88 millones que tenía antes de ser suspendida.
“La gente ha hablado”. Así describió el nuevo propietario de Twitter, Elon Musk, la decisión de restablecer la cuenta del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien en días pasados anunció una nueva campaña por la presidencia en 2024.
Antes de la decidión Musk lanzó una encuesta en la que consultó a los usuarios sobre esa posibilidad. Entre 15 millones de usuarios que participaron en el sondeo, una pequeña mayoría, el 51,8%, se pronunció a favor de restablecer el servicio para el exjefe de Estado.
Sin embargo, Musk reconoció que los números de votos estaban siendo afectados por “bots”, programas automatizados que no son personas, y sugirió que era necesario “limpiar” las encuestas de Twitter para que no estuvieran influenciadas por “ejércitos de bots y trolls”.
La red social del pajarito azul tomó la extraordinaria decisión de suspender la cuenta de Trump el 8 de enero de 2021, al argumentar incitación a la violencia, después del ataque contra el Capitolio, ocurrido el 6 de enero de ese año. Día en el que cientos de simpatizantes del entonces presidente irrumpieron violentamente en momentos en que los legisladores ratificaban la victoria de Joe Biden, en las elecciones presidenciales de noviembre de 2020.
El exmandatario ha sido acusado por las declaraciones que emitió en videos difundidos en sus redes sociales, que según las investigaciones lideradas por los demócratas, motivaron el ataque de sus seguidores.
El exjefe de Estado fue absuelto de estas acusaciones en juicios políticos. Sin embargo, el pasado viernes 18 de octubre, el fiscal general de EE. UU., Merrick Garland, anunció la designación de un fiscal especial que investigará a Trump por su posible implicación en el asalto al corazón de la democracia estadounidense.
Trump rechaza volver a Twitter
Pese a que en los primeros días de la suspensión de su cuenta arremetió contra la medida, ahora el menos entusiasta con la decisión de rehabilitar su cuenta en Twitter es el propio Donald Trump. Su plataforma aparece aún con el último mensaje que publicó el 8 de enero de 2021, día de la suspensión.
Horas antes de que concluyera el sondeo anunciado por Musk, el republicano, que recientemente anunció que buscará volver al Ejecutivo en las elecciones presidenciales de 2024, señaló que no tenía interés de retomar el uso de esa plataforma.
“No veo ninguna razón para ello”, afirmó el expresidente, en un panel de la reunión anual de liderazgo de la Coalición Judía Republicana.
El magnate convertido en político aseguró que se quedaría con su nueva plataforma Truth Social, la aplicación desarrollada por su startup Trump Media & Technology Group (TMTG) y que lanzó justo después de su suspensión de Twitter.
Trump sostuvo que su plataforma cuenta con una mejor participación de usuarios que Twitter y que funciona “fenomenalmente bien”. Asimismo, señaló que la plataforma de Musk sufre de la presencia de cuentas falsas y que los problemas que enfrentaba eran “increíbles”.
Los expertos indican que en caso de que el exmandatario regresara a Twitter generaría dudas sobre su compromiso con Truth Social, que se lanzó en la App Store de Apple en febrero y en la Play Store de Google en octubre. Trump tiene alrededor de 4,57 millones de seguidores en esa red.
La respuesta de Trump de no retornar a Twitter podría reducir las preocupaciones entre los principales anunciantes, que ya están desconcertados por la drástica remodelación de esa red social por parte de su nuevo CEO.
La plataforma con sede principal en San Francisco ha reducido a la mitad la plantilla y recortado drásticamente el equipo de confianza y seguridad de la empresa, que es responsable de evitar la difusión de información errónea y contenido dañino.
Estas acciones han impulsado a las principales empresas a detener la publicidad en el sitio mientras siguen monitoreando de cerca cómo la plataforma maneja el discurso de odio.
El sábado 19 de noviembre, Bloomberg informó que Twitter podría despedir a más empleados en sus divisiones de ventas y asociaciones, una medida que afectaría aún más a la red pocos días después de una renuncia masiva de ingenieros.
Por Yurany Arciniegas-France24