Las acciones del banco alemán retrocedieron por tercer día consecutivo y perdieron más de una quinta parte de su valor en lo que va de mes, en medio de los temores de los inversionistas sobre una posible quiebra que las autoridades europeas desestiman.
Las acciones del mayor banco alemán, Deutsche Bank, cayeron por la especulación de los inversores de que los reguladores y los bancos centrales aún no tengan control de la peor sacudida del sector desde la crisis financiera mundial de 2008.
El euro cayó frente al dólar, los rendimientos de la deuda pública de la zona euro se hundieron y aumentaron los costos de los seguros contra impagos bancarios, todo ello pese a las garantías de los responsables políticos de que el sistema bancario mundial es seguro.
El Deutsche Bank se situó en el punto de mira de los inversores y se desplomó un 8,5%. El índice de los principales bancos europeos también bajó un 3,8%. “El mercado desconfía, o está cansado, por decirlo de alguna manera, de que hayan surgido más problemas”, manifestó Joseph Trevisani, analista de FXstreet.com.
“Se necesita tiempo. Tendrán que pasar semanas sin problemas en el sistema bancario para que los mercados se convenzan de que no es un problema sistémico.”, agregó.
La firma de análisis Autonomous aclaró que Deutsche “no es el próximo Credit Suisse”, mientras que los analistas de JPMorgan escribieron que “no nos preocupa” y que los fundamentales de Deutsche eran “sólidos”.
Paul van der Westhuizen, estratega senior de Rabobank, citó la rentabilidad de Deutsche como la “diferencia fundamental” entre los dos bancos europeos, dado que Credit Suisse, que tuvo que ser vendido a UBS, no tenía perspectivas de rentabilidad para 2023.
“Es un banco muy rentable. No hay motivo para preocuparse”, reiteró el canciller alemán Olaf Scholz durante su reunión con otros líderes en Bruselas.
La movida que sacudió lo mercados
Pese a esto, las acciones del mayor banco alemán perdieron una quinta parte de su valor en lo que va de mes y el costo de sus seguros contra impagos, CDS, a cinco años, una forma de seguro para los tenedores de bonos, saltó este viernes a su nivel más alto en cuatro años, según datos de S&P Market Intelligence.
El desplome de la acción del Deutsche Bank se da después de que la entidad anunciara que planea redimir 1.500 millones de dólares de deuda subordinada el 24 de mayo, antes de su vencimiento en 2028. El banco afirmó que cuenta con “todas las aprobaciones reglamentarias requeridas” para esa decisión, pero la misma causó un impacto en el sector bancario que arrastró las bolsas europeas en la jornada.
El Deutsche Bank precisó que reembolsará los bonos al cien por cien de su valor nominal “con los intereses devengados hasta la fecha de amortización”.
“Como de costumbre, no nos manifestamos sobre empresas concretas y menos en los mercados financieros”, según el portavoz del gobierno alemán, Nodjinan Nimindé-Dundadengar.
Por Jorge Hurtado-France24