La ciudad de Nueva York aplicará un salario mínimo a los repartidores de comida a domicilio de aplicaciones como Uber Eats y DoorDash, una medida inédita en Estados Unidos. La medida la dio a conocer el alcalde de la ciudad, Eric Adams, el fin de semana y entraría en vigor el próximo mes.
El salario mínimo de los repartidores de domicilio de Nueva York pasaría de siete dólares la hora a 17 dólares, según anunció el alcalde Eric Adams durante el fin de semana, convirtiéndose en la primera ciudad de Estados Unidos en ordenar un aumento salarial para este sector económico.
De esta forma, los ingresos de los repartidores se triplicarían en los próximos años. Según datos de la ciudad, unos 60.000 repartidores de Nueva York ganan actualmente una media de 7,09 dólares la hora.
Pero esto cambiaría desde el 12 de julio, cuando la norma entre en vigencia, acompañada de una subida salarial de 17,96 dólares la hora.
El alcalde de Nueva York, Eric Adams, anunció el domingo la nueva norma del Departamento de Protección del Consumidor y del Trabajador. “Esta nueva tarifa salarial mínima, con un aumento de casi 13,00 dólares por hora, garantizará que estos trabajadores y sus familias puedan ganarse la vida, acceder a una mayor estabilidad económica y contribuir a que la legendaria industria de la restauración de nuestra ciudad siga prosperando”, afirmó Ligia Guallpa, directora ejecutiva del Proyecto de Justicia Laboral.
La directora calificó la medida como un “momento histórico para la ciudad de Nueva York”, pese al rechazo de las aplicaciones como Uber Eats y DoorDash, así como de restaurantes locales que argumentan que esto solo empeorará las condiciones de los trabajadores al reducir los pedidos por los altos costos.
“Esta norma fijará el sueldo salarial para todos los repartidores esenciales que trabajan incansablemente, ya sea durante una pandemia, una tormenta de nieve o el humo de un incendio forestal, y a quienes se les ha negado un salario digno durante demasiado tiempo”, comentó Gullapa en un comunicado. “Aunque aún queda trabajo por hacer, un salario mínimo para los repartidores de comida transformará la vida de miles de familias de toda la ciudad y hará justicia a los repartidores, que hace tiempo que la necesitan”, agregó.
Por su parte, Josh Gold, portavoz de Uber Eats, aseguró que “la ciudad está mintiendo a los trabajadores de reparto: quieren que las aplicaciones financien este aumento, eliminando puestos de trabajo y reduciendo las propinas mientras obligan a los trabajadores restantes a entregar los pedidos más rápido”.
“Dado el proceso roto que resultó en una regla final de pago mínimo tan extrema, continuaremos explorando todos los caminos a seguir —incluyendo litigios— para asegurar que continuamos apoyando mejor a Dashers y protegiendo la flexibilidad de la que dependen tantos trabajadores de entrega como ellos”, respondió DoorDash en un comunicado.
La inédita aplicación del salario mínimo a los repartidores es producto de una ley aprobada por el Ayuntamiento de Nueva York en 2021, que exigía al Departamento de Protección del Consumidor y del Trabajador analizar las condiciones laborales y salariales de los repartidores de comida a domicilio a través de aplicaciones.
Por Jorge Hurtado-France24