El canciller sostuvo que la decisión de una fórmula de unidad Massa-Rossi fue inesperada, pero que eso no implicó una traición al embajador argentino en Brasil.
Santiago Cafiero, canciller argentino, se refirió a la negociación de Alberto Fernández con Lula da Silva en Brasil. “Nadie va a trabajar en contra de la unidad del peronismo”, declaró el exjefe de Gabinete en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9).
Eleonora Gosman nos dijo que ella cree que Lula tiene capacidad política para hacer que el BNDES le dé crédito a los exportadores brasileños para las importaciones en Argentina, sin necesidad de la garantía del Banco del BRICS. ¿Qué se logró económicamente respecto a este punto?
En primer lugar avanzar con la agenda bilateral, que tiene diferentes capítulos, que tienen que ver con la transferencia de tecnología y con la conectividad. Uno de los puntos importantes ayer era destrabar los pasos fronterizos, cuestiones culturales. La agenda bilateral es variada con nuestro principal socio comercial.
Es un capítulo financiero, para encontrar un financiamiento para las importaciones que hacemos de Brasil. Hacemos muchas importaciones que tienen que ver con insumos básicos o para la industria automotriz, conseguir mecanismos para financiar las importaciones que hacemos de empresas brasileñas es uno de los desafíos.
Todavía estamos buscando alternativas, hay diferentes opciones de financiamiento, algunas se han encontrado más sectoriales, como el financiamiento de los insumos para el segundo tramo del gasoducto. Se empiezan a armar trajes a medida y estamos tratando de generar un paraguas mayor para todo lo que son estas importaciones.
Es tan esencial, porque atrás de no detener las importaciones de estos insumos está que nuestras fábricas continúen en producción, que la actividad productiva e industrial de la Argentina continúe como vienen funcionando y reaccionando.
¿Creés que antes de fin de este mandato presidencial se conseguirá que el BNDES financie todas las importaciones que Argentina haga de productos brasileños?
Hasta aquí pudimos ir destrabando sectores, y confiamos en poder generar un sistema más robusto que nos permita financiar una mayor cantidad de sectores e insumos difundidos.
El 30% de energía eléctrica que la Argentina importa viene de Brasil, y logramos un financiamiento distinto. Se pagaba a 60 días y logramos pasarlo a pagar a 180 días. Ese tipo de acciones son puntuales pero hacen funcionar el capítulo financiero de la integración bilateral que tenemos con Brasil.
¿Cómo fue el clima del viaje a Brasil dos días después de que se bajara la candidatura de Daniel Scioli?
Bien, porque son dos dirigentes que tienen una gran amistad y se conocen hace años, la relación personal está intacta. Aparte hay una gran valoración de la tarea de Daniel Scioli en Brasil, la tarea que ha hecho es enorme, destacada, no solo por figuras del actual oficialismo sino también de la oposición
Y por todo el entramado productivo brasilero, Daniel es una persona que ha sido muy útil para poner en funcionamiento, sobre todo luego de la pandemia, los mecanismos comerciales para que Argentina y Brasil continúen siendo los socios y los motorcitos del Mercosur y la región, con lo cual, las conversaciones siempre van a esa dirección.
Hay una agenda de trabajo muy potente, ahora con desafíos políticos, que hacen que todos actuemos con un grado de responsabilidad necesario en este contexto y estamos todos de acuerdo y en esa página.
Y creemos que si todos trabajamos en esa dirección, para potenciar nuestras exportaciones, para contar cuál es el programa de desarrollo que le proponemos a los argentinos y argentinas, contando lo logrado y lo que falta, y cómo lograr lo que falta, me parece que ese será el camino que tendrá un impacto electoral positivo.
¿Te imaginabas el jueves a la noche cuando estabas en el acto con Daniel Scioli que 24 horas después los hechos iban a tomar el curso que tomaron?
No, la verdad que no lo pensaba. Pero también es cierto que, casi a lo Dante Panzeri, la unidad del peronismo es la dinámica de lo impensado, es un movimiento dinámico y sigo creyendo que la participación política es lo que amplía nuestro espacio.
Pero también es cierto que hay que escuchar todas las voces. Y lo que se terminó imponiendo es que los liderazgos de nuestro espacio acordaron avanzar en una fórmula de unidad, que puso a Sergio Massa y Agustín Rossi, y el sentido de la responsabilidad militante, cuando el peronismo se une, es también trabajar sin pedir nada a cambio y ponerse a disposición del espacio.
No quiero decirte otra cosa que no sea lo que siento como militante, y creo que la participación siempre es útil y también genera volumen. Victoria Tolosa Paz y yo estábamos muy comprometidos con las PASO, teniendo en cuenta que Cristina y Alberto no iban a estar en las boletas.
Entendimos que las PASO eran una posibilidad, pero luego hubo una solución superadora y hoy estamos todos tirando para el mismo lugar, porque en definitiva es un debate de políticas, de cómo vamos a hacer día a día para mejorarle la vida a los argentinos y como vamos a hacer para adelante.
Fuiste jefe de Gabinete, ¿no se hubiera solucionado lo mismo que pedían los gobernadores, como se le planteó ahora a Grabois, de una candidatura a presidente y vicepresidente, pero que en cada una de las provincias se compartan las mismas listas nacionales y en los casos en que la elección es simultánea con la presidencial las listas provinciales?
Probablemente sí, pero había otra decisión y no me parece mal. Nosotros teníamos, en ese momento, también un despliegue, pero efectivamente seguir hablando de lo que no sucedió nos parece que es como perder el tiempo, en el sentido que hoy hay que dedicarlo a construir una estrategia ganadora para el peronismo, para Unión por la Patria, donde todos los espacios estemos integrados y en un mismo camino, y donde ofrezcamos con mucha claridad a la ciudadanía, porque no hay mucho tiempo, un programa de gobierno y desarrollo que permita que la Argentina despegue de una vez.
En la gestión del Frente de Todos, como jefe de Gabinete, me tocó gestionar la pandemia y fue tomar decisiones muy inciertas y complicadas, y lo fuimos haciendo y sorteando, y después trabajar con equipos a partir de articular con el Poder Legislativo diferentes iniciativas, que nos permitieron llevar adelante el IFE, el ATP, programas de incentivos, luego la compra de vacunas, la campaña de vacunación más grande de la historia argentina.
Fueron decisiones que se construyeron a partir del pensamiento colectivo que tenemos los peronistas, de cómo mejoramos lo cotidiano y cómo ayudamos a que el sistema sea justo.
¿Existe la posibilidad de que Lula contribuya a la candidatura de Massa?
Lula se va a sentir muchísimo más cómodo y conforme con lo que el peronismo expresa, lo ha plateado una y mil veces, no tengo que hablar yo por él. Siempre se ha manifestado a favor de los movimientos populares, y Unión por la Patria es la expresión popular que va a tener el electorado en estas elecciones, tenemos que conectar eso con la agenda de la gente.
¿Cuál es la agenda de la gente? El desarrollo que tenemos que llevar adelante, en términos de actividad productiva, inserción laboral, estudiar y debatir el nuevo mercado laboral que hay en la Argentina, en profundidad.
Esa es la agenda que viene, porque este gobierno no pudo llevar adelante esas modificaciones, pudo recuperar la economía, pudo negociar con los acreedores y encontrar plazos para que la Argentina y la economía vuelva a crecer, tuvo que lidiar con la pandemia, la sequía y todos los obstáculos que hemos tenido.
Pusimos de pie la obra pública, hemos construido más de 100 mil viviendas, y cuando uno hace la comparación con el gobierno de Mauricio Macri ve que las cifras fueron tremendamente distintas, se ve donde estuvo puesto el foco de la gestión.
¿Para adelante cuál es la agenda? Es una agenda de desarrollo de las nuevas tecnologías, del entramado científico y tecnológico, de entender y comprender cuál es el nuevo mercado laboral en el que tenemos que operar para generar mayores derechos.
Somos peronistas, yo soy peronista de cuna, milito desde los 15 años y sabés cuál es mi compromiso social, pero también mi compromiso con los trabajadores: encontrar soluciones que permitan que los trabajadores tengan más derechos es parte del ADN del peronismo.
Hoy vemos que tenemos una recuperación y generación de empleo, pero por otra parte una gran precarización del trabajo. Por eso tenemos que trabajar en conjunto, encontrar soluciones creativas. El mercado laboral de este tiempo es absolutamente distinto a los que nos tenía acostumbrados el fordismo.
Alejandro Gomel (AG): Ayer Cristina contó cómo fue el cierre de listas y dejó muy mal parado al Presidente, ¿fue así o hay otra versión de lo que pasó?
Cada uno puede llegar a tener una apreciación de cómo fue el cierre y ese derrotero, y me parece razonable. Hoy los tiempos son otros, para trabajar por la candidatura de Massa, eso tenemos que hacer entre todos los compañeros y compañeras, los que tenemos responsabilidad de gestión.
Hay que aportar a que sea la candidatura que los argentinos elijan con esperanza, con una actitud positiva, y como alternativa a la derecha antidemocrática que se expresa en la otras opciones. Hoy estamos en una situación donde necesitamos ponernos a discutir y debatir ese programa necesario con justicia social que los argentinos y argentinas esperan.
Dar versiones sobre los cierres de listas no contribuye en nada a esto que hablamos, ni a la política exterior, ni como la Argentina se ve plantada ante el mundo, ni cómo vamos a hablar de los beneficios que nos trae a los argentinos ser parte de un integracionismo latinoamericano, esas son las discusiones y los debates.
Para los debates sobre operaciones de prensa e internismo no hay tiempo, tenemos que trabajar juntos para que sea un programa de desarrollo con justicia social.
AG: Lorena Scioli, la hija de Daniel, publicó un tuit en el que hablaba de traición. ¿Hubo una traición o destrato a Scioli por parte del presidente?
No hubo traición a Daniel Scioli. Por lo menos yo soy amigo y estaba convencido de que, en el camino de las PASO, la candidatura de Daniel era potente y creo en él como dirigente político. El contexto fue distinto, se modificó y el sentido de responsabilidad que tenemos los dirigentes, los militantes es aceptar y escuchar otras voces.
Esto no te trata de ponerse anteojeras con una convicción que puede ser genuina y avanzar sin escuchar al resto, no se puede hacer política así.
El peronismo es una construcción colectiva en la que no hay dueños ni no hay quien dirige hegemónicamente los destinos de nuestro movimiento. Nuestro movimiento es permanentemente dinámico, que está permanentemente modificando su composición porque de ese modo se va a adaptando e interpretando las nuevas demandas, eso es lo que nos hace fuertes a los peronistas.
El contexto fue ese y se fue modificando, y sobre eso el sentido de la responsabilidad de los distintos dirigentes fue avanzar en una fórmula distinta, en una síntesis que sea la de Massa-Rossi y el peronismo se encolumnó, y nadie va a trabajar en contra de la unidad del peronismo.