“Sudamos como en el infierno”. Decenas de millones de personas soportaron este domingo 16 de julio una canícula persistente en el hemisferio norte, con temperaturas extremas en Estados Unidos, Europa y Asia. Se trata de una nueva ilustración de los efectos del calentamiento global.
En Europa, donde el calentamiento progresa el doble de rápido que la media mundial, según los expertos, varios países soportaron temperaturas extremas.
En Italia, 16 ciudades están en alerta roja, con máximas de hasta 36 y 37 ºC.
Pese a ello, unos 15.000 peregrinos y turistas, según la gendarmería vaticana, se congregaron en la plaza de San Pedro para asistir al mediodía a la tradicional oración del Angelus del papa Francisco.
Entre ellos estaba François Mbemba, un sacerdote congoleño de 29 años, quien aseguró que en Roma “hace más calor que en África”.
Ola de calor a la vista en España
España se encontraba el domingo a las puertas de una nueva ola de calor —breve, eso sí— tras haber dejado atrás una semana sofocante cuyas consecuencias se sienten aún en la isla canaria de La Palma, donde un incendio quemó este fin de semana unas 5.000 hectáreas y obligó a evacuar a 4.000 personas.
La misma isla, frente a la costa noroccidental de África, ya sufrió las consecuencias devastadoras de la erupción de un volcán a finales de 2021.
La agencia meteorológica española (Aemet) emitió avisos naranja por altas temperaturas (38 a 42º C) en amplias zonas de la Península Ibérica y las islas Baleares el lunes, además de aviso rojo (peligro extremo), también el lunes, en zonas de Andalucía y el martes en Aragón, Cataluña y Mallorca (42 a 44º C).
En Grecia, donde se espera que las temperaturas bajen ligeramente, las autoridades decidieron que la Acrópolis de Atenas permanecería cerrada este domingo de la 1:00 de la tarde hasta a las 5:00 de la tarde (hora local).
Incendios en California
Estados Unidos no se libra. El país espera una ola de calor “extremadamente peligrosa” de California a Texas, según el Servicio Meteorológico Nacional norteamericano (NWS).
En el Valle de la Muerte, en California, el termómetro llegó escaló hasta 51° C y este domingo se esperan hasta 54° C.
Además de las altas temperaturas, el sur de California sufre violentos incendios que ya quemaron 1.214 hectáreas.
Al norte de Filadelfia, en Pensilvania, una breve inundación dejó tres muertos el sábado y cuatro personas siguen desaparecidas, indicaron los bomberos.
En Canadá ardieron ya este año más de 10 millones de hectáreas, un balance muy superior a lo que el país vivió en el pasado.
El balance sigue siendo provisional, con más de 900 fuegos activos en todo el país, de los cuales 570 están fuera de control, según el Centro Interservicios de Incendios Forestales (CIFFC, por sus siglas en inglés).
Lluvias en Asia
En Asia, las tormentas se suman al calor extremo.
En Japón, las autoridades emitieron una alerta por golpe de calor en 20 de las 47 prefecturas del país, con temperaturas cercanas a los 40º C.
En Tokio, donde la temperatura llegó a 36º C, “el solo hecho de pasearse ya te cansa”, comentó Coline Grison, una turista francesa de 24 años.
La ola de calor afecta el este y el suroeste del archipiélago nipón, en tanto que otras sufren lluvias torrenciales que dejaron al menos ocho víctimas en los últimos días.
En Corea del Sur, los socorristas tratan de salvar a personas atrapadas en un túnel inundado. El país se encuentra presenciando una serie de lluvias torrenciales que han dejado ya decenas de muertos.
China, a su vez, emitió varias alertas por altas temperaturas y advirtió que estas podrían alcanzar máximas de hasta 45º C en la región de Xinjiang (nordeste), parcialmente desértica, y 39º C en la región meridional de Guangxi.
El calor es uno de los eventos meteorológicos más mortíferos, recordó recientemente la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
El verano pasado, sólo en Europa murieron más de 60.000 personas a causa del calor, de acuerdo con un reciente estudio.