Tras el triunfo del candidato a presidente de Unión por la Patria Sergio Massa el domingo 22 de octubre, se abrió un nuevo capítulo en esta novela de ocupar el sillón de Rivadavia. Si bien aún hay una fecha de ballotage para el 19 de noviembre donde competirán Massa y Milei, las últimas movidas del tablero político desde que se conoció el resultado de la primera vuelta han cambiado terriblemente.
Como en su momento el presidente del Frente Nacional de Agrupaciones Peronistas Marcelo Puella, había dicho que: “El electorado no compra espejitos de colores” y semanas anteriores había manifestado que: “El argentino que vote a Milei no se pega un tiro en la pierna, sino que se lo pega a sus hijos y nietos”, hoy con una repuntada terrible en la primera vuelta de Massa y una caída abrupta de Milei, como así también de Bullrich, los votantes fueron a las urnas con la cabeza más despejada.
“Ya pasados tres días del “Massazo” que le dimos a la oposición, debemos dejarlos que sigan mostrando lo que son y lo que no son. No tienen ideales, ni convicciones, traicionan a la madre por un cargo y esas son las razones por las cuales estamos presenciando la destrucción total de Juntos por el Cambio y las mutaciones de La Libertad Avanza que, de hablar pestes de una candidata, en horas pasó a verla como una gran dirigente. Ambas fuerzas políticas traicionaron a sus votantes y al electorado de la ultraderecha y de la derecha, se venden por intereses personales sin pensar en la gente que les confió su voto. Mostraron que son una vergüenza. En los 40 años de democracia jamás vi tamaña falta de coherencia e idealismo”, dijo Puella.
Hoy los peronistas estamos concentrados en dar una verdadera paliza electoral en el ballotage y también trabajando en programas con medidas concretas de gobierno pensando en el 10 de diciembre. Debemos acompañar a Sergio Massa más que nunca de acá al 19 de noviembre, y luego poner a nuestros mejores hombres y mujeres en los lugares indicados para realizar un gobierno de unidad nacional, pero siendo conscientes que los caprichitos de algunos sectores del peronismo que no pueden ser atendidos a la hora de poner funcionarios. Ya nos pasó y nos fue mal. No se puede poner amigos en cargos sin que entiendan que es la función pública. No podemos poner a un barrabrava en cultura, no se puede designar a un psicopedagogo en inteligencia, ni a un economista en seguridad, como no es compatible designar a un psicólogo en obras públicas, ni a un prestamista en desarrollo social. De los errores hay que aprender y de eso seremos veedores como parte de esta coalición de gobierno que construimos (Unión por la Patria).
Tenemos cuadros políticos extremadamente preparados para todas las áreas y con sobrada experiencia en cada función a cumplir. Vamos a lograr un gobierno nacional y popular de cara a la gente, pero el que no esté a la altura de las circunstancias que colabore desde su casa.
Marcelo Puella aclaró que no se piden los cargos dentro del peronismo, “cuando se nos convoca estamos y punto, pero no hay que ponerle ninguna imposición a nuestro futuro presidente. Somos distintos. Para cambiar sus convicciones por un cargo esta Milei y Bullrich”.