El exmandatario ya lo había saludado el domingo, pero esta vez le envío un video. “Estoy orgulloso de vos”, afirmó.
El expresidente estadounidense, Donald Trumple envió un mensaje en video a Javier Milei tras su triunfo en el balotaje del domingo.
“Unas especiales felicitaciones a Javier Milei por la gran carrera por la presidencia de Argentina. Todo el mundo estaba mirando. Estoy orgulloso de vos. Vas a dar vuelta a tu país y hacer a la Argentina grande otra vez. Felicitaciones”, comentó.
Cómo se ve en Estados Unidos el triunfo de Javier Milei
Estados Unidos debe ver cómo cae la “moneda al aire” lanzada por los argentinos para calibrar sus relaciones con Javier Milei, porque la política del presidente electo puede generar tensiones, opinan expertos.
El gobierno de Joe Biden lo felicitó con prudencia, “diciendo que esperaban trabajar con él en valores compartidos, lo que es una forma sutil de decir que si Milei se aparta de las normas democráticas estarán preparados para criticarle e incluso potencialmente tratar de aislarle”, como sucedió con El Salvador o Guatemala, dijo a AFP Christopher Sabatini, investigador para América Latina en Chatham House.
Washington aprovechará para “estrechar relaciones en temas como Venezuela y aislar a Rusia por la invasión de Ucrania” pero “la posibilidad de que Milei socave las instituciones democráticas” en su afán por reformar Argentina provocará probablemente tensiones, añadió Sabatini.
Los estrechos vínculos ideológicos entre Donald Trump y Javier Milei
Será muy diferente si en 2024 gana las elecciones el expresidente Trump, probable rival de Biden en los comicios y al que comparan con Milei.
Es “probable que Trump vea a Milei como un acólito, que es a menudo lo que busca en las relaciones exteriores más que valores compartidos o alianzas estratégicas”, precisó Sabatini.
La admiración de Milei por Estados Unidos es directamente proporcional a su antipatía contra China.
A primera vista esto podría ser bien visto por Washington, que intenta a duras penas contrarrestar la influencia de Pekín en sus países vecinos.
Milei es el primer dirigente de una gran economía que expresa desprecio por el sistema político chino y una marcada preferencia por Estados Unidos, algo “particularmente inusual en América Latina, donde el no alineamiento se ha convertido casi en una creencia religiosa”, aseguró Benjamin Gedan, director del Programa Latinoamericano del Wilson Center.
Si sigue adelante con sus planes, China reducirá lazos con Argentina, de la que es su segundo socio comercial, pero “aún es pronto para saber cómo gobernará Milei como presidente”, en particular debido a que su contundente victoria se debió en parte a “un tono más moderado adoptado desde la primera vuelta” y al apoyo del expresidente liberal Mauricio Macri, dijo Jason Marczak, director del Centro Adrienne Arsht para América Latina, del Atlantic Council.
“Dadas las frágiles condiciones económicas de Argentina, es difícil imaginar que Milei ponga en peligro los lazos comerciales” del país con China, especialmente porque no está claro que Estados Unidos o Europa estén dispuestos a convertirse en grandes importadores de alimentos argentinos ni a invertir masivamente en autopistas, ferrocarriles y puertos, apuntó Gedan.
Así las cosas a Estados Unidos le toca esperar a ver los primeros pasos del presidente electo.