El Gobierno de Cuba, encabezado por Miguel Diaz-Canel, anunció medidas de ajuste para tratar de paliar la crisis económica que sufre con dureza la isla y que ha empujado a miles de cubanos a abandonar el país. El mandatario negó que este plan sea parte de un programa económico de corte “neoliberal”.
El aumento en el precio del combustible y la electricidad, y la reducción en los subsidios de la canasta de alimentos, son algunas de las medidas de ajuste anunciadas por el gobierno cubano, en la clausura del último periodo de sesiones de la Asamblea Nacional, el pasado viernes, en la que el presidente Miguel Diaz-Canel, aclaró que esto se debe a la crisis económica que sufre la isla.
El paquete de medidas, que generó preocupación, fue informado luego de los alarmantes datos que arrojó el Ministerio de Economía cubano: durante 2023, la economía se contrajo entre 1% y 2%, y una inflación que ronda el 30%.
Entretanto, el turismo, la principal actividad que genera ingresos a la isla, ha sufrido caídas significativas.
En su alocución durante la clausura de la Asamblea Nacional, Díaz-Canel dijo que son “decisiones complejas, como complejo es el momento” que atraviesa el país caribeño, que además reporta escasez de bienes básicos.
“Nada nos haría más felices que anunciarles que se suben los salarios y que tendremos divisas y combustibles suficientes para terminar con el agobio que provocan las carencias”, declaró el presidente cubano.
Ante las críticas contra el Gobierno, que advertían sobre la aplicación de un programa de ajuste de corte neoliberal, Díaz-Canel dijo: “Afirmo enfáticamente que para nada existe un paquete neoliberal contra el pueblo, ni una cruzada contra las mipymes (pequeñas empresas privadas), ni la eliminación de la canasta básica, como ya la contrarrevolución está poniendo en las matrices (de opinión)”.
El plan de ajuste del Gobierno cubano
Las medidas económicas fueron anunciadas el miércoles 20 de diciembre por el primer ministro Manuel Marrero. El programa implica aumentos en servicios básicos como el agua potable, el gas y la energía eléctrica, además del combustible.
Este plan, que implica un importante ajuste, proyecta reducir los subsidios estatales con el objetivo de equilibrar la economía.
La Cartilla de Racionamiento –un programa instaurado hace más de 60 años en el que se distribuyen alimentos– también será recortada, y los subsidios serán enviados a personas que para el Gobierno están en condiciones de vulnerabilidad.
“Hoy nosotros le subsidiamos lo mismo a un ancianito pensionado que al dueño de grandes negocios privados que tiene mucho dinero”, argumentó el presidente Díaz-Canel.
De acuerdo a un informe realizado por la agencia EFE, el azúcar y el café son los productos que más se han reducido en esa canasta de alimentos, siendo los últimos 20 años los más críticos.
Según ese informe, el café pasó de un promedio mensual de 2,2 onzas (62 gramos) en 1996, en medio de la gran crisis por la caída del bloque soviético -conocida en Cuba como el ‘periodo especial’-, para subir a las 7,3 (207 gramos) en 2003 y caer en 2023 a 0,7 onzas (20 gramos, es decir, 90% menos en las últimas dos décadas).
Mientras que para el azúcar refinado la media mensual en 1996 fue de 2,5 libras (1,1 kilos), en 2003 fueron 3,6 (1,6 kg) y en 2023 bajó a 1,7 libras (0,7 kg).
El informe señala que a Cuba le cuesta 1.600 millones de dólares anuales garantizar los alimentos de la canasta básica.
Así termina el año la economía cubana y sus proyecciones para 2024
La economía de Cuba, agobiada por las sanciones de Estados Unidos y el bloqueo económico hace más de 60 años, la escasez de turismo y los problemas que dejó la pandemia de Covid-19, está en crisis, con una escasez alarmante de combustible, alimentos y medicinas, un transporte público escaso y tensiones en aumento.
Según datos oficiales, Cuba registra un déficit de casi 19% de su PIB al finalizar el 2023, el mayor desde 1993.
Esto es acompañado por la inflación del mercado formal, que se estima que cierre el ejercicio en el entorno del 30%, siendo los alimentos los productos que más han sufrido variación de precios.
Y si bien los pronósticos del Gobierno esperaban que este año la economía creciera un 3%, la situación económica de la isla generó todo lo contrario: “Es posible que tengamos una contracción del producto interno bruto este año que podría ser de alrededor del 1% al 2%”, dijo el ministro de Economía de Cuba, Alejandro Gil en la sesión de fin de año de la Asamblea Nacional.
Eso implicaría que la economía se redujera hasta un 10% más que su nivel de 2019. Sin embargo, las autoridades económicas de la isla estiman una expansión del 2% en 2024, según informó Reuters.
Díaz-Canel señaló que las “profundas distorsiones y deformaciones estructurales” en la economía están afectadas por el reforzamiento del embargo económico de Estados Unidos, los efectos de la crisis en las relaciones económicas internacionales y también los “errores propios”.
Y recalcó que la situación de la isla es la de una “economía de guerra”.
Desde la cartera de Economía aseguraron que los ingresos por exportaciones fueron de 9,1 mil millones de dólares en 2023, en comparación con los 9.900 millones de dólares previstos y los 12.000 millones de dólares en 2019.
Mientras que para 2024, Cuba podría exportar 650 millones de dólares más en bienes y servicios, según el Ministerio de Economía, con la mayor cantidad de ganancias provenientes de sus principales industrias como el turismo, la farmacéutica y los servicios relacionados con la salud.
Por Martín Grippo-France24 con AP, EFE y Reuters