Uno de los mejores jugadores de la historia del tenis logró su segundo triunfo en lo que va del 2024 y se prepara para enfrentar en cuartos de final al local Jordan Thompson.
El periodista deportivo, Román Iucht, informó sobre la victoria del histórico tenista español, Rafael Nadal, en Australia, en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio Amadeus (FM 91.1).
Hay que ver la portada de distintos medios españoles tratando de encontrar un equilibrio. Algunos ya lo ponen como ganador de Roland Garros, cuando recién jugó su segundo partido en el retorno.
Es cierto que todo lo que hace obliga, por un lado, al equilibrio y, por el otro, a encontrar adjetivos calificativos que logren encontrar un punto de equilibrio exacto en su dimensión. Lo cierto es que el retorno es con todos esos signos vitales que siempre muestra: un grado de intensidad único, un nivel de competitividad inigualable.
Disputó su segundo partido en Brisbane, Australia, apenas cedió tres games (6-1 y 6-2) para ganarle al local Jason Kubler (102 del ranking mundial) en una hora y 20 minutos.
También de esas costumbres que Nadal tiene a partir de su ritmo, en un momento pidió ir al vestuario, volvió y le aplicaron una advertencia (warning) por demorarse un poco más de lo que el reglamento permite. Cuando terminó el partido y le preguntaron qué había ocurrido dijo: “Brisbane es tan húmedo que tuve que ir al vestuario y cambiarle la ropa por completo”. Así juega Nadal. Cuando uno lo ve, deja hasta la última gota de sudor.
Se clasificó para los cuartos de final, fue la victoria 1070 de su carrera y está cuarto entre los más ganadores de todos los tiempos y cada vez más cerca de Novak Djokovic, Roger Federer y Jimmy Connors, que es el que más victorias obtuvo a lo largo de toda su carrera.
Estará jugando frente a Jordan Thompson en cuartos de final, después en un eventual partido de semis podría toparse con el búlgaro Grigor Dimitrov y si llegara al encuentro decisivo aparecería el preclasificado número 1 Holguer Rune.
Falta bastante para ello, pero con Nadal cómo no hacer, como efectivamente pasa con los medios españoles, para no ilusionarse para un jugador que sobrepasó todos los récords y obligó a los seguidores a adjudicarle adjetivos calificativos que lo puedan dimensionar como un verdadero mago del mundo del deporte, una maravilla de todo lo que implica superarse día a día.