El médico, que se encuentra detenido en el penal de Ezeiza, se refirió a las acusaciones que recibió y detalló cómo es su rutina en prisión.
Aníbal Lotocki está detenido en el penal de Ezeiza desde octubre del año pasado, hace más de 85 días. En una entrevista exclusiva con Matías Vázquez para Socios del espectáculo (eltrece), el médico habló sobre las acusaciones que recibió y se mostró en desacuerdo con su prisión preventiva.
“No esperaba este presente, no estaba en mis planes. No me parece algo justo hacer una prisión preventiva sin tener ningún tipo de condena. No debería esta acá”, aseguró.
En ese sentido, explicó que la Justicia tomó esa decisión luego de que él se cambiara de domicilio sin aviso previo debido a los escraches que le hacían en su casa: “Dijeron que hay riesgo procesal porque me mudé de casa y determinó esta prisión. Supongo que mi situación se podrá revertir en el transcurso de los próximos meses porque si no voy a tener que esperar el juicio (por la muerte de Cristian Zárate) acá”.
Indignado por esto, agregó: “La cuestión es que si soy absuelto, pagué un montón de tiempo de prisión siendo inocente. Nadie me devuelve el tiempo”.
Cómo son los días de Aníbal Lotocki en la cárcel
Durante la nota con el ciclo televisivo conducido por Adrián Pallares y Rodrigo Lussich, Lotocki describió cómo son sus días en la cárcel. “Ahora estaba haciendo un poco de gimnasia. En principio no hay mucho para hacer acá. Hay un salón de usos múltiples donde desayunamos y almorzamos”, comentó sobre el penal.
Acto seguido, habló de su itinerario: “Yo me levanto a las 7:30, cuando nos abren la celda para salir a calentar agua o tomar un café. Leo mucho y estudio porque no me gusta jugar a las cartas o a los dados y acá hay varios juegos de mesa”.
“Cuando uno está encerrado tiene mucho tiempo para reflexionar. Tuve tiempo de hacerlo y de escribir un libro que estará listo para editar en los próximos meses. Creo que es momento de hablar. Yo nunca he hablado, no he sabido hacerme escuchar y creo que ese fue un gran defecto, porque dejé que se hablara mucho”, explicó.
En cuanto la relación que mantiene con los otros detenidos, aseguró que es muy cordial: “Es un pabellón de buena conducta, es toda gente tranquila, humanitaria, muy gentil y generosa”.
Aníbal Lotocki reveló la condición médica que no puede tratar en la cárcel
Cuando el periodista le preguntó si era cierto que recibía beneficios en el penal de Ezeiza, Lotocki fue contundente: “No tengo ningún privilegio en absoluto”. Para ejemplificar eso, explicó que no puede hacer el tratamiento por una condición médica que padece.
“Las celdas son muy pequeñas. Ahora con los días de calor pedí un ventilador porque sufro un trastorno de transpiración excesiva y hago un tratamiento dos veces al año que acá no lo pueden hacer porque es costoso”, detalló. Y agregó: “Fui al médico y me recomendó tener un ventilador. Me dijeron que tenía que pedirlo por el juzgado, el juez lo autorizó y ahora el servicio no me lo quiere dar”.
Además, contó otra situación similar que vivió cuando recién ingresó a Ezeiza: “Cuando me detuvieron pedí una computadora para no perder unas clases que estaba haciendo y me la negaron”.
Qué dijo Aníbal Lotocki sobre las denuncias de mala praxis que recibió
Al ser consultado por las denuncias que recibió ante la Justicia, Aníbal Lotocki fue letal: “No son víctimas, son denunciantes. Yo siempre lo dije, yo usé un producto aprobado por la ANMAT. La verdad es que no veo que haya hecho nada grave. Me condenaron por un efecto colateral que supuestamente produce el producto”.
“Ahora hicimos un análisis y vimos que el producto está adulterado, que no tiene lo que dice el fabricante que tiene. Hicimos una denuncia penal que será ratificada próximamente. Hay un Estado que tenía que controlar y no controló y un fabricante que dijo que el producto era de una manera y lo hizo de otra”, comentó respecto de la nueva demanda que inició ante la Justicia.
Aníbal Lotocki denunció que le vendieron productos adulterados. (Foto: Captura eltrece)
En cuanto a las especulaciones que indicaban que se trataba de una nueva estrategia legal, el médico lo negó rotundamente: “Podría ser una estrategia si el producto no estuviera alterado. Si está alterado, el responsable no soy yo”.
Para cerrar, el entrevistado dejó en claro que no estaba preocupado y que “dormía tranquilo”: “No veo el panorama tan oscuro como lo ves vos, no creo que empeore la condena. El caso de Silvina Luna fue juzgado. Si bien tiene un doble conforme, ahora hay una nueva revisión del Tribunal de Casación, que me duplicó la condena a 8 años y me sumó un delito del que yo estaba absuelto. Esperamos tener novedades favorables”.
Fuente: TN