La pizarra mostró 144 a favor y 109 en contra, pero la votación del articulado pasó para el martes. Impuesto País, privatizaciones y deuda, trabado. Más rosca.
Después de tres días y más de 30 horas de debate en la Cámara de Diputados, el presidente Javier Milei sufrió una derrota parcial: el proyecto denominado ley ómnibus sólo se aprobó en general y se postergó hasta el martes el tratamiento del artículado -necesario para su aprobación definitiva- hasta que haya un consenso entre los gobernadores y la Casa Rosada. Los eventuales aliados del Gobierno aplicaron una martingala reglamentaria para conservar en el texto final la continuidad del Impuesto País, que los mandatarios exigen coparticipar. Siguen trabados otros capítulos clave, como privatizaciones y deuda externa.
La definición llegó después de una nueva reunión entre funcionarios nacionales y referentes de los bloques dialoguistas, que son la UCR, Hacemos Coalición Federal (HCF) e Innovación Federal, que representa a los partidos provinciales. El contingente de la Casa Rosada fue liderado por el vicejefe de Gabinete, José Rolandi, y el ministro del Interior, Guillermo Francos. Por presión del gobernador cordobés Martín Llaryora, la oposición amigable volvió a exigir coparticipar el Impuesto País y chocó contra la negativa de Milei.
Llaryora arrastró a sus colegas más propensos a esperar un llamado posterior del Presidente, quien sólo acepta discutir impuestos cuando le sancionen la ley ómnibus. La tensión Nación – provincias complicó la negociación del articulado.
Por Mauricio Cantando-LP