Misiones Para Todos

La frase que desencadenó el crimen de Dante, el jugador de inferiores de Racing

Dante Cantero Barrientos intercedió en un conflicto entre dos mujeres que se peleaban por un hombre. Recibió un golpe en el estómago, pero luego fue asesinado de tres balazos. Su familia pide justicia.

“¿Qué mirás a mi marido?”, fue la frase que salió de la boca de Vanesa Báez (30) cuando caminaba junto a su pareja, Martín Malaquies, por una plaza Avellaneda. La advertencia tenía una destinataria: Priscila, de 14 años. La discusión elevó con el paso de los minutos y terminó con el peor desenlace: el crimen de Dante Cantero Barrientos, que intervino para separar a ambas mujeres.

El dramático episodio se produjo durante la madrugada del sábado pasado. De acuerdo al testimonio que brindó la familia de la víctima a TN, Dante volvía de la casa de su novia caminando, cuando se encontró con un grupo de amigos en una plaza.

Apenas unos minutos de charla alcanzaron para que aparecieran en escena dos de los tres sospechosos de haberlo matado. Fue ahí que llegó la advertencia para la adolescente de 14 años.

Sin embargo, la amenaza se hizo realidad y Báez rompió una botella de vidrio para tratar de atacar a Priscila. Fue en ese instante que el jugador de las inferiores de Racing intervino en la agresión y trató de separarlas, pero Malaquies, para defender a su novia, le pegó a Dante una piña en el estómago.

La discusión duró unos instantes y luego la pareja se fue por donde vino. El resto de los jóvenes se quedó en la plaza un rato más, comentando lo sucedido e imaginando que la violencia había terminado durante esa madrugada. Pero no fue así.

Dante había comenzado a jugar en el Club Atlético Levalle de Villa Tranquila. (Foto: gentileza familia Barrientos).
Dante había comenzado a jugar en el Club Atlético Levalle de Villa Tranquila. (Foto: gentileza familia Barrientos).

“Martín volvió en un auto manejado por Damián Báez, hermano de Vanesa”, reveló Maira, tía de la víctima. Dante y sus amigos los vieron llegar y, según su relato, intentaron correr.

“Dante estaba escondido atrás de un árbol y recibió tres disparos”, contó. Así de rápido como llegaron, los sospechosos escaparon.

Varios días tuvieron que pasar para que Vanesa Báez fuera detenida. Aún así, continúan prófugos tanto Martín Malaquies y Damián Báez, pareja y hermano de la imputada.

La familia de Dante denuncia negligencia por parte de la policía a la hora de encontrar a los prófugos: “La policía no hizo ningún allanamiento hasta las primeras horas del lunes. Mientras todos los vecinos de Villa Tranquila nos mandaban cómo los sospechosos se movían y en qué auto”.

Dante Canteros Barrientos, la víctima. (Foto: Facebook/Primero De Marzo Villa Tranquila).
Dante Canteros Barrientos, la víctima. (Foto: Facebook/Primero De Marzo Villa Tranquila).

“El mismo sábado, Martín Malaquies llegó a su casa, cargó los bolsos y se escondió hasta tarde. Al día siguiente nos dijeron que fue a ver el partido de San Telmo, donde todos los chicos fueron y al que Dante iba a ir”, sumó.

“El comisario nunca se comunicó con la madre de Dante y recién el martes le escribió, pero ella ya no quiso hablarle”, dijo la mujer, al mismo tiempo que denunció una particular relación entre la policía y Malaquies, que ya estuvo preso por venta de drogas.

Este lunes fueron citados por el secretario de Seguridad de Avellaneda, Alejo Chornobroff, quien se enteró de las novedades de la causa por boca de la familia de Dante: “No sabía que había una tercera persona involucrada en el caso, le contamos nosotros”.

En ese sentido, aseguró: “Damián Báez le prestó el arma y llevó hasta el lugar a Martín”.

La historia de Dante Cantero Barrientos, el jugador de inferiores de Racing asesinado

Dante Cantero Barrientos tuvo una corta vida ligada al fútbol. Desde sus inicios en el Club Atlético Levalle de Villa Tranquila, sus técnicos le veían condiciones para elevar el nivel y probarse en clubes profesionales.

“Era el terror del baby, todos los clubes lo veían jugar y veían el partido perdido. Era mágico ´el negro´”, contó Sandra, otra de sus tías, sobre los inicios futbolísticos del adolescente de 14 años.

En 2022 terminó su etapa en el club que lo vio nacer y pasó a las grandes ligas: empezó en Independiente, siguió en Arsenal de Sarandí y había pasado a jugar en Racing Club no hace mucho tiempo.

El sueño de ser futbolista lo mantenía latente, con la idea fija de ayudar económicamente a su familia: “A nosotros nos decía ´yo voy a ser famoso y la voy a sacar a mi mamá de acá´”, contaron sus tías a TN.

En paralelo, nunca dejó de vincularse con el club de sus amores y continuó trabajando ahí: “Seguía de ayudante de DT y tenía a sus nenes de la categoría 2011. Él estaba para todos, para el club, para los nenes y para ayudar en lo que pudiera”.

Por eso perdura la bronca entre la comunidad futbolera de Avellaneda: “Todo el mundo decía que él era muy bueno, siempre respetuoso. Todos los clubes de Avellaneda nos mandaron las condolencias. Es una pérdida muy grande para la familia y para el barrio”.

Por Gonzalo Molina Prado-TN