De campus en campus, incluyendo a Princeton, Columbia y Harvard, son cada vez más los estudiantes que manifiestan su apoyo a la causa palestina y reclaman que cese el apoyo estadounidense al ejército israelí en Gaza. Tuvieron el apoyo de Biden y Trump los comparó con el trágico mitin en Charlottesville.
Mientras escala la tensión y se producen cientos de detenciones, con estudiantes que se enfrentan y desafían a la policía antidisturbios, los actos de apoyo a los palestinos se están convirtiendo en una ola en expansión en las universidades de Estados Unidos: de campus en campus, se multiplican las protestas diariamente y las autoridades educativas actúan bajo una creciente tensión.
De Los Ángeles (oeste) a Nueva York (este), de Austin (sur) a Boston (noreste), el movimiento estudiantil propalestino crece cada hora, tras su inicio hace una semana en la Universidad de Columbia, en Nueva York.
Este centro había dado como fecha límite la medianoche del jueves para que los manifestantes abandonaran su campamento, pero sus responsables dieron finalmente marcha atrás. El movimiento abarca a varias de las más prestigiosas universidades estadounidenses, como Princeton y Harvard.
Grupos de estudiantes montan carpas en los campus para denunciar el apoyo militar estadounidense a Israel y la dramática situación humanitaria en la Franja de Gaza.
El miércoles por la tarde, más de un centenar de manifestantes fueron detenidos cerca del Emerson College, una universidad de Boston. A miles de kilómetros de distancia, agentes a caballo arrestaron a decenas de estudiantes de la Universidad de Texas, en Austin.
También, en el campus de la Universidad del Sur de California (USC) en Los Ángeles, donde detuvieron a 93 personas por invasión de propiedad privada.
La USC optó por dejar el campus cerrado “hasta nuevo aviso” y canceló su principal ceremonia de graduación este año, debido a “las nuevas medidas de seguridad”.
En el campus de la universidad de Emory, en Atlanta (sureste), los manifestantes fueron desalojados a la fuerza por la policía, que incluso arrojó al piso a algunos de ellos para detenerlos, según imágenes de un fotógrafo de la AFP. La policía de Atlanta admitió haber usado sustancias “químicas irritantes” ante la “violencia” de algunos de los manifestantes.
En la Universidad de Columbia, cuna del movimiento, la oficina de la rectora Minouche Shafik dijo que los diálogos con los estudiantes “han mostrado avances y continúan según lo planeado”. “Tenemos nuestras demandas; ellos tienen las suyas”, postuló.
Las protestas, una ola creciente
A pesar de los arrestos, el movimiento de protesta aumenta. En la universidad UCLA, en Los Angeles, más de 200 estudiantes instalaron un campamento con unas 30 carpas, rodeado de pancartas. “Durante 201 días el mundo ha asistido en silencio al asesinato por parte de Israel de más de 30.000 palestinos”, señalaron los organizadores de la protesta en una declaración.
“La UCLA se une hoy a los estudiantes que alrededor del país exigen a sus universidades que se separen de las empresas que benefician de la ocupación, el apartheid y el genocidio en Palestina”, añadieron. En Austin, cerca de 2.000 estudiantes se manifestaron el jueves en el campus de la universidad de Texas, al grito de “Liberen a Palestina”.
Para Kit Belgium, profesora en Texas, la universidad debe asegurar “la libertad de expresión y el libre debate de ideas”. “Y si la universidad no puede tolerar esto, entonces no merece llamarse así”, dijo a la AFP. Cerca de una de las concentraciones a favor de Gaza, una treintena de estudiantes organizó una contramanifestación.
Jasmine Rad, estudiante judía de la universidad de Texas, considera que las manifestaciones de apoyo a Gaza son “peligrosas”. “Les hacen daño a los estudiantes judíos y a los que no se sienten seguros por la violencia en nuestro campus”, explicó la estudiante de periodismo de 19 años.
Las autoridades temen que las protestas propaguen los incidentes antisemitas
El expresidente y candidato republicano Donald Trump condenó este jueves las manifestaciones y dijo que el nivel de “odio” es mucho mayor que el del trágico mitin de la extrema derecha en Charlottesville en 2017, que dejó un muerto y 19 heridos.
“Tenemos protestas por todas partes”, dijo Trump a los periodistas a la salida de la sala del tribunal de Manhattan donde es juzgado por falsificación de registros comerciales. “Charlottesville fue insignificante, y no fue nada en comparación con esto. El odio no era del mismo tipo del que hay aquí, es un odio tremendo”, sostuvo.
Por su parte, el equipo de campaña del presidente Joe Biden replicó con una publicación de videos del mitin de Charlottesville en los que se ve a “miembros neonazis y del KKK” empuñando antorchas y gritando “¡Los judíos no nos reemplazarán!”. Biden respaldó el derecho de los estudiantes a la libertad de expresión, al tiempo que rechazó la posibilidad de actos antisemitas.