El exarquero de Vélez está implicado en la causa por presunto abuso sexual de una chica en Tucumán.
Este jueves se dieron a conocer los mensajes privados que Sebastián Sosa le mandó a su esposa, Stephani Correa, entre la noche del sábado 2 de marzo y la madrugada del domingo, cuando habría ocurrido el abuso sexual de la joven tucumana. Días más tarde, la víctima lo denunció a él y a otros tres exjugadores de Vélez por abuso sexual. A raíz de esta situación, se reveló un dato desconocido hasta el momento y que puede tener mucho impacto en la causa: el arquero tiene un “Whatsapp secundario”.
En su declaración ante la Justicia, Sosa reconoció tener un “Whatsapp secundario” porque su esposa solía revisarle el celular. “Le empecé a mandar mensajes (a la denunciante) desde otro Whatsapp en mi celular”, reconoció. Además, tuvo una frase que generó un enorme revuelo: “Por suerte los mandé por ahí, porque si no los hubiera borrado para no tener problemas con mi señora”.
Al mismo tiempo, aseguró que al mandar mensajes por esta vía oculta, no tuvo la necesidad de borrar nada de la conversación. “Si yo hubiera mandado de mi número oficial, hubiera borrado todo como le pedí a ella. Si mi señora está viendo el Whatsapp web tal vez me meto en un lío por una boludez. No desestimo el tema de que alguien venga a tomar algo al hotel. No borré ni un mensaje de esa conversación, está todo para exponerlo”, sostuvo.
Qué dijo Sebastián Sosa en su declaración ante la Justicia de Tucumán
Respecto de lo que ocurrió en el hotel de Tucumán, Sosa comentó: “Yo seguí la nuestra ahí, me pareció que algo comentaron. Cuando miro, Florentín la estaba masajeando (a la denunciante), había música también, fue una cuestión de ellos. Estuvieron masaje va y masaje viene. Nunca la vi incómoda, en ningún momento. Se lo dije a ella, que no la vi mal”.
“Hasta ahí pude ver. Después el ‘paragua’ le da un beso, la situación se puso cachonda entre ellos. Yo ya había conversado con mi señora y le había dicho hace unos minutos que me quería dormir, se me había apagado un poco la energía. Escucho unos besos, que se ponen cachondos, apagué la tele, quedó música de fondo. No veo, pero escucho situaciones de besos y cachondeo. Escucho gemidos también. Seguido ese acto, me di vuelta y me dormí. Un rato largo después escuché conversaciones, no sé cuánto dormí. Distingo conversaciones de Osorio con ella, había risas”, continuó.
La denunciante señaló que estas declaraciones son contradictorias: aunque, por un lado, Sosa dice haber visto que “todo era normal”, por el otro lado sostiene que se quedó dormido.
Cuál es la situación de Sebastián Sosa en la causa
La Justicia tucumana consideró hasta el momento que Sosa tuvo una participación secundaria en la causa por abuso sexual. La jueza dictaminó la libertad del arquero, que pagó una caución de 50 millones de pesos.
En los últimos días, Vélez rescindió los contratos de los cuatro futbolistas implicados en la causa.