El periodista de 52 años se llevó una de las ovaciones más grande de la gala dl Martín Fierro de la Radio, donde fue premiado por su labor como Comentarista Deportivo. Su emotivo discurso en el salón Ocre de La Rural, los saludos de los colegas y su reflexión: “Les pido a todos ustedes que piensen en el hoy”
En 2021, a Emiliano Pinsónle diagnosticaron Parkinson. Lejos de bajar los brazos, el periodista deportivo de 52 años decidió pelearla. En abril pasado, sin embargo, le dijeron que el diagnóstico cambió. “Tengo unParkinson atípico, eso quiere decir que no es el Parkinson rígido como estaba diagnosticado en un principio. Es uno que no está bien estudiado y varía su desarrollo. No es como el rígido que tiene una conducta temblorosa y es operable. Mi problema es en el cerebelo, es decir, que no se puede operar, porque no se puede llegar hasta allá”, detalló. En medio de su valiente lucha, este domingo, ganó un Martín Fierro de la Radio como mejor comentarista deportivoy se llevó la ovación más grande de la noche en el Salón Ocre de La Rural.
“Hace tres años y medio me diagnosticaron Parkinson.Tuve mucho miedo en decirlo, no me animaba, tenía vergüenza, y, sin embargo, hubo gente de la radio que me dijo: ‘Te queremos en un programa a la mañana’”, señaló con gratitud. Y siguió: “No es fácil dejar que te aten los cordones o te corten la comida. Al principio me daba vergüenza, pero luego entendí que mi vida tenía que ser así”. En el mismo sentido, aseguró que “del Parkinson no se sale solo, se sale con gente, con amigos, con oyentes, con televidentes, con la fuerza que me dan salgo para adelante”.
“No soy valiente, quiero vivir, por eso avanzo, porque el pasado es algo que no puedo arreglar, el futuro no depende de mí sino del ahora, y mi ahora es ser un tipo feliz. Estoy enfermo, soy un tipo feliz y avanzo. Es lo que les pido a todos ustedes, que piensen en el hoy, no tanto en lo que pasó y digan un: ‘Te quiero’, porque el amor sana”, sostuvo.
Sus palabras calaron hondo en la noche que galardonó a la AM y la FM. Tan es así que, al bajar del escenario, varios colegas se acercaron a saludarlo; entre ellos, la periodista Sofía Martínez, con quien Emiliano compartió la terna a Comentarista Deportivo. “Perdí mi terna, pero la ganó el gran Emi Pinsón”, celebró la integrante de Perros de la Calle (Urbana Play).
La periodista Sofía Martínez celebró el premio de Emiliano Pinsón, con quien compartía terna (Foto/@sofimartinez)
El diagnóstico, sorpresivo
Emiliano tiene 52 años y es papá de Joaquín, Valentín y Victoria. Hace casi tres años y medio, luego de tener una serie de episodios y realizarse estudios médicos, le diagnosticaron Parkinson. En julio de 2022 lo contó públicamente y sorprendió a la audiencia. Tras su segundo diagnóstico, en abril de 2024, el periodista le concedió un extenso reportaje a Infobae, en el que habló del impacto de esta noticia en su vida.
“Nunca me pregunté por qué a mí. Había escuchado una vez que había mucha gente que, ante estas situaciones, se preguntaba: ‘¿Por qué a mí?’. Me tocó. No se sabe el origen de la enfermedad. No solo el mío, sino el de la enfermedad en general. Hay un porcentaje chico de que se sea genérico, hereditario, pero hay un 70% que no se sabe el origen. Cuando me dieron el segundo diagnóstico, lo recibí con mucho dolor. Como cuando te duele la garganta porque tenés hasta gritos. Yo estaba ordenado, veníamos bien. El Parkinson tiene los primeros cinco años que se llaman luna de miel porque no tenés tanto dolor, después los segundos cinco años de la enfermedad tenés algunos problemitas más, pero va todo muy paulatino”, le dijo a Leo Montero.
Y siguió: “Antes, cuando era más chico, le tenía miedo a la muerte, a lo desconocido. Pero ahora, no porque me pase pronto, pero por lo menos yo ya sé que me va a pasar, todos sabemos que nos va a pasar, pero hay un momento en el que te sentís inmortal y no te importa nada. Ahora me doy cuenta de que soy mortal y tampoco lo vivo como una locura, me quitó peso. Aprendí a valorar la vida desde otro lugar porque antes priorizaba tal vez la guita y ahora me doy cuenta de que es importante, pero no es lo más importante”.
Emiliano Pinsón se ganó el Martín Fierro por su desempeño como Comentarista Deportivo en D Sports (Foto/@emipinson)
El amor como gran motor
Mucho antes de hacer público su diagnóstico, Emiliano mantuvo una conversación con sus tres hijos y les contó qué era lo que estaba sucediendo con su salud. Según él, ese acompañamiento fue y sigue siendo fundamental en su día a día para seguir luchando contra una enfermedad que, aunque lentamente, avanza.
Aun en medio de este proceso, el periodista, que estaba separado de la madre de sus hijos, a fines de 2023 se enamoró de manera sorpresiva de Laura Garces. “Nos conocimos de chicos y nos volvimos a encontrar de grandes por Instagram. Empezamos a tirarnos un par de mensajes, pero no para vernos sino hablando pavadas. Y a fines del año pasado nos escribimos y se dio para vernos después de 30 y pico, 40 años”, contó Pinsón. “Más allá de que me enamoré por lo que es como mujer, me cuida y me protege mucho”, sumó.
Al amor de la familia se suma el de los conocidos y no tan conocidos. “El amor que recibí en este tiempo es impresionante, la energía que me trasmiten los seguidores de mis redes sociales. No me imaginaba esto. Te mandan fuerza en sus mensajes. También recibí muestras de afecto de muchísimos periodistas deportivos y de jugadores con los que me llevo bien, pero no soy amigo. Me han escrito, por ejemplo, Oscar Córdoba, Erik Lamela, jugadores con quienes yo no tengo mucha relación, otros jugadores tal vez no tan conocidos, pero siempre muy educados: ‘Dale para adelante, metele’. Exjugadores como el Coco Capria y Fernando Quiroz; y algunos tenistas, como Nicolás Lapentti”, destacó.
Emiliano Pinsón y su pareja, Laura Garces
Ante todo, un resiliente
Acerca de su día a día, Pinzón contó cómo encara los dolores y por qué siempre intenta mirar hacia adelante. “Hago ejercicios para estirarme. Pero después, pasa como en la película Como si fuera la primera vez, de Adam Sandler y Drew Barrymore, donde él tiene que enamorarla todos los días. Hay días que salgo y digo: ‘Que bien que estoy’ y al otro día hago lo mismo y me duele todo. Es día a día, pero soy feliz a pesar del Parkinson. Sé que la pelea la perdés. Es inexorable, pero haré como Chuck Wepner, el boxeador que se le plantó a Muhammad Ali, que fue para muchos el espíritu de Rocky o de Stallone. El tipo dijo: ‘Yo quiero durar los 15 rounds’ y yo le voy a meter batalla hasta el 12, porque ahora hay menos rounds. La cabeza a mí me funciona y soy muy optimista, siempre lo fui; por lo tanto, de ahí no me van a poder sacar. Si aflojo ahí, si me detengo en los dolores, me caigo. Entonces, siempre tenés que mirar para adelante. A veces es mejor no ser tan inteligente ni pensar tanto las cosas y avanzar. Lo que pasó no tiene solución”, sostuvo.
Y cerró: “Si me tuviera que definir en una sola palabra, diría que soy un resiliente. Lo que deseo, es que el día de mañana mis hijos digan: ‘Mi viejo la peleó y se la bancó’. Y que eso les sirva en la vida, a ellos, en cualquier orden de la vida, que la peleen”.