Arabia Saudita dijo el domingo que más de 1.300 fieles murieron durante la peregrinación anual a La Meca que tuvo lugar durante un intenso calor este año, y que la mayoría de los fallecidos no tenían permisos oficiales. Hasta el domingo, Riad no había comentado públicamente sobre las muertes ni había proporcionado un número de víctimas.
Arabia Saudita anunció el domingo 23 de junio la muerte de 1.301 peregrinos durante la gran peregrinación musulmana celebrada en los últimos días en Arabia Saudita bajo un calor abrasador, precisando que la mayoría no tenía autorizaciones para esta reunión anual.
“Desafortunadamente, el número de muertos llegó a 1.301, al 83% de los cuales no se les permitió realizar el hajj. Habían viajado largas distancias bajo el sol, sin refugio ni comodidad adecuados”, informó la agencia estatal de noticias Saudi SPA.
El sábado, un recuento de la agencia de prensa francesa AFP basado en declaraciones oficiales y fuentes diplomáticas implicadas en la búsqueda de los peregrinos fallecidos cifraba el número de víctimas en cerca de 1.100.
Diplomáticos de países árabes dijeron a la AFP que 658 eran egipcios, de los cuales 630 no tenían autorización oficial para la peregrinación. Un gran número de muertes se debe al calor.
El hajj se celebró del 14 al 19 de junio en el oeste del reino. Hasta el domingo, Riad no había comentado públicamente sobre las muertes ni había proporcionado un número de víctimas.
El ministro de Sanidad calificó de “éxito” la gestión de la peregrinación
El viernes, un alto funcionario saudita indicó a la AFP un balance parcial de 577 muertos durante los dos días más intensos del hajj: el 15 de junio, cuando los peregrinos se reúnen durante horas en el Monte Arafat, y el 16 de junio, cuando participan en el ritual de “lapidación del diablo” en Mina, a unos cinco kilómetros de La Meca, en el desierto.
Este funcionario defendió la reacción de las autoridades: “el Estado no falló, pero hubo un error de valoración por parte de personas que no midieron los riesgos”.
El ministro saudita de Sanidad, Fahd Al-Jalajel, calificó el domingo de “éxito” la gestión de la gran peregrinación musulmana, según SPA.
Dijo que el sistema de salud había “proporcionado más de 465.000 servicios de tratamiento especializado, incluidos 141.000 servicios a aquellos que no han obtenido el permiso oficial para realizar el hajj”, según la misma fuente.
El hajj es uno de los cinco pilares del Islam que todo musulmán que pueda permitírselo debe realizar al menos una vez en su vida, en un período determinado por el calendario musulmán, basado en los ciclos lunares.
Según las autoridades, este año participaron 1,8 millones de peregrinos, la mayoría procedentes del extranjero.
Los rituales volvieron a celebrarse este año con temperaturas muy altas, que alcanzaron los 51,8 grados centígrados en la Gran Mezquita de La Meca, la ciudad más sagrada del islam, en el oeste de Arabia Saudita.
Cada año, decenas de miles de fieles intentan participar en la peregrinación sin disponer de los permisos necesarios, pagados y concedidos según cuotas y a altos precios, que dan acceso, en particular, a instalaciones climatizadas.
France 24