Milei consiguió que el Poder Legislativo le apruebe la ley Bases con el voto de todos los representantes misioneros, tanto de la Renovación como de la oposición. La máxima de “gobernabilidad con gobernabilidad se paga” volvió a beneficiar al misionerismo y dejó al desnudo la histórica incapacidad opositora: la ausencia de una alternativa para la provincia.
Después de más de 200 días al frente del Poder Ejecutivo nacional, Javier Milei finalmente consiguió su primera victoria legislativa. La Cámara de Diputados de la Nación aprobó las modificaciones introducidas por el Senado en la ley de Bases, poniendo fin a una batalla legislativa que se prolongó por más de seis meses. Esta victoria no solo marca un hito en la gestión de Milei, sino que también le otorga a su partido, La Libertad Avanza, una herramienta
crucial para implementar las reformas prometidas durante la campaña electoral del año pasado.
El aporte de los representantes de Misiones en ambas cámaras del Congreso fue determinante, logrando un apoyo del 100%. En el Senado, los renovadores Carlos Arce y Sonia ojas Decut, junto con el (¿ex?) macrista Martín Goerling, respaldaron la ley. En la Cámara de Diputados, los renovadores Yamila Ruiz, Carlos Fernández, Colo Vanksic y Alberto Arrúa, así como la oficialista de Activar, Florencia Klipauka, y el macrista Emannuel Bianchetti, también dieron su aprobación.
Para la Renovación, la aprobación de esta ley marca el inicio de una nueva etapa en la administración liderada por Hugo Passalacqua. Tras los conflictos con la policía, los docentes y el personal de salud pública, este logro les permite mostrar ante la política nacional que el proyecto misionerista sigue firme, a pesar de los agitados días recientes y mantiene la iniciativa política.
Desde el inicio de la gestión de Milei, el gobierno de Misiones mostró su disposición para dialogar y ofreció a sus legisladores para acompañar con su voto las medidas necesarias para el nuevo gobierno nacional. La máxima de “gobernabilidad con gobernabilidad se paga” nuevamente dio sus frutos. Después de que el Senado aprobara el proyecto, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el propio Passalacqua firmaron un convenio para que Misiones
reciba fondos destinados a reactivar obras públicas paralizadas desde enero. Además, esta semana se confirmó que la provincia comenzará a recibir asistencia de mercaderías para atender las necesidades sociales.
Esta cercanía entre el gobierno federal y el gobierno provincial se basa en una lógica administrativa donde ambos ejercen el poder y, por ende, deben ser los principales actores en la gestión. Este acuerdo también es un llamado de atención para la oposición, que enfrenta el mismo desafío de hace 20 años: la incapacidad para construir una alternativa viable al proyecto político del misionerismo, que, gracias a su pragmatismo, sigue al frente del poder, el
todo el sentido de la palabra y continúa con el apoyo de gobiernos nacionales, independientemente de sus afinidades políticas.
Será interesante observar en los próximos meses el camino que elija la Renovación de cara a las elecciones legislativas del próximo año. Estas elecciones representan un desafío significativo para los dirigentes identificados como “Neo”, quienes se espera que jueguen un papel preponderante en este cambio de época que atraviesa la política no solo a nivel nacional, sino también en todo el mundo. En un contexto donde los políticos tradicionales y los proyectos de largo plazo comienzan a desgastarse, la sociedad clama por mejoras en la calidad de vida que parecen siempre estar fuera de alcance o resultar efímeras sorpresas
Por Sergio Fernández