El juez de la Corte Suprema Alexandre de Moraes ordenó la retirada de cientos de perfiles en X que cuestionaban la solidez del sistema electoral brasileño en el marco de los comicios de 2022 y el representante de X en Brasil, enfrentaría, según la compañía, una multa diaria de 3.600 dólares y prisión por desobediencia.
La red social X anunció que cierra su oficina en Brasil, tras acusar al magistrado de la Corte Suprema Alexandre de Moraes de “amenazar” con encarcelar a sus representantes legales si no acatan las resoluciones judiciales impuestas. Estas incluyen eliminar centenares de perfiles de la red social que comparten noticias catalogadas por el alto tribunal como falsas.
La plataforma de Elon Musk afirmó que De Moraes “no respeta la ley ni el debido proceso”, al cursar órdenes “de censura” para eliminar contenido.
En caso de no acatar la resolución, el responsable de X en Brasil afrontaría multas diarias de 3.600 dólares y prisión por desobediencia, según información publicada en imágenes por el mismo gigante de las redes sociales de un documento supuestamente firmado por Moraes sobre el que el tribunal no se ha pronunciado.
Tras una primera orden de cierre de perfiles, X dijo que lo acataría: Las órdenes del STF “son y seguirán siendo cumplidas integralmente por X Corp”, dijo en su momento. A la vista que los perfiles siguen activos, el juez ha intervenido.
X aseguró que cierra la oficina para “proteger” a sus empleados, aunque aclaró que la plataforma seguirá funcionando en Brasil. Para X, “las acciones de Moraes son incompatibles con un Gobierno democrático”, según se expresó la compañía.
Musk, en una cruzada directa contra Moraes
El propietario de la compañía, Elon Musk, añadió en otro mensaje que el magistrado “debe irse” y apoyó los llamados de la ultraderecha brasileña a iniciar un proceso de ‘impeachment’ contra Moraes, responsable de una investigación sobre la propagación de noticias falsas y, cuando presidió el Tribunal Superior Electoral, ordenó la retirada de cientos de publicaciones en X que cuestionaban la solidez del sistema electoral brasileño en el marco de los comicios de 2022.
El expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro fue especialmente crítico con el sistema electoral de Brasil al señalar que las elecciones se prestaban al fraude: “Ha surgido una nueva clase de pillos que quieren robar nuestra libertad”, dijo en un discurso. “Iremos a la guerra si es necesario”, agregó, antes de los comicios.
El exmandatario afirmó en reiteradas ocasiones que los funcionarios electorales en las elecciones de 2022 -que perdió contra Luiz Inácio Lula da Silva-, contarían los votos en una “sala secreta”. Luego sugirió que los datos de las votaciones deberían suministrarse a una sala “donde las fuerzas armadas también” tuvieran “una computadora para contar los votos”.
Moraes lidera otra pesquisa contra Bolsonaro por su presunta participación en un intento de golpe de Estado tras perder las elecciones ante Lula da Silva.
El juez Alexandre de Moraes es un magistrado contrario a que las redes sociales sean una “tierra sin ley”, tal como las ha denominado.
Por su parte, el bolsonarismo siempre ha tenido elogios para Elon Musk y ha utilizado la red social, a ojos del juez, para aupar los mensajes de la ultraderecha, que tras las elecciones llamó explícitamente al Ejército a llevar a cabo un golpe de Estado luego de que el ente electoral del país diera como ganador a Lula da Silva. Un discurso que también estuvo presente en el asalto a los tres poderes del Estado en Brasilia.
El magistrado investiga calientes casos de actualidad, como los actos antidemocráticos del 8 de enero de 2023 o la citada difusión de noticias falsas en las redes sociales. Y, en este caso, el juez intenta determinar si la difusión de noticias falsas en redes sociales responde a un proyecto delictivo de influir en los procesos electorales en el país.
Inflexible, combativo y apodado por los medios ‘Robocop’, en alusión a la famosa película, ha construido una meteórica carrera que le ha llevado a los puestos judiciales más influyentes de Brasil.
Con EFE y Reuters