Los funcionarios de la Unión Europea están buscando la manera de eludir el veto de Hungría a la ayuda militar a Ucrania que se daría a través del Fondo Europeo para la Paz (FEP).
Los funcionarios de la Unión Europea están buscando la manera de eludir el veto de Hungría a la ayuda militar a Ucrania que sería desembolsada a través del Fondo Europeo para la Paz (FEP).
Budapest lleva año y medio bloqueando la transferencia de 6.600 millones de euros, lo que ha provocado la condena de otros Estados miembros y de Ucrania, que se enfrenta a dificultades en el campo de batalla a medida que se acerca el invierno.
Pero, ¿qué es exactamente el Fondo Europeo para la Paz?
El fondo se creó en marzo de 2021, antes de la guerra rusa contra Ucrania, como un instrumento destinado a mejorar la capacidad de la UE para prevenir conflictos, construir y preservar la paz y reforzar la seguridad y la estabilidad internacionales.
El Alto Representante de la UE, Josep Borrell, quería una forma de facilitar la entrega de ayuda militar a los países socios y financiar el despliegue de las misiones militares de la UE en el extranjero en el marco de la Política Exterior y de Seguridad Común (PESC).
Según Tinatin Akhvlediani, investigadora de la Unidad de Política Exterior de la UE del ‘think tank’ CEPS, el Fondo Europeo para la Paz se fundó sobre dos pilares: “Uno es financiar todas las operaciones de la UE en el marco de la Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, por lo que se trata de una operación de la UE, pero también otro pilar que viene dado por la ayuda que hay que prestar a todos los terceros países no pertenecientes a la UE con el fin de proporcionar y reforzar la seguridad en la región”.
Investigadora de la Unidad de Política Exterior de la UE del think tank CEPS
“Como hemos visto por los estallidos de la guerra en la vecindad de la UE o en Oriente Medio, obviamente la UE canaliza más dinero para construir y preservar y reforzar la seguridad en esos países no pertenecientes a la UE”, añadió.
El mecanismo tenía asignados inicialmente 5.000 millones de euros para el ciclo 2021-2027, pero su presupuesto se amplió enormemente tras el inicio de la invasión a gran escala de Ucrania por Rusia, ya que la UE empezó a utilizarlo para reembolsar parcialmente a los Estados miembros las armas y municiones donadas a Kiev.
Las sucesivas ampliaciones han elevado su presupuesto a unos 17.000 millones de euros para el periodo 2021-2027, dijo Akhvlediani, de los cuales 11.000 millones están destinados a Ucrania.
¿Por qué Hungría veta las decisiones?
Al no formar parte del presupuesto de la UE -el dinero procede de las contribuciones de los Estados miembros-, cualquier decisión que incluya un desembolso para Ucrania debe ser aprobada por unanimidad por los 27 Estados miembros, lo que permite al primer ministro húngaro ejercer el veto.
“Una parte del dinero del FPE también podría utilizarse para la reconstrucción de Ucrania, es decir, para permitir a Ucrania mantener su país a flote. Pero la mayor parte del dinero, por supuesto, se destina al sector de la Defensa y la Seguridad. Así que el último reparto cuando se canalizó algo de dinero a Ucrania fue del 90% al sector militar, de Defensa, y sólo el 10% a las instalaciones ucranianas, que luego se reservan a Ucrania para la construcción”, dijo Akhvlediani.
“Hungría, y en particular Orbán, ha manifestado muy públicamente que está en contra de proporcionar más apoyo a Ucrania. Y, por supuesto, también entra el juego lo que sucede en la política estadounidense porque tiene relaciones muy amistosas con Donald Trump y aparentemente no quiere, ya sabes, reservar todos los apoyos a Ucrania. Así que en caso de que Trump vuelva a la presidencia, Trump no se apunta a conceder más préstamos a Ucrania”, añadió.
El apoyo a Ucrania volvió a figurar en la agenda de los ministros de Asuntos Exteriores el lunes en Luxemburgo. Para eludir el firme veto de Hungría a la ayuda militar a Ucrania, funcionarios y diplomáticos de la Unión Europea están explorando un nuevo plan.
“Para evitar el veto de Orbán, los Estados miembros podrían acordar contribuciones voluntarias. Eso es lo que hemos oído decir al Alto Representante, Josep Borrell. Pero otra salida es, en cierto modo, proporcionar alguna ayuda macrofinanciera excepcional que entonces pueda vincularse al presupuesto de la UE, no al FPE. Pero esto todavía tiene que ser confirmado por el Parlamento Europeo“, según Akhvlediani. Los debates están en curso.
Por Maria Psara EuroNews