El abogado del propietario apuntó contra el intendente y sostuvo que omitió información. Dijo que los trabajos estaban habilitados desde el 20 de agosto y que el arquitecto detenido era conocido de Rosa Stefanic, la ex titular del edificio
A nueve días del fatal derrumbe en Villa Gesell, el abogado defensor de Antonio Arcos, el dueño del hotel Dubrovnik, aseguró que las obras que se llevaban adelante en el edificio antes de la tragedia contaban con la autorización del Municipio y que “no eran clandestinas”. De esta manera, contradice el comunicado emitido por las autoridades municipales, en el que aseguraron que la estructura se habría modificado de manera ilegal e irregular.
“La obra no era clandestina. No estaba paralizada y lo estamos documentando. El dia 20 de agosto se paraliza y el mismo día la arquitecta contratada por mi cliente presenta la documentación y se archiva la causa. Acá lo preocupante es que el intendente (Gustavo Barrera) haya parcializado la información. Más que nada porque es una falta de respeto a las víctimas. Esto no es así. Está en el expediente municipal. El mismo día 20 la obra se reanuda y se continúa”, dijo en TN el abogado Maximiliano Osini.
En ese sentido, el abogado aseguró que Arcos adquirió el hotel en abril de este año y que “tenía una muy buena relación” con María Rosa Stefanic, la ex propietaria del hotel y víctimas fatal del accidente. “Mi representado no toma posesión del hotel. De hecho Rosa continúa viviendo en el hotel y fiscaliza las obras”, añadió.
Sostuvo que Stefanic era amiga del arquitecto Jorge Enrique Bonavita, uno de los detenidos y que desconocía que no contaba con matrícula para trabajar. “Mi defendido no sabía que el arquitecto no tenía matrícula. Cuando se advierte, se designa una arquitecta matriculada, que es la que continúa con la obra. El intendente omitió, no mintió”, añadió el letrado.
Dijo también que la Justicia ya secuestró el expediente municipal y que cuentan con “el acta presentada por la arquitecta y firmada por el funcionario municipal responsable”. “Se equivocó el intendente. Esto le causó un perjuicio a mi cliente”, remarcó.
Horas después del derrumbe, la Municipalidad de Villa Gesell aseguró en un comunicado oficial que dentro del edificio se llevaron adelante obras sin la autorización correspondiente y que incluso los propietarios fueron intimados.
“En estos momentos, si bien no se puede hablar con exactitud sobre los detalles del derrumbe, sí se puede afirmar que en la parte colapsada (la parte trasera) se habría estado modificando la estructura en forma ilegal e irregular”, indicaron desde el Gobierno local en su sitio web. La versión fue ratificada después por el propio intendente Barrera.
En el comunicado de la Municipalidad -en el que dijeron que entregó documentación a la fiscal Verónica Zamboni- se indicaron los detalles de los permisos que sí le dieron a los dueños del hotel y las infracciones e irregularidades que podrían haber cometido.
“El pasado 20 de agosto de 2024, la Municipalidad, a través de la Dirección de Edificios Privados y Espacios Públicos, detecta y paraliza trabajos que se estaban realizando en el interior de la propiedad, sin contar con la debida autorización. Posteriormente a la intimación, los propietarios solicitan mediante un aviso de obra la autorización únicamente de las siguientes tareas: cambio de carpinterías, cambios de revestimientos de pisos, pintura interior, cambio de revestimiento de baños y retiro de mesadas”, afirmaron.
“Mi defendido despidió al arquitecto el día que se enteró que no tenía matrícula. Es una locura que esta persona detenida sin matrícula haya trabajado como arquitecto en Villa Gesell. Hay que ver qué sale en la pericia documental y quién firmó las autorizaciones. Se están peritando teléfonos y expedientes”, agregó Osini.
El letrado también habló del video de las obras dentro del hotel que se dieron a conocer ayer, donde se observa cómo se trabajaba en el edificio antes del colapso. En las imágenes, a las que accedió Infobae, se ve cómo los obreros trabajaban sobre la base de la propiedad de 10 pisos y dos subsuelos ubicada sobre la Avenida 1, a una cuadra del mar. “El video que trascendió de las obras es en la parte del edificio que no se derrumbó. Esto lo digo yo, pero va a quedar sometido a pericias”, explicó el letrado.
“Mi defendido el día que tomó conocimiento quedó bajo tratamiento. Tiene 79 años. Está muy afectado por la situación. Invirtió mucho dinero y no esperaba que suceda esto. No tenía la posesión completa del hotel. Necesita respuestas del Estado para saber qué pasó”, concluyó.