El libertario afirmó que la fabricación de autos en Argentina “es un robo a mano armada”. Los autopartistas le respondieron con datos de la industria y lo acusaron de opinar con prejuicios y desconocimientos.
La industria automotriz salió al cruce del diputado José Luis Espert por afirmar que la fabricación de autos en Argentina “es un robo a mano armada” y proponer la importación total de vehículos.
El libertario reaccionó días atrás a una noticia sobre la diferencia de precios entre los autos producidos en Argentina con los de otros países. “La fabricación o armaduría de autos en Argentina, es un robo a mano armada. Habría que importar todos los autos y en las fábricas de autos fabricar cosechadoras, tractores, sembradoras, arados”, escribió Espert.
Ante esto, la Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes (AFAC) emitió un extenso comunicado contra Espert en que, si bien valoró parte de sus ideas, lo acusó de opinar en este caso con prejuicios y desconocimiento.
“Se ha expresado en base a conocimientos distorsionados e incompletos, y ciertos prejuicios que se han arraigado en algunos sectores de la sociedad sobre la industria en general, y en particular la automotriz”, sostuvieron los autopartistas de la AFAC.
Luego, mencionan algunos logros de la industria como la producción de 532 mil vehículos en 2024, las exportaciones directas de autopartes por USD 1.283 M y el ahorro de divisas netas por 12 mil millones de dólares, entre otros. Esto, resaltan, “a pesar de décadas de inestabilidad macroeconómica (a veces también política) y total falta de previsibilidad para decidir inversiones”.
Los autopartistas también le recordaron a Espert que días atrás Milei reconoció que el problema de la industria automotriz es la carga fiscal. Al respecto, detallan que los autos argentinos tienen un 54% de impuestos, luego de haberse eliminado el Impuesto País. “De dicha pesada carga tributaria el 33% recae sobre las etapas productivas, con impuestos que no existen en la mayoría de los países con los que competimos”, señalan.
Finalmente, reclaman “condiciones que reduzcan drásticamente la carga sobre quienes producen y generan empleo” para lograr “una competencia equitativa y sin atajos” con otros países productores
Fuente: LPO