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Caso Cecilia Strzyzowski: quiénes son y qué hizo cada uno de los condenados

El jurado popular declaró culpables a César Sena, Marcela Acuña, Emerenciano Sena y otros tres imputados por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, ocurrido el 2 de junio de 2023 en Resistencia. Cómo fue la participación de cada uno.

El femicidio de Cecilia Strzyzowski, ocurrido el 2 de junio de 2023 en Resistencia, tuvo este sábado su veredicto luego de que un jurado popular declarara culpables a César Sena, sus padres Emerenciano Sena y Marcela Acuña, y a los colaboradores Gustavo Obregón, Fabiana González y Gustavo Melgarejo. Las condenas abarcan desde homicidio doblemente agravado por el vínculo y por violencia de género, hasta encubrimiento agravado y encubrimiento simple, configurando uno de los fallos más relevantes de la Justicia chaqueña en los últimos años.

De acuerdo con la fiscalía, el crimen fue premeditado, ejecutado dentro de la vivienda familiar de los Sena ubicada en Santa María de Oro 1460, y seguido por un operativo de eliminación de rastros que incluyó el traslado e incineración del cuerpo en un predio rural de la familia, en Puerto Tirol. La acusación sostuvo que el clan actuó de manera coordinada y que el accionar de César “no habría sido posible sin la participación activa y esencial de sus padres”.

El proceso judicial también dejó una única absuelta, que fue Griselda Reinoso, cuidadora del predio rural donde los restos de Cecilia fueron descartados. El jurado entendió que no había pruebas suficientes para situarla en el lugar durante las maniobras de encubrimiento y la declaró “no culpable”.

Tras darse a conocer el veredicto, la fiscal Nelia Velázquez sostuvo que “hoy se hizo justicia por Cecilia” y aseguró que este juicio “marcó un antes y un después para la justicia chaqueña”. Además, recordó que llevar a los integrantes del Clan Sena al banquillo fue “un proceso complejo, arduo y difícil, pero con un gran final”.

Con el fallo ya definido, resta que la jueza imponga las penas correspondientes, aunque las figuras legales asignadas por el jurado permiten anticipar que los tres integrantes del clan Sena enfrentarán prisiones perpetuas.

Uno por uno, quiénes son y qué hizo cada uno de los condenados por el femicidio

A continuación, el rol de cada imputado según la acusación fiscal:

César Sena: autor material del femicidio

César Sena fue condenado por homicidio doblemente agravado por el vínculo y por violencia de género por el femicidio de Strzyzowski. Según la fiscalía, aquella mañana del 2 de junio de 2023, llegó con la joven a la vivienda familiar con la excusa de que emprenderían juntos un viaje a Ushuaia, un proyecto que, según los investigadores, “era una mentira”. Una vez dentro de la casa, y ya en una de las habitaciones, la mató.

César Sena
César Sena, el autor material del femicidio.

Aunque el mecanismo exacto no pudo establecerse con precisión, los fiscales señalaron la presencia de rasguños en el cuello de César, compatibles con un intento de defensa de la víctima y una posible maniobra de estrangulamiento o ahorcamiento.

Tras el crimen, César envolvió el cuerpo en una frazada y lo trasladó a una habitación contigua, donde permaneció hasta la llegada de sus colaboradores. Obregón relató que más tarde lo acompañó a deshacerse del cuerpo y de los bienes de Cecilia, que fueron quemados en el predio rural de los Sena. Ese testimonio fue clave para el avance de la investigación. “La habían machacado con objetos contundentes”, declaró ante los fiscales.

Durante el juicio se expusieron sus distintas versiones sobre lo ocurrido, así como registros de cámaras y mensajes que revelaron inconsistencias. La fiscalía destacó que el joven actuó bajo una fuerte influencia de sus padres, quienes mantenían sobre él un “control significativo”, tanto económico como emocional.

Marcela Acuña: planificación, encubrimiento y control familiar

Marcela Acuña, madre de César y figura central dentro de la dinámica del clan, fue condenada como partícipe necesaria del homicidio agravado. La acusación la ubicó dentro del núcleo de planificación del crimen, y sostuvo que su rol abarcó tanto la organización previa como las maniobras posteriores para ocultar pruebas. Antes del asesinato, salió de la casa para no estar presente en el momento exacto, pero luego volvió, ingresó a la habitación y dijo haber visto “un bulto envuelto en una frazada”.

La fiscalía asegura que inmediatamente después de ver el cuerpo convocó a Fabiana González y Gustavo Obregón, a quienes instruyó para limpiar la escena y facilitar la desaparición del cuerpo. Obregón declaró que ese día Acuña le escribió y le pidió que fuera a su casa porque creía “que había un cuerpo”. Minutos más tarde, él confirmó que era cierto.

Tras la desaparición de Cecilia, Acuña mantuvo su actividad pública sin mostrar señales de alarma e incluso encabezó una protesta en la comisaría cuando la investigación avanzaba sobre su familia. Los fiscales remarcaron su devoción hacia su hijo y un supuesto rechazo explícito hacia Cecilia, a quien había intentado alejar pagando para que se divorciara. Ese conflicto, indicaron, formó parte del móvil del crimen.

Marcela Acuña
Marcela Acuña, madre de César, condenada como partícipe necesaria.

Emerenciano Sena: poder político, logística y aval familiar

Emerenciano Sena, líder piquetero y figura política de peso en Chaco, fue también condenado como partícipe necesario del homicidio premeditado. Si bien no estuvo en la vivienda en el momento exacto del crimen, la acusación sostuvo que su rol fue determinante para crear el entorno que hizo posible la ejecución del plan. Otorgó apoyo logístico, garantizó protección y ejerció una influencia decisiva sobre la relación entre César y Cecilia, a la que se oponía abiertamente.

En los días previos y posteriores a la desaparición, Emerenciano continuó con su agenda política, incluso mientras ya estaba bajo investigación. Los fiscales destacaron su estrecha relación con funcionarios provinciales del gobernador Jorge Capitanich y la importancia del predio rural de la familia en el que se incineró el cuerpo, ya que era un terreno que obtuvo años atrás mediante gestiones políticas.

Emerenciano Sena en su declaración.
Emerenciano Sena también fue condenado como partícipe necesario.

Gustavo Obregón: colaborador clave en el encubrimiento

Gustavo Obregón, chofer y asistente de confianza del clan Sena, fue condenado por encubrimiento agravado. Su participación fue fundamental para reconstruir el hecho, ya que brindó un testimonio extenso y detallado sobre su intervención. Declaró que ayudó a César a trasladar el cuerpo en la cajuela de la Hilux, a deshacerse de los objetos personales de la víctima y a limpiar la escena del crimen.

Obregón ingresó a la casa de los Sena a las 17 del día de la desaparición. Allí vio un “bulto envuelto en una frazada” y, según su propio relato, lo sacó de la vivienda junto a César. Ambos llevaron el cuerpo al campo de la familia, donde lo quemaron y posteriormente regresaron a la casa de los hermanos de Emerenciano para cenar, como si nada hubiera ocurrido.

Además, aportó datos claves para la búsqueda de restos, ya que guió a los investigadores hasta la zona del río Tragadero, donde fueron hallados huesos humanos triturados y un dije con forma de cruz que la familia reconoció como perteneciente a Cecilia.

Fabiana González: colaboradora íntima y partícipe en el encubrimiento

Fabiana González, colaboradora estrecha de la familia Sena, también fue condenada por encubrimiento agravado. Había estado con el clan durante la mañana del 2 de junio y llegó a la vivienda a las 17:12 en moto, minutos después de Obregón. Según su declaración, al entrar vio “un bulto envuelto en una manta marrón” y salió “corriendo”.

La acusación sostiene que cooperó activamente en la limpieza de la escena, en la desaparición de objetos relacionados con la víctima y en maniobras destinadas a borrar toda evidencia. Incluso participó en eventos políticos y sociales junto a los Sena en los días posteriores a la desaparición, incluida una bailanta donde repartió regalos con Marcela Acuña y César.

Fabiana González
Fabiana González fue condenada por encubrimiento agravado.

Gustavo Melgarejo: el casero que mantuvo el fuego encendido

Gustavo Melgarejo, casero del predio de la familia Sena en Puerto Tirol, fue condenado por encubrimiento simple. Según la fiscalía, su tarea ese día consistió en mantener encendido el fuego donde se incineró el cuerpo de Cecilia, acción que facilitó la destrucción de pruebas y demoró la investigación inicial.

A lo largo del proceso, Melgarejo fue cambiando su versión de los hechos. En un comienzo aseguró que había visto a Cecilia con vida en una camioneta, amordazada, pero ese relato perdió consistencia con el tiempo, debido a que los allanamientos en la zona señalada no arrojaron resultados y su defensa posterior indicó que había actuado por miedo a presiones externas.

Griselda Reinoso: la única absuelta

Griselda Reinoso, también cuidadora del predio rural junto a Melgarejo, fue la única absuelta del caso. El jurado popular concluyó que no existían pruebas que confirmaran su participación en la incineración del cuerpo ni en ninguna de las otras maniobras de encubrimiento.

Fuente: Perfil