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Abuela de 93 años recuperó su vivienda que había sido usurpada por su hija y su pareja

Tras una intensa disputa entre abuela, nieto e hija, Adolfina recuperó su vivienda en el barrio Yacyretá de la capital misionera. El domicilio estaba siendo ocupado por su hija, quien no dejaba que ingrese la propietaria al lugar. 

El lunes, se conoció la historia de una pareja de ancianos que fueron desalojados por sus hijos. La historia tiene varios protagonistas, pero comienza con la abuela, una mujer de 93 años, propietaria de una vivienda en la Chacra 102 de Posadas que compartía con su hija Alicia y su yerno Fabio. 

Sin embargo, ante la situación de abandono y maltrato que vivía Adolfina, su nieto Marco y su pareja, decidieron sacar a la calle a su madre Alicia y Fabio ( padrastro), según la denuncia y testimonios del nieto.. Actualmente, él está a cargo de la mujer y lo llevó a vivir a su casa, en otro barrio. 

El repentino desalojo dejó a esta pareja en una situación desesperada, viviendo en un automóvil. No obstante, en la noche de este martes volvieron a ingresar a la vivienda y se atrincheraron allí.  “Estaba cuidando un sobrino, pero ellos dos vinieron con machete y se quedaron allí adentro”, contó Marco en diálogo con Misiones OnLine. 

pareja que vive en su automóvil

Nuevamente “quilombo”. Hoy, la abuela intentó ingresar a su vivienda para instalarse nuevamente en su propiedad, pero no fue posible ya que su hija y su yerno no querían abandonar el domicilio, pese a la prohibición de acercamiento que tienen en común. 

Minutos después de las 20, la Policía de Misiones acudió al lugar y notificó a quienes estaban dentro del domicilio que tenían una prohibición de acercamiento y que debían abandonar el inmueble. 

Finalmente, Adolfina volverá a vivir en su casa, con sus perros y con sus pertenencias, que según relató, lo consiguió con años de trabajo constante. 

“Yo le amo a mi casita, yo estaba sufriendo demasiado. Extrañaba a mis dos perritos”, comentó entre lágrimas Adolfina. Y  añadió que su hija mató a cuatro perros que vivían en la casa del barrio Yacyretá. 

“Estoy feliz, no entré por la puerta del costado como ellos querían. Me restituyeron mi casita, la Justicia obró como”, dijo la abuela de 93 años.