“Estoy tranquilo de haber hecho lo que debía”, dijo el Presidente, que no competirá por un nuevo mandato, pero apuesta a las PASO contra el sector que lidera la vicepresidenta. Cristina Kirchner y Sergio Massa conocieron la decisión del jefe de Estado por las redes sociales. El ministro de Economía se quiere anotar como posible candidato único, aunque aún no lo hará público.
“¿No te sentís aliviado?”, escuchó decir Alberto Fernández horas después de haber oficializado que no irá por la reelección. “No es alivio lo que siento. Estoy tranquilo de haber hecho lo que debía”, responde el Presidente. El jefe de Estado decidió no competir, pero no está dispuesto a correrse de la discusión electoral y quiere convertirse en el principal impulsor de la competencia dentro del Frente de Todos. “Yo quiero generar una gran apertura en el espacio. Eso a ellos los descoloca”, dice en la intimidad de la Quinta de Olivos sobre cómo continúa ahora la estrategia electoral y la disputa con el kirchnerismo.
El jefe de Estado desafía al sector de la vicepresidenta y dice que ahora se deberá dirimir en las PASO el poder. “Si hay que armar en cada provincia, lo haremos”, arremete en la intimidad minutos antes de ingresar a la reunión del Partido Justicialista.
Alberto Fernández asegura que tendrá candidato a presidente. No cree que haya lista de unidad. Y, en este sentido, descarta la posibilidad de un Sergio Massa candidato. Sobre su postulante, el jefe de Estado sabe que Daniel Scioli puede bajarse de la pre candidatura en una negociación con el kirchnerismo y por eso puso en competencia al jefe de Gabinete, Agustín Rossi.
“La decisión de Alberto Fernández muestra su generosidad”, escribió Massa
En el video de siete minutos con el que oficializó la decisión de no competir por un segundo mandato, Alberto Fernández le envió varios mensajes al kirchnerismo. Uno de ellos es sobre “darle la lapicera a los militantes”. “Yo me apropié de la palabra ´democracia´”, dice al evaluar que el kirchnerismo no podrá rechazar las internas y que no le puede decir a la gente que no es ella la que puede elegir. Sobre una competencia contra el sector que lidera la vice, asegura que el espacio que rodea a CFK tiene “enormes dificultades” para ordenar una alternativa. Como ejemplo, desde Olivos se repasan los comicios de este año como Neuquén, Río Negro y Chubut para decir que en donde juega La Cámpora “reciben una paliza”.
El jefe de Estado se posiciona como líder de un sector que celebra en privado que haya desafiado al kirchnerismo. No dice nada sobre los números en las encuestas ni la desaprobación de la gestión que lo llevó a bajarse de la candidatura. Faltan dos meses para el cierre de listas y ahora habrá que esperar ver quién lo acompaña en esta aventura aunque ya no sea el postulante.
Este mismo sábado, Alberto Fernández coordinó con la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, hacer un lanzamiento en Ensenada. “Si hay que armar en cada provincia , lo haremos”, lo escucharon decir desde su entorno. Tiene candidato a presidente y una postulante a la gobernación para pelear la interna con Axel Kicillof. Lejos de que la disputa electoral vaya hacia la unidad, desde la intimidad presidencial aseguran que muchos gobernadores y dirigentes del Partido Justicialista escribieron al celular del jefe de Estado apoyando la decisión de bajarse, pero también celebrando haberle “puesto límites” a los jóvenes que responden a la titular del Senado. “La Cámpora competirá en las PASO contra el peronismo”, concluye el jefe de Estado antes de encabezar la reunión del PJ en la calle Matheu que duró apenas poco más de media hora.
La decisión. Al aterrizar en la Quinta de Olivos, Alberto Fernández llamó a sus funcionarios más cercanos. A algunos se los dijo por teléfono y a otros en persona, una vez que llegaron a la residencia oficial. El jueves por la tarde, después de un acto en Mar del Plata, el jefe de Estado le adelantó a su círculo íntimo que anunciaría que no competirá por un nuevo mandato y que grabaría un video esa misma noche. Quienes lo sabían eran Juan Manuel Olmos (vicejefe de Gabinete), Santiago Cafiero (canciller), Julio Vitobello (Secretario general de la Presidencia), Vilma Ibarra (Secretaria Legal y Técnica) y Gabriela Cerruti (Portavoz).
El video se conoció a través de sus redes sociales. Un 18 de mayo de 2019 Cristina Kirchner anunció con un spot que Alberto Fernández sería el candidato a Presidente y casi cuatro años después, también con un video, el jefe de Estado anunció que no irá por la reelección.
El Presidente quiere PASO y no quiere más presiones del kirchnerismo. Tal como adelantó PERFIL, este sector lanzó su primera advertencia semanas atrás: si quería competir, debería hacerlo en todas las categorías. Esto significaba que candidatos como Axel Kicillof en la provincia no irían colgados de su boleta. La otra advertencia llegaría este viernes por la tarde en la reunión del Partido Justicialista: tenía que definir ya. Definió, pero sin escuchar las críticas que tenían para hacerle.
El mandatario había avisado que su decisión se conocería en mayo. Los tiempos se adelantaron, sobre todo, después de una semana cargada de rumores a los que el mercado le prestó demasiada atención. Las versiones de renuncia de Sergio Massa al ministerio de Economía, las medidas económicas que quería implementar el exjefe de Asesores, Antonio Aracre, y las internas interminables dentro del Frente de Todos generaron una reacción en la economía que una foto entre Fernández y Massa no llegó a acallar. Había que hacer algo más y Fernández decidió en soledad que eso tenía que ver con hacer pública su decisión.
“Fueron los peores cuatro años de mi vida”, llegó a decir Alberto Fernández en febrero ante los dirigentes más íntimos. El mandatario repasaba su gestión y marcaba logros en medio de una pandemia y una guerra a las que ahora se sumó la sequía. Ahora asegura que desde su lugar, hará todo para ganar: “Mi tarea es gestionar el gobierno, organizar unas PASO para que se democratice el espacio y ganar las elecciones. Vamos a hacerlo”, le dijo a sus funcionarios de máxima confianza este viernes.
Esta decisión sorprendió a sus dos socios. Sergio Massa estuvo en Olivos el jueves por la mañana, pero el jefe de Estado no le adelantó nada. Mucho menos a la vicepresidenta. Bajo este escenario las miradas ahora se dirigen hacia ellos y los posibles postulantes. “Va a haber PASO. Los candidatos, florecerán”, dice uno de los dirigentes más cercanos al jefe de Estado. En el kirchnerismo coinciden resignados: “Habrá PASO”. En el entorno más íntimo de la vice se preparan para competir.
Algunas de esas miradas se dirigen a Sergio Massa. ¿Es el candidato de unidad? El ministro de Economía esquiva las malas noticias de las que es responsable la cartera que maneja y se mueve más cerca de la política, aunque diga lo contrario. El funcionario promete dólares para la campaña. Pero hay desconfianza y un dirigente evalúa que para asumir “pidió toda la botonera y se la dieron”. Prometió, prometió y los resultados no llegan. “Alberto dice que hay PASO y el kirchnerismo también. Esto deja afuera a Sergio que quiere un operativo clamor y no es el de la CFK 2023”, evalúa un importante dirigente peronista.
“La decisión de Alberto Fernández muestra su generosidad y deja una marca hacia adelante. Responsabilidad y unidad es el camino”, escribió en las redes sociales el líder del Frente Renovador. ¿Lo acompañó estrenando un posible eslogan de campaña? “Creo en Argentina”, escribió. Tan afuera no está.
En las primeras horas después de conocerse el renunciamiento del Presidente, el Senado hizo silencio. “Mesura y respeto a la decisión presidencial”, fue la orden que se lanzó desde el sector de la vicepresidencia. La Cámpora se expresó por redes: “La decisión del presidente abre una nueva etapa para reordenar las prioridades del Frente de Todos, que debe trabajar para construir una alternativa que recupere la esperanza y los sueños de los argentinos y argentinas”, escribió la agrupación. Una curiosidad: usaron una foto del cierre de campaña de 2017 en el que Cristina Kirchner compitió como senadora. En aquel entonces Alberto Fernández y Sergio Massa jugaban en contra.
Por Rosario Ayerdi – Perfil