Ocurrió este lunes a la madrugada. Los dueños de la casa llamaron a la Policía que la capturó, la guardó en una bolsa de consorcio y la llevó al ex Zoo.
Una mujer se encontró este lunes a la madrugada con una pitón de más de dos metros de largo en la reja de la puerta de su casa en La Plata. Completamente asustada, la vecina de 68 y 30 llamó a la policía porque no sabía a quién acudir ante semejante animal que rodeaba el ingreso a su casa.
Tras el llamado al 911 acudieron al lugar oficiales de la comisaría 5ta., que tiene jurisdicción en esa zona. Eran la 1.30 cuando se encontraron con el espécimen de más de dos metros de largo que estaba enroscado entre los barrotes de un portón de seguridad, que permite ingresar al hall de la casa.
La dueña de la casa no se animó a salir, por lo que los policías le pidieron a otra señora que vivía al lado una bolsa de consorcio y un palo para maniobrar al animal. Así fue que lograron sacarla del lugar y trasladarla al ex zoológico de la ciudad.
Las autoridades indicaron que el ejemplar fue llevado en una caja de madera especialmente acondicionada para su transporte y que se encuentra en buen estado de salud. No se pudo conocer de dónde vino, pero todo parece indicar que se trata de una serpiente usada y criada como mascota, la cual se escapó o fue abandonada.
La dueña de la casa contó a la emisora platense La Cielo 103.5 que nunca escuchó el timbre ni ruidos extraños que al chequear las cámaras de seguridad de su vivienda vio cómo el animal venía desde la calle hasta su casa y cómo comienza a ingresar por las rejas de la puerta principal.
Las pitones, como las boas, son serpientes constrictoras, y por definición, no venenosas. La forma de cazar a sus presas es emboscando a los animales que pasan cerca y matándolos por asfixia. Primero los muerden, agarrándolos con la boca y enrollando rápidamente su cuerpo alrededor de ellos. De este modo ejercen una fuerte presión sobre las costillas y pulmones de su presa y le impide inhalar.
Fuente: Perfil