Un plan filtrado por dos asesores de seguridad del exmandatario de EE. UU., Donald Trump, revelan la estrategia que tomaría el líder republicano para la guerra en Ucrania, en caso de ganar las elecciones presidenciales del próximo noviembre. Washington advertiría a Kiev que solo seguiría recibiendo armas estadounidenses si inicia conversaciones de tregua con Moscú. Simultáneamente, avisaría a Rusia que cualquier negativa al respecto causaría mayor ayuda de EE. UU. al Ejército ucraniano. Entretanto, la Corte Penal Internacional dictó órdenes de detención contra el exministro de Defensa ruso Serguéi Shoigu y el jefe del Estado Mayor, Valery Gerasimov, por crímenes de guerra.
Condicionar la entrega de armas a Ucrania como una vía para negociar la paz con Rusia. Es la esencia del plan que pondría en marcha el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, en caso de volver a la Casa Blanca tras las elecciones del próximo 5 de noviembre.
Así lo reveló el teniente general retirado Keith Kellogg, que diseñó el plan junto a Fred Fleitz, que se desempeñó como jefe de gabinete de su entonces asesor de Seguridad Nacional, John Bolton.
De acuerdo con la estrategia esbozada, un eventual nuevo gobierno de Trump exigiría a Ucrania iniciar conversaciones de paz con Rusia, si Kiev pretende seguir recibiendo armas estadounidenses.
Al mismo tiempo, Washington advertiría a Moscú que negarse a negociar una tregua con Kiev desencadenaría mayor ayuda militar estadounidense para el país invadido desde hace más de dos años.
La propuesta señala que habría un alto el fuego en los principales frentes de batalla durante las conversaciones.
Según Fleitz, Trump mostró una posición favorable hacia el plan. “No estoy diciendo que él esté de acuerdo con esto o con cada palabra, pero nos complace recibir la respuesta que recibimos”, afirmó el hombre que se desempeñó como asesor de Seguridad Nacional en el pasado gobierno del líder republicano, entre 2017 y 2021.
Se trata del plan más detallado que se conozca hasta el momento sobre el rumbo que tomaría un posible retorno del polémico exmandatario al Ejecutivo.
Durante la campaña, Trump ya ha asegurado que resolvería rápidamente ese conflicto de vencer en las urnas al presidente Joe Biden, que busca la reelección.
Pero usualmente, el controvertido exjefe de Estado plantea propuestas aparentemente fáciles para problemas complejos y hasta ahora no ha explicado públicamente cómo lograría acabar con la mayor invasión en suelo europeo desde la Segunda Guerra Mundial.
En caso de ponerse en marcha, el plan marcaría un gran cambio en la posición mostrada hasta hoy por la primera potencia frente a esa guerra, postura que se encontraría con la oposición de los aliados europeos y dentro del propio gobierno estadounidense.
Tras más de dos años combatiendo frente a las tropas invasoras, miles de muertos y millones de desplazados, Kiev se rehúsa a rendirse y ceder a Moscú los territorios que ha capturado durante el conflicto.
De hecho, el pasado 14 de junio, el presidente ruso Vladimir Putin presentó sus nuevas exigencias a Ucrania para terminar las hostilidades.
Entre ellas, el líder del Kremlin pide a Kiev el retiro de su Ejército de todos los territorios ucranianos que Moscú se ha anexado en la guerra en curso: Donetsk y Lugansk, en el este, y Jersón y Zaporizhia, en el sur, por lo que exige al país atacado que reconozca la “soberanía” rusa sobre esas regiones.
Además, reclama que la nación atacada desista del proceso para adherir esa república a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
El Gobierno de Volodímir Zelenski refutó todas las exigencias, mientras continúa su camino para tratar de convertirse en miembro de la alianza político-militar, dirigida por Estados Unidos, y su posible ingreso a la Unión Europea.
Ucrania: cualquier plan de paz debe estar basado en el Derecho Internacional
Poco después de que fuera revelado el plan diseñado por los asesores de Donald Trump, el asesor presidencial ucraniano, Mykhailo Podolyak, respondió que su país tiene claro que cualquier vía para terminar con la guerra debe ser “justa” y tener como base el Derecho Internacional.
Por tanto, Podolyak remarcó que el conflicto no puede terminar hasta que Rusia rinda cuentas por los crímenes cometidos.
“Ucrania tiene una comprensión absolutamente clara y está explicada en la fórmula de paz propuesta por el presidente (Volodímir) Zelenski: la paz solo puede ser justa y la paz solo puede basarse en el Derecho Internacional”, subrayó Podolyak en una entrevista con Reuters.
Podolyak también reiteró que su nación descarta las recientes exigencias expuestas por Putin para retirar a sus tropas del territorio ucraniano.
“Vemos que el plan de Putin es absolutamente ridículo”, enfatizó.
La CPI ordena detención de Serguéi Shoigu y Valery Gerasimov
Mientras los ataques rusos continúan en suelo ucraniano, la Justicia internacional se pronuncia.
Este 25 de junio, la Corte Penal Internacional (CPI), con sede en La Haya, emitió órdenes de arresto contra el exministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigu, y el jefe del Estado Mayor, el general Valery Gerasimov, por presuntos crímenes de guerra y crímenes de lesa la humanidad por dirigir ataques contra la población y bienes civiles en Ucrania.
Los jueces determinaron que hay “motivos razonables para creer que los dos sospechosos son responsables de los ataques con misiles llevados a cabo por las Fuerzas Armadas rusas contra la infraestructura eléctrica ucraniana” entre el 10 de octubre de 2022 y al menos el 9 de marzo de 2023, señaló un comunicado de la CPI.
Rusia, que no es miembro de la CPI, asegura que la infraestructura energética de Ucrania es un objetivo militar “legítimo” y niega haber atacado a civiles o infraestructura de la población.
Ucrania tampoco es miembro, pero ha otorgado a la Corte jurisdicción para enjuiciar los crímenes cometidos en su territorio desde noviembre de 2013, justo meses antes de que, en 2014, Moscú se anexara la provincia de Crimea durante la llamada guerra del Donbass, antesala del conflicto actual.
Con el dictamen de este martes, el alto tribunal eleva a seis el total de órdenes de arresto contra altos funcionarios de Rusia por la guerra en curso, incluido Vladimir Putin.
En marzo de 2023, la Corte ordenó la detención del líder del Kremlin por crímenes de guerra. En concreto, es acusado como principal responsable del secuestro de niños ucranianos, que durante la invasión de Moscú han sido trasladados a Rusia.
Kiev recibió con beneplácito las últimas medidas de la CPI.
“Todo criminal involucrado en la planificación y ejecución de estos ataques debe saber que se hará justicia (…) Y esperamos verlos tras las rejas”, declaró el presidente Zelenski.
Pero Moscú desestimó las acciones del tribunal. “Esto es solo una broma, ya que la jurisdicción de la CPI no se extiende a Rusia y se hizo como parte de la guerra híbrida de Occidente contra nuestro país”, señaló el Consejo de Seguridad de Rusia, citado por la agencia estatal de noticias TASS.
Debido a que la Corte no tiene una fuerza policial propia y depende de los Estados miembros para realizar arrestos, no está claro si alguno de los sospechosos rusos será juzgado en algún momento de la historia.
Por Yurany Arciniegas-France24 con Reuters, EFE y medios locales