Como demostración clara y cercana de que existe otro camino para las mejoras económicas, tenemos un país pegado al nuestro.
Brasil está a punto de lograr el déficit cero, con otro camino lejos del ajuste al pueblo y con impuestos a las grandes fortunas y fortaleciendo la educación, la salud, la industria y amparando a la cultura como disparador de un tiempo de nuevos desafíos y conquistas económicas y solidarias, que combinadas, generan nuevas generaciones que buscan más equilibrio social y un liderazgo mundial.
La base de esta nueva etapa de desarrollo brasileño está de la mano de las inversiones de automotrices por una inversión de 19.078 millones de dólares.
La mayor inversión es la del grupo Stellantis por 6.000 millones de dólares, en el segundo lugar de inversiones está Volkswagen por 3.200 millones de dólares, continúa con Toyota por 2.200 millones de dólares, Great Wall Motors por 2.000 millones, General Motors sigue en el listado de nuevas inversiones, por 1.400 millones, Hyundai por 1.100 millones, Renault por 1.000 millones de dólares, Grupo Caoa, que es una factoría de Subaru y Chery entre otros dentro del territorio brasileño, que invertirá 908 millones de dólares, y siguen BYD, Nissan y BMW, lo cual llegan a esa fabulosa inversión de casi 20.000 mil millones de dólares, lo cual despertará la red de fabricaciones, ventas, repuestos, mecánicas, gomería, accesorios en todo el territorio Brasileño.
Estos grupos económicos tienen en cuenta a Argentina y su nuevo perfil importador y no de producción, con apenas una inversión hasta el 2030 de apenas, 400 millones de dólares.
Tuvimos la oportunidad electoral de tomar otro marco de desarrollo nacional y aprovechar nuestra buena mano de obra, nuestras condiciones geográficas, pero el electorado tomó el camino, de ser agro exportador, explotando a jubilados, pensionados, y dar la espalda a la producción, a la tecnología y a la cultura, eso significa más y más desocupación, más miseria.
El efecto de Brasil como gran constructor y líder regional, se verá en los próximos años, mostrando 40 nuevos modelo de Suv, autos y camiones y camionetas, que seguramente circularán con alta tecnología por las rutas del país vecino y serán de comentarios en los regresos de aquellos afortunados, cuando vuelvan de vacacionar.
Muchas veces son da calor escuchar comentarios de las actuales autoridades nacionales y provinciales, como ser lo que dijo la canciller en la mesa de Mirtha Legrand, en referencia a los jubilados:…”para que le vamos a dar créditos si les queda poco tiempo de vida”…., ante una mujer de 97 años que sigue trabajando, como si fuese una adulta de 50 años.
Estos comentarios hacen a una personalidad, que no se le mueve un pelo, cuando le dicen o recuerdan que es una de las responsables, junto a su marido de la mayor estafa nacional, como fue el vaciamiento del BID, que afectó a unos 100.000 ahorristas, gente de campo, de pequeños pueblos, del interior profundo de nuestra Argentina, para ponerle un número, debemos hablar de un desfalco de unos 1.000 millones de dólares.
Pero todos estos pormenores podemos soslayar, en beneficio que se hayan arrepentido, pagado sus culpas, pero no vuelven a insistir en un camino de sumisión a los poderosos del mundo, ahora seguramente entregando lo que deseas, energías, litio, petróleo, gas, peces, aguas, etc.
Desde nuestros inicios como nación nos seguimos encontrando con los nuevos Rivadavia, que siguen entregando un País, y en ellos se llevan puestos sueños, esperanzas, sacrificios, que otros aún tenemos, que intentaron los Yrigoyen, los Perón, entre otros, pero que en fin, parecen cantos lejanos, que ojalá, el viento vuelva a soplar para el lado de una Argentina integrada , en paz y con solidaridad y desarrollos para todos.
Brasil encontró una solución económica sin descuidar a la Gente, a las Personas, sacaron más de 20 millones de la pobreza y los llevaron a clase media, aquí sacaron gente de clase media, y la llevaron a la pobreza en tiempo récord, aniquilando esperanzas y sueños de superación.
Una grande que tuvimos dicen que una empresa sueca, que venía de la reconstrucción de la europa de la postguerra, le trajo un proyecto de viviendas populares, grises, muy geométricas, pero frías, la traía un tal Bullrich, y esa persona que buscaba viviendas para su Pueblo con dignidad, le dijo NO gracias, y optó por chalet, de tejas, pisos de madera, con jardines, para demostrar que los obreros podían tener y soñar con algo mejor.
Esa persona se llamaba Eva.
Lo comento porque Lula termina de relanzar su plan de viviendas que lo llamará: “mi casa, mi mundo”.
Por Luis Chervo