“Los naturalizaron como un ritual dentro de la compañía”, detalló el fiscal a cargo de la investigación. Y confirmó que hubo episodios de agresión con contenido sexual.
a justicia de Neuquén investiga una denuncia por reiterados abusos sexuales en la planta que la empresa Tenaris del Grupo Techint tiene en la localidad de Senillosa, y, en ese marco, Maximiliano Breide Obeid, el fiscal en jefe de Delitos Ambientales en Neuquén, brindó detalles sobre cómo eran los “ritos” de iniciación.
En primer lugar, el funcionario recordó en diálogo con Radio Con Vos que el denunciante es un operario que había comenzado a trabajar en la empresa hacía un mes y medio. “Contó que había ingresado y algunos compañeros le empezaron a decir: ‘Hoy te toca el festejo del cumpleaños’”, detalló.
Por estos hechos ya hubo despidos en la empresa, y el fiscal reveló que los episodios de abuso denunciados por la víctima ocurrieron en dos oportunidades, uno de ellos el día que ingresó a la empresa productora de tubos para uso energético en los vestuarios donde hubo “forcejeos y tocamientos” bajo la excusa de que “le tocaba el festejo de cumpleaños”; y el segundo episodio en una combi “lo agreden con connotaciones sexuales”.
El primer episodio se llevó a cabo en una “zona de vestuarios que tiene la empresa y que se usaba para cambiarse y para tener reuniones de trabajo”, situación que se modificó después de la pandemia de Covid-19. “Fue en ese lugar donde sucedió el primer episodio, del que participaron cinco personas”.
“El segundo fue en una combi, donde también participaron estas cinco personas”, agregó. En ambos casos, afirmó que hubo “agresiones con contenido sexual” en perjuicio del nuevo empleado.
Consultado sobre cómo fue que se presentó el caso ante la Justicia y la reacción ante el conocimiento de los hechos, Breide Obeid respondió que “la empresa tiene una línea transparente para hacer este tipo de denuncias anónimas y el empleado la hizo. A partir de ahí, la gente de legales de Buenos Aires comenzó la investigación en Neuquén y acompañó al empleado a la Fiscalía, donde le tomamos la denuncia y le hicimos las revisaciones médicas correspondientes y avanzamos con la investigación por abuso sexual. En este interín, la empresa decidió despedir a los cinco involucrados y suspender a tres supervisores del predio. Estos operarios tomaron la planta como si esto fuera un despido laboral normal por recorte y salieron en los medios a decir que había habido un ‘malentendido’ con un compañero”.
Un abuso “naturalizado” como rito de iniciación
En ese contexto, a Breide Obeid le consultaron si la práctica denunciada por la víctima era “habitual” entre los trabajadores de Tenaris, a lo que respondió: “Cuando la empresa empieza la investigación interna, el resto de los empleados dicen que lo que denuncia la víctima es verdad, ayudan a identificar quiénes eran (los responsables) y agregan que era una práctica normal“.
Tenaris fue denunciada en Estados Unidos por dumping
“Los naturalizaron como un ritual dentro de la compañía”, precisó Obeid al revelar la confesión de otros empleados que aseguraron haber sufrido los mismos abusos. Y detalló: “Lo tomaban como una ceremonia de una unidad penitenciara, lamentablemente uno está acostumbrado a a ver esas prácticas en las unidades penitenciarias y verlo en una empresa privada es chocante”.
Y explicó: “En estos ámbitos es muy difícil hacer este tipo de denuncias, la víctima es un valiente. Es un trabajo marcado por la integración de hombres de determinadas características, donde este tipo de cosas se aceptan, se naturalizan y se tapan”.
De acuerdo con los testimonios recolectados, algunos de los involucrados en el hecho habían sido víctimas de la práctica, quienes “la naturalizaron y la replicaron”, y anticipó: “No descartamos que a partir de esta actitud de la víctima se sumen nuevas denuncias“.
La respuesta de la empresa
Breide Obeid aseguró que la empresa “no tenía idea de que existían estas prácticas” y que colaboró en tiempo y forma con la investigación, pero aclaró que todavía resta investigar si los supervisores apartados de sus cargos tenían conocimiento de lo que ocurría. “Habrá que determinar su rol, si hacían la vista gorda o instigaban. Hasta donde sé, fueron suspendidos”, destacó.
Asimismo, recordó que no fue la primera vez que sucedió algo así en la provincia: “Ya hemos tenido estos fenómenos en algunos organismos. Hace tres años tuvimos un caso penal, en el que terminaron condenados. Fue en un club de remeros en el que cuando aprobaban el curso había una ceremonia de festejo que tenía circunstancias de estas características”.
En medio de la polémica, desde Tenaris emitieron un comunicado en el que afirmaron que “luego de tomar conocimiento de graves situaciones de acoso sufridas por un operario de la empresa ocurridas en las instalaciones de la localidad de Senillosa (provincia de Neuquén), se llevó a cabo una investigación interna y, como resultado del relevamiento, se adoptaron medidas disciplinarias sobre un total de 11 empleados”.
“Cabe destacar que la empresa cuenta con una ‘Línea Transparente’ para que sus empleados puedan denunciar de manera segura y confidencial cuando se identifican acciones y desvíos al Código de Conducta. La misma está habilitada 24/7, los 365 días del año y está disponible para empleados, proveedores, contratistas, clientes, entre otras partes interesadas”, agrega el texto.
“Pasa constantemente”
El director de Masculinidades de la provincia de Neuquén, Nicolás Cerda, dijo que “lamentablemente son situaciones que pasan constantemente, es algo que venimos viendo ya hace mucho tiempo”.
El director del área que depende de la Subsecretaría de las Mujeres de Neuquén indicó que “nosotros lo que tratamos siempre en los talleres es llevarlo a lo cotidiano, a situaciones que vienen transmitiéndose de generaciones en generaciones y que los varones de alguna forma nos tenemos que sentar y empezar a debatir”.
“Nos cuesta muchísimo, es una problemática que nos cuesta interiorizarla como algo nuestro”, reconoció, pero aseguró que los hechos ocurridos “van a abrir una puerta para poder debatir más profundamente estos problemas estructurales”.
Cerda señaló que se pondrán en contacto con la empresa y manifestó su deseo de que “más allá de lo que viene haciendo el Estado, cada empresa incorpore perspectiva de género, que tenga un sector, un espacio donde se pueda debatir como una política pública, como una política empresarial”.
JD / MCP- Perfll