La lista de las más de 2100 búsquedas que hizo el ex policía Ariel Zanchetta, que además de buscar datos de magistrados también investigó a políticos, otras figuras públicas y desconocidos
La causa por el espionaje a jueces de la Corte Suprema de Justicia y de los tribunales Comodoro Py despierta cada vez más interrogantes. Es que un ex policía que quedó detenido esta semana por el caso es el foco de las preguntas de los investigadores. El disparador que lo convirtió en acusado fue haber buscado los datos de los jueces de Casación Mariano Borinsky y Gustavo Hornos el mismo día que le hackearon el celular al primero de ellos. Pero al revisar quiénes eran sus objetivos, los investigadores se toparon con que sólo en 2022 había rastreado información de más de dos mil personas, entre las que, además de funcionarios judiciales, indagó sobre políticos y famosos. Infobae accedió a la lista completa de esas búsquedas que obra en la causa y sobre las que el ex policía nada pudo explicar.
En total fueron 2157 búsquedas entre el 3 de enero y el 31 de diciembre en una base de datos a la que se accede previo pago llamada SudamericanaData. Ese número de consultas no implica que haya buscado datos de 2157 personas porque hay muchas búsquedas que se repiten. La Justicia tiene en su poder el detalle con el día y la hora en las que Ariel Zanchetta, el ex sargento de la Policía Federal devenido en periodista, consultó los nombres. Además aparece el CUIT de cada una de las personas en cuyos datos hurgó el hoy imputado.
Desde Cristina Kirchner a Mauricio Macri, pasando por Axel Kicillof y la novia de Horacio Rodríguez Larreta, Zanchetta también puso el foco en personalidades públicas: el nombre de la actriz Thelma Fardín se mezcla con la hija de Pablo Echarri y Nancy Dupláa. En esa lista también están Fernando Sabag Montiel, el hombre que intentó matar a Cristina Kirchner y su novia Brenda Uliarte. La búsqueda de los datos de Sabag Montiel se hizo el 1 de setiembre de 2022, el mismo día del atentado. También reunió información sobre el jefe de la custodia de CFK, Diego Carbone o la ex participante de Gran Hermano la ex diputada del Frente de Todos Romina Uhrig.
Una curiosidad: el 29 de noviembre de 2022 Zanchetta buscó el nombre de Cristina Elisabet Fernandez. Se supone que intentaba conocer información sobre la vicepresidente. Pero en realidad buscó a una homónima porque el CUIT que aparece en el listado corresponde a una mujer de 35 años que vive en Florencio Varela, provincia de Buenos Aires.
Los judiciales espiados
Elías Ezequiel Nuñes Pinheiro, hacker misionero, y sus abogados, el martes pasado cuando se entregó en los tribunales federales sabiendo que lo buscaban para detenerlo
Todo se enmarca en la causa que investiga el espionaje a jueces. El último lunes, el juez Marcelo Martínez De Giorgi ordenó la detención de cuatro personas. Una es el joven misionero Ezequiel Nuñez Piñheiro que ya estaba investigado por hackear el celular del ex ministro de Seguridad porteño Marcelo D’Alessandro, del diputado del PRO y precandidato a gobernador bonaerense Diego Santilli y de al menos cuatro jueces federales: los de Casación Hornos y Borinsky y los del Tribunal Oral que condenó a Cristina Kirchner Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso. También fueron detenidos un hombre y una mujer en Misiones ligados a la creación de líneas de celulares “truchas” a nombre de los ministros de la Corte Suprema Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz.
El cuarto detenido resultó Ariel Zanchetta, un sargento retirado de la Federal que casualmente buscó los datos de Borinsky y Hornos el día que hackearon al primero. Se justificó diciendo que era periodista y necesitaba información para notas sobre los salarios de los jueces. En su indagatoria le preguntaron si tenía nexos con los servicios de inteligencia, algo que él negó. Pero el fiscal Gerardo Pollicita se encontró con que también buscó información de una lista de más de 2100 nombres, entre los que estaban los ministros de la Corte Horacio Rosatti, Ricardo Lorenzetti y Juan Carlos Maqueda.
Lo que se sabe ahora es que no fueron los únicos funcionarios judiciales blanco de estas búsquedas. Es que a partir del listado de la actividad de Zanchetta en SudamericanaData, se conoció que el ex policía también se encargó de hurgar en los datos personales de los jueces de la Cámara Federal Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi, del por entonces juez de Córdoba Ricardo Bustos Fierro y del juez federal de La Plata Ernesto Kreplak. Consultó además por el académico Guillermo Tamarit, que en 2022 se sumó como académico al Consejo de la Magistratura.
En las investigaciones de Zanchetta, también aparece un hijo del fiscal Carlos Stornelli; y la mano derecha de Rosatti, Silvio Robles, a quien el ex policía se tomó el trabajo de buscar más de un decena de veces porque hallaba homónimos en la base de datos. Probó insistentemente segundos nombres hasta dar con el indicado. Varios de esos funcionarios judiciales, según pudo confirmar Infobae, ya fueron notificados de que fueron espiados.
Lo cierto es que el juez Martínez De Giorgiy el fiscal Pollicita se toparon con un hombre que buscaba de manera repetida e insistente datos de personas públicas y personas desconocidos. Las personas públicas podrían tener, si se quiere, una explicación periodística. ¿Y las otras? “Un elefante se esconde en una manada de elefantes”, dijo a Infobae una fuente con acceso a la causa.
La lista con los 2100 nombres hasta ahora no se conocía. Infobae accedió en exclusiva a esa nómina tan ecléctica como multipartidaria. Aparecen ex presidentes, ex funcionarios, jueces, legisladores, gobernadores, sindicalistas, intendentes, animadores de radio y televisión y actrices. También hijos e hijas de algunos dirigentes y, en varios casos, las parejas de personas de alto perfil en la discusión política argentina. Hay decenas de personas desconocidas cuya atracción periodística sería difícil de explicar.
¿Quiénes fueron un objetivo de interés para Zanchetta?
Axel Kicillof y su esposa Soledad Quereilhac
En su primer día de tareas del 2022, el 3 de enero, Zanchetta buscó a Kicillof y a la esposa Soledad Quereilhac y al dirigente del Movimiento Evita Emilio Pérsico. El 31 de diciembre a las 20.06 cuando la mesa de la cena de Fin de Año se acercaba, Zanchetta no pudo refrenar su pasión investigativa y buscó saber sobre una mujer de 19 años que vive en Junín y no tiene ninguna trascendencia pública.
Si las búsquedas se ordenan alfabéticamente la primera -entre los conocidos- es las del ex jefe de Gabinete de Cristina Fernández de Kirchner, Juan Manuel Abal Medina. En tanto la última es la que corresponde a Avelino Zurro, secretario de Municipios del ministerio del Interior de la Nación.
Parece ser que Zanchetta no estaba muy entrenado para usar el buscador. Por ejemplo, el 22 de julio de 2022 buscó a varias Nancy Pazos que resultaron ser homónimas de la periodista. Recién al día siguiente dio en la tecla cuando halló el nombre completo y acertado: Nancy Jaqueline Pazos. En la lista se encuentras otras personas que trabajan en medios de comunicación como Julia Mengolini, Dady Brieva, Martín Liberman y Diego Brancatelli. Hizo búsquedas sobre ex periodistas devenidas funcionarias públicas como la vocera presidencial Gabriela Cerruti y la Defensora del Público Miriam Lewin.
Rodolfo Tailhade, Dady Brieva, Carolina Losada y Nancy Pazos
De las figuras políticas buceó en los datos de Cristina Fernández -con el CUIT errado- y de Mauricio Macri. Pero también Sergio Massa, Agustín Rossi y su hija Delfina; Hugo Moyano, sus hijos y Liliana Zulet, la pareja del líder de Camioneros. También fisgoneó información del embajador en Chile Rafael Bielsa y sus hijos mayores Hilario (funcionario de Salud) y Laureano.
Aparecen además las ministras del gabinete de Alberto Fernández, Victoria Tolosa Paz y Ayelén Mazzina y el vicejefe de Gabinete Juan Manuel Olmos. Hay una búsqueda de información de Tani Fernández Luchetti, Dyhzy, el hijo mayor del presidente de la Nación Alberto Fernández. En la base de datos figuraba con su nombre anterior, Estanislao.
Entre los perfiles a los que entró Zanchetta se hallan los de los gobernadores Gildo Insfrán (Formosa) y Jorge Capitanich (Chaco), junto al de la directora nacional de Juventudes, Julia Epstein. También obtuvo datos personales del ex vicegobernador bonaerense Gabriel Mariotto y del diputado oficialista Rodolfo Tailhade.
El policía federal retirado hurgó en la base de datos en busca de información de Nicolás Kreplak, ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires y hermano del juez federal también “curioseado” Ernesto Kreplak. Asimismo, averiguó sobre el ministro de Seguridad bonaerense Sergio Berni y el director de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, José Glinski.
Los jueces de la Corte Suprema, ejes de la investigación por el espionaje
Zanchetta quiso saber más sobre la familia Moreau en pleno: tan es así que buscó información de Leopoldo, Cecilia, Carmela. Y también de Leandro Santoro, el ex dirigente radical que tiene una hija con Cecilia Moreau, que preside la Cámara de Diputados. Buscó información de la familia de Estela de Carlotto: sus hijos Claudia, Remo y Guido; y de Ignacio Montoya Carlotto, hijo de Laura-desaparecida- , y nieto recuperado por Abuelas de Plaza de Mayo.
En la lista aparecen los nombres de la vicegobernadora bonaerense Verónica Magario, la ex ministra de la Mujer Elizabeth Gómez Alcorta, la pareja de Pérsico y precandidata a la intendencia de La Matanza Patricia Cubría, el intendente de Tigre Julio César Zamora, la funcionaria de Kicillof Florencia Saintout, el senador oficialista Martín Doñate y de Nelson Periotti, un ex funcionario condenado por el Caso Vialidad. Otro de los nombres que Zanchetta se encargó de buscar fue Hernán Reibel, director de Comunicación Institucional del Senado y una de los funcionarios claves en el entorno de Cristina Kirchner; y de Susana Trimarco, madre de la joven desaparecida Marita Verón y cara visible de su fundación.
Del otro arco ideológico, a la lista se suman el presidente del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal Ricardo Gil Lavedra y la abogada del PRO Florencia Arietto. El ex policía se interesó también en la información de Joaquín De la Torre, senador de Juntos por el Cambio y quien pretendía llegar a la gobernación; Gustavo Posse, pre candidato a vice gobernador por la misma fuerza política; el intendente de La Plata Julio César Garro y el intendente de San Nicolás Manuel Passaglia y del hermano y diputado provincial Ismael Santiago. La candidata a gobernar Santa Fe, Carolina Losada y el diputado provincial Daniel Lipovetsky también figuran en la lista de los escudriñados por Zanchetta.
Horacio Rodríguez Larreta junto a su novia Milagros Maylin
Pero llamó la atención de los investigadores que el ex policía quisiera conocer datos personales de Milagros Maylin, novia de Horacio Rodríguez Larreta, jefe de Gobierno porteño y precandidato a presidente por Juntos por el Cambio.
Obviamente el interés de Zanchetta lo llevó a consultar información sobre Javier Milei y su hermana Karina y también sobre Carlos Kikuchi, quien hasta hace unos días era una especie de armador político del candidato libertario. Y apuntó también hacia dos dirigentes sociales como Eduardo Belliboni, líder del Polo Obrero, y Juan Carlos Alderete, hoy diputado por la bancada oficialista.
Entre las búsquedas de famosos y famosas sin relación estricta con la política partidaria aparece la de la actriz Thelma Fardín, la del filósofo Darío Sztajnszrajber, la del chef Dante Liporace y también la de la participante de Gran Hermano, Romina Uhrig. En ese grupo se puede sumar a Morena Echarri, hija de los actores Pablo Echarri y Nancy Duplaá.
Karina Milei
El ex policía quiso profundizar en la información disponible sobre Carolina Marafioti, quien asiste a Fabiola Yañez en cuestiones de vestimenta, y fue una de las participantes a la célebre fiesta de cumpleaños de la pareja del presidente de la Nación, cuando todo el país estaba en cuarentena estricta por la pandemia de coronavirus. Eso sucedió en el 2020 y se supo en el 2021. Sin embargo Zanchetta la siguió observando en el 2022.
Los investigadores no tienen claro qué hacía Zanchetta con esta información. El tampoco lo explicó. En esta causa se sigue la pista del megaespionaje a jueces. Pero cada uno de los “curioseados” que pudiera sentirse afectado, podría llevar adelante su propia denuncia. La lista es larga. Quizás para estar seguro, Zanchetta también se buscó a sí mismo.
Por Patricia Blanco y Omar Lavieri-Infobae