El lunes, la emblemática Casa Escultura, el hogar que crearon Richard Milberg y Griselda Maymo Planas, fue derribado
El final más temido llegó. Richard Milberg (80) y su esposa, la artista plástica Griselda Maymo Planas (72), están afligidos. El lunes pasado la Intendencia de Maldonado decidió poner fin a la “Casa Escultura” que el matrimonio argentino construyó en una gruta sobre la playa de la Rinconada del Portezuelo, en Punta Ballena, Maldonado. “Fue muy penoso. La casa parecía que había sido atacada por un misil de Ucrania”, dice.
“Es doloroso, nosotros sentimos que fue un regalo que le hicimos a Uruguay, pero ellos no lo aceptaron. Era una casa que había ganado premios y tenía distinciones a nivel internacional”, resalta Milberg.
La casa era un emblema del lugar. El matrimonio argentino había convertido una antigua cueva en un hogar. Una obra de diseño original que fue tapa de la revista Living y elogiada por arquitectos de todo el mundo. Incluso se la puede reconocer en una escena de la serie El Presidente. Durante un tiempo vivió allí, junto con el matrimonio, el escultor uruguayo Daniel Escardó, quien les dijo: “Esta casa es una escultura”. Y desde ese momento, la casa cueva tuvo su nombre: “Casa Escultura”.
-Milberg, ¿por qué demolieron “Casa Escultura”?
-Dicen que no estaba autorizada y perjudicaba al medioambiente, pero se contradicen.
-¿En qué sentido?
-Porque existe un comodato, firmado con la municipalidad, que se hizo para conservar la obra y su divulgación como hito destacado de la cultura y turismo de Punta Ballena. Además, con la demolición hicieron un desastre ambiental. Arrancaron unos árboles centenarios que había en la entrada de la casa. Como dicen ahora ‘dato mata relato’.
-Ahora parece que ya no queda nada por hacer.
-Es penosa decisión de la intendencia de Maldonado. Al final, todo vuelve a estar como antes…
En 2018 la revista Living publicó la historia de la emblemática casa. En el 2005, el matrimonio compró la posesión de la cueva a un pescador que la utilizaba como depósito de sus artefactos de pesca. ¿Qué los motivó? La familia de Griselda había tenido una casa de verano en Punta Ballena y les entusiasmó la idea de revivir aquellos recuerdos de su infancia en la playa. Pero la cueva era eso: un agujero en la roca. No poseía puertas ni ventanas. El matrimonio necesitó 10 años de obra y remodelaciones para convertirlo en un hogar.
Entre las anécdotas de aquellos tiempos, recuerdan que debieron retirar cinco containers de basura y entre las premisas de su remodelación estaba que la casa se mimetizara con su entorno natural, el paisaje. “Eso fue hace doce años, más o menos. Originalmente eran dos cuchillas de montaña y una planchada en el medio, sin nada más que kilos y kilos de basura. Lo primero que hicimos fue llenar cinco containers con todo lo que había ahí adentro. Y empezar a construir, muy poco a poco, nosotros mismos… Es un trabajo que no termina nunca”, dijo Milberg.
Vivieron allí durante 14 años hasta que, en el 2017, un vecino los denunció por haber construido en un área no regularizada y sin título de propiedad. A la denuncia siguió un juicio con la Intendencia. En el medio del conflicto legal, Milberg y su esposa decidieron donar la propiedad a la Intendencia de Maldonado. Hace 6 años se mudaron a una casa ubicada a unas pocas cuadras.
Durante un tiempo, Milberg tuvo un acuerdo con el municipio para que la “Casa Escultura” funcionase como un centro cultural y él fue su administrador. Se organizaron exposiciones de arte, talleres y conciertos, hasta reuniones del campeonato local de Petanca.
Constanza Bengochea-LN