Un efectivo de la Policía de Misiones fue interceptado en la localidad de Ituzaingó tras 25 kilómetros de persecución después de haber escapado de los controles de sus camaradas en el centro de dicha localidad.
El procedimiento se transformó en un incidente de alta velocidad y persecución que finalizó a la altura de Villa Olivari sobre la ruta nacional 12, en medio de un retén de la comisaría de esta localidad que lo interceptaron cuando transitaba a 200 kilómetros por hora.
Según indicaron, estaban en evidente estado de ebriedad y con las luces apagadas, en una camioneta Saveiro preparada para picadas. El posadeño se enfrentó a los policías sobre calle Corrientes (entre San Martín y Belgrano) en el centro de Ituzaingó, Corrientes.
En Villa Olivari lo aguardaban los policías locales y luego de verse acorralado por los uniformados se entregó.