Los pronósticos meteorológicos prevén que las lluvias continuarán siendo intensas hasta el viernes, con volúmenes de precipitaciones que pueden llegar a los 300 milímetros en algunos puntos.
Al menos 10 personas murieron y otras 21 permanecen desaparecidas en el sur de Brasil a causa de las intensas precipitaciones que afectan desde el lunes pasado el estado de Rio Grande do Sul.
Hasta el momento, casi 4.500 personas tuvieron que abandonar sus hogares en 107 municipios por las subidas del nivel de los ríos y las inundaciones.
Inundaciones en Brasil. Foto: EFE
Las autoridades regionales están concentradas en el rescate de familias que se quedaron aisladas, en especial en la región del municipio de Candelária, ubicado a 200 kilómetros al oeste de Porto Alegre, y que se encuentra en estado crítico.
Al menos 69 rutas de la región tienen bloqueos totales o parciales por las inundaciones, caídas de árboles o deslizamientos de tierras o por el hundimiento de puentes.
La evacuación de un adulto mayor por las inundaciones. Foto: EFE
El gobernador del estado, Eduardo Leite, expresó sus condolencias por las muertes causadas por las tormentas y agregó que el gobierno está trabajando para localizar a los desaparecidos y garantizar la seguridad en las zonas de riesgo.
Una zona muy golpeada por las inundaciones
Rio Grande do Sul sufrió tres episodios de inundaciones y lluvias torrenciales desde el pasado septiembre, causados por ciclones extratropicales. Estos fenómenos meteorológicos, que son raros en la región y se vieron agravados por El Niño, causaron más de 50 muertos y cuantiosos daños materiales en los últimos meses.
Inundaciones en Río Grande do Sul. Foto: Reuters
Incluso se espera que en los próximos días las lluvias y el aumento del caudal de los ríos pongan en estado de alerta a la región metropolitana de Porto Alegre, la capital regional.
Las inundaciones serían graves en las cuencas fluviales, con la posibilidad de inundaciones repentinas y movimientos masivos de tierra en regiones con pendientes pronunciadas.