Telegram se ha convertido en un arma de doble filo. El multimillonario ruso Pavel Durov creó la aplicación de mensajería instantánea en 2013, prometiendo no utilizar la información de sus usuarios con fines comerciales y proteger su confidencialidad a través de la encriptación. Pero, varios países de Europa señalan a la ‘app’ y a su fundador de no limitar los contenidos de grupos donde promueven la violencia e incluso crímenes como pornografía infantil y tráfico de drogas. En esa línea, las autoridades francesas detuvieron en París a Durov. ¿Qué alcance tiene este caso? Lo analizamos en El Debate.
“Seguro que las autoridades francesas saben exactamente lo que están haciendo“, afirmó el jueves 29 de agosto la ministra de Exteriores letona, Baiba Braze, al comentar la situación de la ‘app’ de mensajería de origen ruso Telegram y lamentar “la falta de compromiso de su líder ante la falta de moderación en la plataforma”.
En la Unión Europea hay una creciente preocupación sobre Telegram, cuyo fundador, el ruso Pável Dúrov, de 39 años, fue imputado esta semana por la Justicia francesa con cargos que van de blanqueamiento de crímenes a complicidad en la difusión de pornografía infantil.
Durov, que también tiene la ciudadanía francesa, obtuvo su liberación bajo control policial y con una fianza de 5 millones de euros (unos 5,54 millones de dólares).
El Kremlin ha apuntado a una posible motivación política y reafirmó que Durov sigue siendo un ciudadano ruso.
“Durov aún sigue siendo ciudadano ruso, y en cuanto a la obtención (por él) la ciudadanía francesa, aquí no sabemos nada, no es asunto nuestro”, dijo el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, el jueves, y agregó que el magnate “tiene todo lo necesario para organizar su defensa legal”.
El vocero además aprovechó para subrayar:
Directamente, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, aseguró que la detención del CEO “no es en absoluto una decisión política”.
“Corresponde a los jueces decidir”, expresó Macron en un mensaje en X, en el que reiteró que es el sistema judicial el encargado de hacer cumplir la ley “con toda independencia”.
“El presidente de Francia (Emmanuel Macron) ha negado toda vinculación política, pero, por otro lado, se presentan determinadas acusaciones”, respondió Peskov.
¿Este es un caso contra la libertad de expresión? ¿O Telegram tiene que asumir la responsabilidad de limitar los contenidos que compartan los usuarios a través de la aplicación? Para analizar el tema, nos acompañan dos invitados.
– En los estudios de France 24, en Bogotá, Mauricio Jaramillo Marín, periodista de tecnología y director editorial de Impacto TIC.
– En Madrid, Borja Adsuara Varela, abogado experto en derecho digital.
Fuente France24