El entrenador del Tatengue se puso a llorar apenas terminó el duelo ante Tigre. “Este partido lo tomé como la final del mundo”, afirmó.
Unión de Santa Fe cumplió su objetivo de permanecer en la Liga Profesional al vencer este sábado a Tigre por 1 a 0, de local, en una dramática definición por evitar el descenso a la Primera Nacional, que finalmente se decidirá con un desempate entre Colón y Gimnasia.
“Hay mucho esfuerzo. Le agradezco a la gente de Unión, a la familia de los jugadores, a los míos. Ellos son los que siempre están”, dijo el Kily González, entrenador de Unión, tras el partido, totalmente conmovido y entre lágrimas por haber cumplido el objetivo.
“Este partido lo tomé como la final del mundo”
“Estamos felices, gracias a Dios logramos lo que teníamos que lograr”, agregó en TNT Sports. “Unión me recibió con tanto cariño. Un club humilde, de gente sufrida, trabajadora. Yo con mi locura de querer mejorar, hicimos una familia. Estoy feliz. Unión me dio la posibilidad de trabajar nuevamente”, afirmó.
“Este partido lo tomé como la final del mundo, les transmití eso a los jugadores, mi manera de sentir el fútbol. Soy muy exigente conmigo mismo”, continuó. Y cerró: “Les dije a mis jugadores que de local no nos podíamos ir”