Misiones Para Todos

El oportunista y el premiado

Martín Arjol recibió su premio por calcarse la peluca: uno de sus cercanos fue nombrado por Milei como consejero de la Entidad Binacional Yacyretá- La interna radical al rojo vivo- Media sanción para suspender las PASO y Ficha limpia: el peso de los votos misioneros- Milei apuntó a una nueva casta: los economistas

En política, como en el fútbol, hay quienes se esfuerzan por ganar y quienes simplemente esperan que les tiren un centro. Pero también están los que juegan el partido no por la camiseta, sino por el premio económico que viene después. El diputado nacional Martín Arjol pertenece a esta última categoría. Su alineamiento con el gobierno nacional no fue por convicción ni por estrategia, sino por conveniencia. No defendió ideas ni principios, solo cuidó su propio futuro y el de su círculo cercano.

El resultado de esta jugada quedó claro: mientras Arjol negociaba su lealtad al mejor postor, su amigo Rodrigo de Arrechea, ahora ex presidente del Comité Provincia de la UCR, terminó recibiendo su recompensa con un cargo clave en la Entidad Binacional Yacyretá (EBY). No por mérito, no por gestión, sino porque en la política de los
oportunistas, los favores se pagan con sueldos y sillones.

Así, la historia de estos dos radicales disfrazados de libertarios no es la de un sacrificio recompensado, sino la de una transacción vulgar. Arjol entregó su rol de opositor y, a cambio, logró que el poder nacional acomode a los suyos. En este juego, el verdadero derrotado no es él ni Arrechea, sino los misioneros, que siguen viendo cómo los cargos públicos se reparten como trofeos de una competencia donde solo importa el rédito personal.

Para Arjol, el nombramiento de De Arrechea es una victoria dentro de la interna radical, donde nuevos nombres, como el del concejal de Posadas, Pablo Argañaraz o el del resucitado (gracias al atroz crimen de Germán Kiczka), Javier Mela, buscan correr del medio a los dirigentes que desde hace años vienen siendo las caras visibles del
partido y artífices de derrotas tan contundentes como en todas las elecciones ejecutivas desde el 2003 en adelante.

Ni lerdo ni perezoso y tras unos días de silencio, el protagonista de esta historia decidió romper el silencio con una entrevista en Primera Edición donde explicó que dentro de la UCR hay dos posturas bien marcadas (y totalmente opuestas): la de los radicales con peluca, encabezados por Arjol, que pretenden sumarse a la ola libertaria
y la de aquellos que rechazan de plano sumarse o tan siquiera aparecer en cercanías de los hermanos Milei.

En la misma entrevista, De Arrechea utilizó un tópico que se repite en cada elección: la necesidad de generar un gran frente, con amplitud, para generar un cambio en la conducción de la provincia. El problema es que en los hechos, tanto De Arrechea como Arjol pusieron sus intereses personales como punto de partida. Como en el fútbol, se puso el cassette y tiró frases para la tribuna.

PASO

Finalmente, el gobierno nacional consiguió la media sanción de la ley que suspenderá las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) y marcó un punto de inflexión en la discusión política nacional, dejando en evidencia el peso de los legisladores provinciales en la toma de decisiones clave. En este escenario, los diputados
nacionales de Misiones que responden al Frente Renovador de la Concordia, jugaron un rol determinante, destacándose por su compromiso con la realidad de la provincia y el interés por fortalecer su representación en el Congreso.

El gobernador de Misiones, Hugo Passalacqua, no dudó en manifestar su apoyo a la iniciativa y resaltar el acompañamiento de los legisladores nacionales en este proceso. A través de su cuenta en X, Passalacqua expresó: “Reafirmamos nuestro compromiso para seguir trabajando por el bienestar de todos los misioneros y misioneras,
priorizando la unidad política siempre”. Esta declaración no solo evidencia la visión del Gobierno provincial sobre la necesidad de evitar instancias electorales innecesarias, sino que también refuerza el mensaje de unidad y gestión conjunta en defensa de los intereses de Misiones.

El debate sobre la utilidad de las PASO viene siendo una constante en los últimos años. Críticos del sistema sostienen que estas elecciones implican un gasto excesivo en un contexto de crisis económica y que, en muchas ocasiones, terminan funcionando como una gran encuesta sin incidencia real en la definición de candidaturas. Por otro lado, quienes defienden su continuidad argumentan que se trata de un mecanismo de democratización interna de los partidos y un filtro necesario para evitar listas testimoniales o poco representativas.

En el caso de Misiones, la suspensión de las PASO representa una oportunidad para optimizar los recursos y poner el foco en la gestión y en las verdaderas demandas de la sociedad. La postura de los diputados misioneros refleja una estrategia política clara: fortalecer la representación provincial en el ámbito nacional y asegurar que las
decisiones tomadas en Buenos Aires contemplen las particularidades de la provincia.

El acompañamiento de los misioneros fue clave y su accionar responde a una lógica política que trasciende los intereses partidarios inmediatos y busca generar un impacto positivo en la gestión provincial. En un contexto donde el federalismo muchas veces queda relegado a un segundo plano, este tipo de decisiones fortalecen el papel de
Misiones en la discusión nacional y consolidan una forma de hacer política que prioriza la gobernabilidad y el bienestar de la población.

La discusión sobre las PASO sigue abierta y el camino se iniciará en la Cámara Alta, para que los senadores terminen de definir la suspensión de esa elección, seguramente con el acompañamiento de los misioneros Sonia Rojas Decut y Carlos Arce, lo que reafirmará la importancia de contar con representantes comprometidos con su provincia.

Además de la suspensión de las PASO, el Congreso también dio media sanción al proyecto de “Ficha Limpia”, una iniciativa que busca impedir que personas condenadas por delitos de corrupción puedan ser candidatas a cargos electivos. Este avance legislativo representa un paso fundamental en la lucha por la transparencia y la integridad en la política, asegurando que quienes aspiren a representar a la ciudadanía cuenten con antecedentes intachables. La aprobación de esta normativa fue celebrada por diversos sectores políticos y refuerza el compromiso de la legislatura con la regeneración de la confianza en las instituciones.

La otra casta

En un nuevo capítulo de su errática conducción política, el presidente Javier Milei volvió a generar polémica con sus declaraciones sobre el dólar y sus ataques constantes a los economistas que cuestionan su gestión. Con su estilo habitual, Milei desestimó las advertencias de los especialistas y reafirmó su postura extrema, generando aún más incertidumbre en un mercado ya de por sí inestable.

El mandatario, fiel a su discurso, minimizó los efectos de la disparada del dólar y atribuyó la preocupación a lo que él denomina “la casta de economistas”, a quienes acusa de no entender su modelo de “ajuste heroico”. Sin embargo, la realidad económica demuestra que su política de shock está profundizando la crisis, afectando a los sectores más vulnerables y generando una pérdida de poder adquisitivo sin precedentes.

La suba del dólar en los últimos días no es un fenómeno aislado ni caprichoso. Es el resultado de una combinación explosiva de incertidumbre política, desconfianza en las medidas del gobierno y un ajuste brutal que paraliza la economía real. Mientras Milei insiste en que su plan es infalible, los datos reflejan un escenario preocupante:
inflación nuevamente activa, recesión creciente y un malestar social que se intensifica.

El presidente se jacta de su dogmatismo económico, descalificando a cualquier analista que se atreva a cuestionarlo. Pero su postura inflexible y su desprecio por el debate técnico solo profundizan la crisis. Su insistencia en una dolarización que hoy parece inviable y su falta de respuesta ante la inestabilidad cambiaria son señales claras de una gestión que no escucha ni corrige el rumbo.

Las declaraciones de Milei no solo generan ruido en los mercados, sino que también afectan directamente la vida cotidiana de los argentinos. Cada vez que el dólar se dispara, los precios de los bienes esenciales suben y el poder adquisitivo de la población se desploma. Su actitud desafiante frente a esta realidad es una muestra de
su desconexión con los problemas reales del país.

Lejos de aportar tranquilidad y previsibilidad, el presidente se convierte en un factor de inestabilidad con sus declaraciones incendiarias. Su desprecio por los economistas críticos y su visión dogmática de la economía están llevando a la Argentina por un camino de incertidumbre y deterioro social. En lugar de reconocer errores y ajustar su
estrategia, Milei prefiere seguir alimentando la confrontación, sin comprender que la economía no se maneja con eslóganes, sino con políticas concretas que generen confianza y estabilidad.

Por Sergio Fernández