El cepo cambiario dificulta acceder al oro físico, pero igualmente se puede comprar a través de otros instrumentos. Cuáles son y qué perspectivas presentan
Los inversores alertan que en este momento de crisis mundial es una muy buena oportunidad para refugiar los ahorros en una opción que tiene mucha historia: el oro. Argumento que es sustentado por el crecimiento impresionante que tuvo su precio durante el año.
El valor de este metal llegó a trepar en los últimos cinco meses un 40%, y la onza superó los u$s2.000, superando su anterior récord histórico de u$s1.922 del 2011. No sólo eso, según los bancos internacionales de inversión puede seguir subiendo.
A nivel local, las transacciones físicas de este metal no son tan fáciles de realizar porque el mercado argentino tiene sus limitaciones a causa del cepo cambiario, debido a que el oro también es considerado una divisa.
Por lo tanto, en su forma material prácticamente no se puede adquirir, pero sí a través de algunos instrumentos financieros que se comportan de igual manera en el precio que esta moneda.
Es decir, el ahorrista puede comprar papeles locales y extranjeros que replican la cotización mundial del oro, y así conseguir su misma rentabilidad.
“Existen diversas formas de comprar oro o activos que se vean beneficiados por la suba del precio del mismo, más allá del hecho de hacerse de oro físico y almacenarlo. Es decir, activos de mucha complejidad, aunque de todas las posibilidades destacamos dos principales productos sin mínimos de compra y de fácil acceso”, detalla a iProfesional Ignacio Abuchdid, analista de Invertir en Bolsa (IEB).
A su entender, en primer lugar, existen papeles que persiguen de forma directa el valor de este metal amarillo, como el ETF “GLD“, que “replica la variación en el precio del oro, cotiza en dólares y puede comprarse a través de cualquier broker que brinde acceso a los mercados internacionales”.
Al respecto, Daniel Vicien, Director Comercial de Balanz, acota que el “ETF es un fondo que sigue un índice, en este caso el precio del oro. Se compra y vende como una acción, y presenta cotización durante cada rueda del mercado de Nueva York“.
A ello completa Gustavo Neffa, analista de Research For Traders (RFT): “El ETF del oro que representa una cuota parte de un fondo constituido alrededor de un fideicomiso, que se dedica a replicar el precio del oro. El más líquido y famoso es el GLD, pero en el exterior existen muchos ETFs para posicionarse y operar el oro en posiciones compradas (largas), inversos o vendidas (short, a la baja), incluyendo algunos ETFs apalancados (comprados y vendidos)”.
La segunda y última alternativa mencionada por Abuchdid, es para quienes están dispuestos a asumir mayores riesgos, que es invertir en empresas mineras de oro.
“Las mismas ofrecen una correlación directa con el precio del oro, pero son más sensibles a la variación del valor de este metal debido a los riesgos adicionales que implican las acciones. Lo que significa que, en períodos alcistas en el precio del oro, estos vehículos son una gran herramienta para comprarlo”, explica.
En resumidas cuentas: “A nivel doméstico, se puede acceder a través de Cedears de empresas, como por ejemplo el de Barrick Gold (denominado GOLD). O bien, por medio de la Bolsa norteamericana en dólares. O sino comprar ETFs, que están compuestos por acciones de diversas mineras para diversificar y maximizar los retornos”, grafica Abuchdid.
Tomando este último caso, también pueden comprarse acciones de mineras de forma individual, ya sea por el riesgo que insume cada empresa, que es algo independiente de la variación del precio de este metal. Las mismas están denominadas como GDX (mineras de oro) y GDXJ (mineras de oro junior).
“Uno puede tener exposición al oro a través de las empresas mineras que lo extraen y venden: el más popular es el GDX, un ETF que refleja el desempeño de unas 50 compañías mineras a nivel mundial, que están relacionadas con la evolución del precio del oro porque, en su mayoría, son extractoras y productoras del metal”, describe Neffa.
De esta manera, para aquel que posea una cuenta bancaria en Estados Unidos, Vicien destaca que se pueden comprar los ETF, como el de GLD, por medio de un broker. Además, aclara que existen más de 10 ETF que siguen al precio del oro, pero el más conocido es el GLD.
El proceso que realiza la administradora de ese ETF es “el mismo que puede hacer un particular por cuenta propia. Es decir, “compra las onzas (es una de las 10 primeras reservas de oro físico después de los principales bancos mundiales) y/o lo complementa con la compra de futuros del oro a distintos vencimientos”, asegura Neffa.
Oro desde Argentina
En el caso de que el inversor tenga solamente cuenta bancaria en el país, se puede acceder de forma bursátil al oro por medio de un instrumento local.
“Si sólo tenés cuenta en Argentina, se puede comprar un Cedear de minas de oro, como las de Barrick Gold, que es la que opera mayor volumen”, dice Vicien.
O también, a través de adquirir los mencionados certificados de las otras tres firmas mundiales que son comercializadoras de este metal y que cotizan en ByMA (Bolsas y Mercados de Argentina), como Gold Fields (GFI), Novagold (NG) y Yamana Gold (AUY).
Cabe aclarar que los Certificados de Depósito Argentinos, de allí deriva su sigla (Cedear), representan a las acciones de empresas que cotizan en el exterior, en especial, en los mercados de la Bolsa de Nueva York, y que se pueden adquirir en la plaza doméstica por medio de una Sociedad de Bolsa.
Estos Cedears cotizan en pesos y, para Vicien, son una forma de, simultáneamente, “seguir al oro y al dólar contado con liquidación“, debido a que se comportan localmente como los activos extranjeros que cotizan en moneda estadounidense.
Incluso, estos canales bursátiles son los únicos para acceder a este tipo de metal en Argentina.
Según una entidad bancaria consultada por iProfesional, “no se puede operar oro fisico, lo máximo que se permite vender por el cepo cambiario son los u$s200 y no hay nada existente por ese monto, ya que serían unos 3 gramos. Por eso, prácticamente no hay mercado de oro fisico en Argentina, no se puede hacer”.
Oro en alza y oportunidad
Por la crisis económica mundial a causa de la pandemia de Covid–19, el oro se ha transformado en un resguardo mundial para los inversores conservadores.
Esto generó que su precio escale en el acumulado de todo el 2020 más de 30%, pero si solamente se toman como referencia los últimos 5 meses llegó a trepar 40%.
Es que el ETF de oro (GLD) llegó a tocar un piso en pleno caos de la pandemia de u$s138,04 (19 de marzo), para luego ir recuperando posiciones y escalando poco a poco hasta llegar a un techo de u$s193,89 (6 de agosto). Hoy se ubica en torno a los u$s182.
“El oro es un bien de refugio en momentos de incertidumbre en el mercado, y por eso en este momento está tocando máximos y sigue subiendo porque se está midiendo su precio en una moneda como el dólar, que ha tenido una gran emisión en Estados Unidos por la pandemia”, detalla Vicien.
A ello agrega Abuchdid: “El precio del oro se encuentra en sus precios máximos históricos, dado que es un activo que nos protege de los factores externos y es utilizado como reserva de valor. Creemos que a futuro es un activo clave a tener en cuenta para poder preservar el capital en términos reales, ante los desafíos que enfrenta la economía mundial”.
De acuerdo a consultoras de inversión internacionales, el precio mundial del oro y el de los activos financieros apalancados a él pueden seguir en ascenso.
Al respecto, Schroders Investment, gestora global que opera en 37 países, afirma que estos precios del metal han llevado a algunos inversores a lamentar no haberse dado cuenta de los recientes movimientos del oro.
“De hecho, algunos creen que está demasiado caro o, incluso, que se está formando una burbuja (…) Pero fijándonos en el largo plazo, pensando en años no en semanas, no creemos que sea la reacción correcta. Y las acciones de empresas relacionadas con el oro en particular, están mostrando que este ciclo tiene mucho recorrido todavía“, resalta el informe.
Por su parte, el relevante banco de inversión Goldman Sachs, pronosticó que el precio del oro aumentará un 20% para fines de 2022, llegando a u$s2.300.
Causas de la suba del oro
Para los especialistas consultados por iProfesional existen diversos motivos como para sustentar que la compra de oro, aunque sea a través de un instrumento financiero, es una muy buena alternativa para invertir y proteger los ahorros.
“En primer lugar, las tasas de interés de las principales economías mundiales tienden a 0%, la FED (Reserva Federal de EE.UU.) estima mantener las mismas a niveles bajos al menos hasta el año 2022“, afirma Abuchdid.
En este sentido, Neffa también menciona los principales motivos por los que compraría oro en este momento:
1. Es un refugio contra la depreciación del dólar y/o de la inflación. “Este el principal factor, y se acentuará en el mediano plazo. Cualquiera que sigue los mercados de commodities y de divisas sabrá que el dólar y el precio del oro tienden a moverse de manera opuesta, ya que una depreciación del dólar generará un mayor aumento en el precio de este metal”, afirma Neffa.
Esto se evidencia, acota Abuchdid, en cuanto a los niveles de emisión monetaria, debido a que estamos frente a “niveles de emisión sin precedentes”, dado que los bancos centrales del mundo utilizan esta herramienta para mitigar los efectos del virus en la economía.
2. Composición de las reservas de los bancos centrales, especialmente de China: en los últimos informes registran un aumento de la tenencias de bonos de Tesoro por parte del China, alerta Neffa.
3. Caída y recuperación de la economía mundial. “Este año sirvió de refugio, y el año que viene parte de la demanda provendrá de todos los usos industriales que posee”, completa el experto.
4. Otro de los motivos esgrimidos es el crecimiento muy limitado de la producción en este contexto de pandemia.
5. Asimismo, se evidencia un “crecimiento de la industria de los ETFs y ETNs, con un posicionamiento con mayor facilidad de pequeños inversores“, concluye Neffa
Por Mariano Jaimovich – iProfesional