El referéndum se hace el mismo día que eligen presidente. Una discusión de 10 años sobre la posible explotación del llamado bloque 43 enclavado dentro de un parque considerado área natural protegida.
Por primera vez un país usará el voto popular para decidir si rechaza o no un proyecto petrolero existente. Ocurrirá el próximo 20 de agosto en Ecuador y el resultado puede sentar un precedente histórico en cuanto a acción climática .
La ciudadanía se acercará a votar por “Sí” o por “No” ante la consulta sobre si prohibir la extracción de petróleo en una gran parte del Parque Nacional Yasuní, una región vital para la salud de la cuenca amazónica y del planeta.
Que la Justicia haya dado luz verde a este referéndum es una victoria lograda por pueblos originarios y movimientos ambientalistas tras 10 años de lucha.
A esa década de marchas y contramarchas es a la que hace mención la activista Greta Thunberg cuando se une al Sí a Yasuní diciendo: “Esta consulta popular demuestra que cuando los políticos y los gobiernos no actúan ¡LA GENTE SÍ LO HACE!”.
¿Por qué es importante proteger al Parque Nacional Yasuní?
El Parque Nacional Yasuní y el aledaño Territorio Ancestral huaorani conforman una de las zonas con mayor biodiversidad en el mundo. Por eso, ya en 1989, la UNESCO lo declaró reserva de la biósfera.
Para imaginar la vida silvestre que habita en este territorio, vale decir que sólo en especies de árboles, hay más en Yasuní que que en toda Norteamérica y que en una hectárea de esta selva habitan 100.000 especies de insectos (sumados a 150 especies de anfibios, 121 de reptiles, 598 de aves, unas 204 de mamíferos y cerca de 3.100 vegetales).
Otro dato que ilustra este paraíso natural es que en sus ríos y lagunas se pueden encontrar delfines rosados, una de las 33 especies en peligro de extinción de la Amazonía.
Además de ser el hogar de los últimos pueblos indígenas en aislamiento voluntario del país, los Tagaeri, Taromenane y Dugakaeri, quienes dependen de una selva saludable para seguir existiendo.
¿Ya se extrae petróleo en el Parque Nacional Yasuní?
Sí, ya existen siete bloques petroleros que se encuentran total o parcialmente dentro del PNY. La mayoría han sido explotados desde hace décadas, y en todo ese tiempo, hubo derrames masivos de petróleo, contaminación de ríos y problemas socioeconómicos para las comunidades.
Si bien muchos ecuatorianos y ecuatorianas pueden encontrarse ante la disyuntiva de que votando por el “Sí” están frenando una actividad económica que genera riqueza, los datos demuestran que desde que Ecuador se convirtió en un país exportador de crudo en 1972, lejos de terminar con el hambre en país, ocurrió todo lo contrario.
Es decir, el mayor foco de pobreza se ha concentrado justamente en la Amazonía. Y la explicación de que esto ocurra es que, como explica el economista Carlos Larrea en el diario El País, “la Ley Orgánica de Ordenamiento de las Finanzas Públicas (2020) señala que las ganancias del negocio petrolero deben destinarse al pago de la deuda externa”. Así las cosas, la Amazonía se sacrifica y el dinero nunca se reinvierte en desarrollo social.
Entonces, ¿qué se vota en el referéndum?
La pregunta es la siguiente: “¿Estás de acuerdo con que el gobierno ecuatoriano mantenga indefinidamente en el subsuelo el petróleo crudo del ITT, conocido como Bloque 43?”
Ante esto, la decisión popular del 20 de agosto determinará si se prohíbe de ahora en más la actividad extractiva en el Bloque 43 o ITT (por el nombre de los campos Ishpingo-Tambococha-Tiputini) donde 12 plataformas petroleras y 225 pozos producen 54,800 barriles de petróleo al día.
Y también definirá si las empresas deben desmontar la infraestructura petrolera que nunca se debió instalar en la parte este del parque.
“Lo que sucederá, con suerte, es que establezcamos un precedente en el que tengamos la posibilidad de cuestionar la dependencia del petróleo“, explica Melissa Moreano Venegas, Profesora de la Universidad de los Andes Simón Bolívar en Quito y coeditora del libro “La Explotación de Yasuní: En Medio del Colapso Global del Petróleo” consultada por Mongabay.
En este sentido, Ramiro Ávila, abogado de Yasunidos y catedrático universitario, remarca que lo que se decide es “si optamos por una forma de vida que no se basa en la explotación del ser humano ni en el extractivismo agresivo de la naturaleza. Eso es lo que está en juego”.
Aclaración: Ese mismo día también, se realizará una consulta que trata de impedir la entrada de la minería en otra Reserva de la Biosfera, la del llamado Chocó andino, en la región de Quito.
Por Meri Castro-Greenpeace