La abogada accionó frente a las acusaciones que habían realizado las descendientes del reconocido periodista.
Tras haber anunciado el nuevo parte médico del experimentado escritor en su cuenta de Instagram, se conoció que Elba Marcovecchio tomó cartas en el asunto luego de que las hijas de Jorge Lanata la acusaran de diversas cuestiones. Su esposo actualmente está en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Italiano y continúa siendo seguido por los médicos de este establecimiento, además de manejar su estado de salud con mucho hermetismo y cuidado.
Elba Marcovecchio presentó su defensa tras las acusaciones recibidas por las hijas de Jorge Lanata
Elba Marcovecchio, abogada y actual compañera de vida de Jorge Lanata, conoce de esto y presentó un escrito en la Justicia en el que expresó todo lo que viene sucediendo con las herederas del experimentado periodista, Bárbara y Lola Lanata. En este marco, la letrada realizó una denuncia en contra de ellas e hizo fuerte hincapié en cada una de las acusaciones que recibió.
El programa especializado en espectáculos, LAM, tuvo acceso al escrito de más de 100 páginas y remarcó algunos puntos importantes en los que la esposa del escritor se defendía y esclarecía algunos cuestiones de las que fue señalada. “Mintieron cuando dijeron que no iba al hospital, cuando eran ellas las que iban ocasionalmente. Mintieron cuando dijeron que envenenaba a mi marido dándole dulces, cuando eran ellas las que le compraban dulces, pizzas y fainas. Mintieron sus testigos cuando me imputaron que le encendía cigarrillos, cuando era su propia hija la que le buscaba hoteles donde poder fumar. Mintieron cuando sostuvieron que me negué al traslado al Fleni de Escobar”, expresó en primer lugar.
Y añadió: “Mintieron cuando dijeron que el doctor Rafaele no tenía acceso, cuando después el mismo Rafaele lo desmintió. Mintieron cuando dijeron que Lola Lanata vivía en casa de su padre, cuando ella misma le dijo a su señoría que en los últimos 111 días fue dos veces. Mintieron con los partes médicos, al punto de editar uno de ellos y borrar la palabra delirio”. Esto no quedó ahí, porque fue punto por punto y Elba Marcovecchio decidió detallar todo: “Mintieron a la gente cuando publicaron que no habían pedido insanía a su padre, cuando su demanda es de determinación de capacidad. Mintieron cuando me enrostraron robar copas, pero en la declaración de Francisca, una de las empleadas, dijo que ella misma me las embala para llevarlas al cumpleaños de mi madre”.
En cuanto a los certificaciones o partes médicos, la abogada manifestó: “Mintieron cuando dicen no saber dónde están los certificados de autenticidad, cuando de manera inmediata contesté que estaban en mi poder. Mintieron cuando me dijeron que le hurté a mi propio marido. Mintieron al editar videos. Mintieron cuando dijeron que no las dejaba ingresar con los celulares, cuando fue la propia jueza, por disposición de la clínica, tampoco pudo hacerlo. Mintieron al deslizar que soy una mantenida por mi marido, cuando son ellas las que dependen de él. Mintieron cuando me imputaron llevarme dinero, cuando el único dinero que desapareció era el mío”.
Luego, se refirió a la supuesta malversación de fondos y sostuvo: “Mintieron cuando afirman que malversa el patrimonio de mi marido, cuando fueron ellas quienes le pusieron un moño a su auto. Deshonran el apellido de su padre al extorsionarme editando videos, creando testimonios mentases, filtrando supuestas grabaciones y amenazas a través de los medios. Mienten, mienten y mienten, pero la verdad siempre nos alcanza”.
Y posteriormente Elba Marcovecchio añadió: “Desde ya anticipo que vengo a poner a la solicitud de las hijas en forma subsidiaria, vengo a solicitar en caso de corresponder de acuerdo a los médicos el que sea mío que se me designe en forma personal como apoyo legal del señor Lanata. El apoyo no es alguien que toma las decisiones por el causante, sino quién conoce de los deseos y necesidades del otro y toma decisiones en su favor, bajo control judicial a fin de resguardar sus derechos y expresar su verdadera voluntad”.
Elba Marcovecchio resaltó que siempre fue una gran compañera de vida y que siempre al pendiente muchas cuestiones de Jorge Lanata: “Desde que estamos juntos me ha encargado siempre, y casi exclusivamente, de acompañarlo en sus problemas de salud, de cuidarlo, prácticamente de internarme con él, de contactar a los médicos, de advertirles ante cada situación. Soy su apoderada judicial y soy su apoderada general, con facultades de disposición y administración sin obligación de rendir cuentas”.
Nuevamente, Elba Marcovecchio apuntó contra Bárbara y Lola Lanata al hacer énfasis en ‘apatía’ y concluyó: “Los planteos realizados por ellas se vislumbra una apatía absoluta ante el estado de salud de su padre, denigrándolo como hombre al llevar el relato a situaciones íntimas, con lo que eso implica para una figura tan pública como lo de Jorge, que nada tienen que ver con la medida que persiguen cruzando límites inadmisibles, cuyo único objetivo es ensuciar mi buen nombre y honor”.