Las mujeres más famosas de Hollywood se suman a la tendencia “vestido al desnudo”.
Insinuar antes que mostrar es una regla que no va más. Al menos en Hollywood donde quedó demostrado que exhibir la ropa interior diminuta y mostrar los pezones es la tendencia del momento. Basta ver a la supermodelo Emily Ratajkowski quien llegó a la fiesta post Oscar organizada por la revista Vanity Fair con un vestido largo al cuerpo de lúrex completamente transparente plateado. Debajo lleva la bombacha vedetina al tono con el vestido. El detalle del audaz modelo es un bordado sobre la parte delantera que cubre los pezones y evita así la desnudez extrema y dejarlos al descubierto.
La top model combinó su vestido con un peinado recogido con efecto wet y un maquillaje que hace foco en sus ojos con un esfumado de color negro. Apenas llegó al evento enloqueció a los paparazzis quienes le pedian que pose para ellos mostrando el diseño de la marca Feben que acompañó con plataformas de Jimmy Choo, una de las firmas fetiches de zapatos para las famosas.
Emrata, como se llama Emily Ratajkowsky en Instagram, le dedicó tres posteos a su “naked dress“ en su cuenta sumando likes minuto a minuto acaparando elogios y dedicatorias de amor. La top se divorció de su marido y padre de su hijo el año pasado en medio de escandalosos rumores de infidelidad.
Las famosas aman el “naked dress“
Vestirse casi desnudas es el capricho de la moda que va sumando cada vez más fanáticas. A la misma fiesta que Emily Ratajkowsky fue invitada Ciara quien también eligió un “naked dress“ (vestido desnudo) que dejó a todos sin aliento. El modelo de red negro completamente transparente es de la colección otoño-invierno 2023 de Peter Dundas, uno de los niños mimados de la mda parisina. El diseño, que dejó poco lugar a la imaginación, está adornado con cristales brillantes y tiene escote en pico pronunciado.
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Para evitar la censura y no mostrar de más, Ciara llevó pezoneras del color de su piel que se fusionaron perfectamente y remató la ya de por sí jugada apuesta con una tanga negra diminuta, detalle que se encargó de mostrar desde todos los ángulos para los flashes.
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Para sumar glamour al estilismo, incluyó un par de guantes negros largos, sandalias al tono con tiras finas y joyería plateada, a juego con los apliques de la prenda. El pelo, que lleva con corte carré, lo lució suelto y bien lacio. Un maquillaje con foco en la mirada fue el broche de oro de una apuesta que quedará en la historia.
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