La máquina que costó USD 900.000 quedó destrozada tras un extraño vuelco. Las autoridades responsabilizaron a Alfonso Peña, compañero de colegio de Mauricio Macri. Investigación judicial en marcha. Licitación de Aña Cuá en la mira.
El escándalo
El viernes por la tarde, una grúa móvil de la Entidad Nacional Yacyretá (EBY) valuada en USD 9000.000, volcó al costado del dique que bordea el embalse, a la altura de San Cosme y Damián, en el departamento de Itapúa. Desde el lado paraguayo de la hidroeléctrica no quisieron dar demasiada información y se limitaron a decir que el vehículo sufrió un desperfecto técnico que el operador no pudo resolver.
Lo cierto es que la grúa XCMG, de origen chino, entró en funciones hace apenas un mes. Pablo Rossi, miembro del sector de Coordinación y Logística de Yacyretá, había presentado el nuevo equipo como “fundamental dentro de los planes de mantenimiento preventivo que se realizan sobre las unidades generadoras y los trabajos de rehabilitación y la logística de piezas de gran volumen y peso”.
La grúa móvil, que venía a reemplazar un equipo ya había cumplido su vida útil, contaba con “una capacidad de 100 toneladas, capaz de trabajar en lugares confinados, en espacios reducidos”, como era el caso del dique donde se produjo el accidente. Los ingenieros de la EBY esperan un peritaje para conocer el motivo por el cual el vehículo falló y terminó por caer, aunque por los daños podría quedar inutilizable.
Según confirmaron fuentes cercanas a LPO, para salir de la central, la grúa necesita de la autorización de los dos directores de la EBY, es decir, el argentino Alfonso Peña y el paraguayo Luis Benítez. “No debería estar fuera del ámbito de la central. No se saca ese tipo de equipos sin el ok de los directores”, aseguraron.
No debería estar fuera del ámbito de la central. No se saca ese tipo de equipos sin el ok de los directores
Benítez es un hombre que responde al vicepresidente Pedro Alliana, quien lo ubicó al frente de la hidroeléctrica para apuntalar el desarrollo en la región -limítrofe con las provincias argentinas de Formosa, Chaco y Corrientes- y manejar una baza clave a la hora de presionar al gobierno de Javier Milei. En medio de la tensión con Argentina por los pagos atrasados en la generación de energía, Benítez tiene línea directa con el Ejecutivo de Santiago Peña.
Por su parte, Alfonso Peña fue especialmente elegido por Mauricio Macri. El director argentino de la EBY fue compañero de colegio del expresidente en el Cardenal Newman y trabajó en Mirgor, la primera empresa de Nicolás Caputo. Además, estuvo al frente de Decavial, firma que se asoció a Caputo SA para la compra del terreno del Hospital Ferroviario en 2008, por la suma de USD 6 millones.
Alfonso Peña fue especialmente elegido por Mauricio Macri. El director argentino de la EBY fue compañero de colegio del expresidente en el Cardenal Newman y trabajó en Mirgor, la primera empresa de Nicolás Caputo.
Tras la adquisición, el gobierno porteño modificó la zonificación del predio, lo que permitió que estas dos empresas vendiesen el terreno en USD 23 millones.
Peña también ocupó una silla en el directorio de Cunumí SA, firma adjudicataria de varias licitaciones de obra pública en Buenos Aires cuando Macri era jefe de Gobierno.
El líder del Pro, amigo del expresidente Horacio Cartes, presionó a Milei para poner a su excompañero del Newman en la hidroeléctrica, luego de que el libertario se decantara por Guillermo Nielsen para desembarcar en la embajada argentina en Asunción.
El portal Misiones Para Todos consultó a la EBY y aún no recibió respuesta sobre la denuncia e investigación judicial.
Ampliaremos….
Por L.Glezer y P. Porta-LPO