La movida es encabezada por Cecilia Pando y la madre y la hermana de Alfredo Astiz, entre otras. A través de una carta pública, explicitaron que hubo contactos con La Libertad Avanza (LLA) y afirman que el presidente y su vice incumplen lo pactado.
Familiares de los represores publicaron una carta donde exigían que el presidente Javier Milei y la vicepresidente Victoria Villarruel “cumplan con las promesas” que hicieron y liberen a los condenados por delitos de lesa humanidad. En ese sentido, consideraron que se trata de una reclusión “injusta e ilegal”.
A través de una carta pública difundida en La Nación, un grupo de mujeres que militan contra los juicios por crímenes cometidos durante los años del terrorismo de Estado protestaron porque los festejos de Año Nuevo estuvieron opacados por la prisión de sus familiares o amigos.
“Días atrás el mundo festejó la llegada de un nuevo año con esperanza y buenos deseos de prosperidad, pero el festejo en la Argentina ha sido a medias porque se cumplieron 20 años de injusta e ilegal prisión de nuestros soldados que defendieron al país del terrorismo en los años 70, el mismo que ataca hoy a Israel y del cual todos nos horrorizamos”, comienza el texto, titulado “¿20 años no es nada?”.
Al respecto, se cuestionaron el motivo por el cual “las autoridades no cumplen con las promesas hechas a los familiares de las víctimas del terrorismo judicial de hoy y abandonan a quienes lucharon también por la vida de ellos y los retienen presos hasta los 100 años sufriendo tratos crueles y degradantes”.
“¿Qué nos pasa compatriotas? ¿Es que ya no corre por nuestras venas una sola gota de sangre? ¿No son ellos de carne y hueso y nosotros la misma cosa? ¡Aunemos nuestros esfuerzos para que nadie arranque las nubes blancas de nuestro cielo!”, concluye la misiva.
El reclamo ocurre en medio de un momento de distancia entre Milei y Villarruel, potenciado por las tensiones para sesionar y aprobar en el Congreso el mega DNU y la “Ley Ómnibus”. En ese sentido, ambos funcionarios muestran diferencias en los métodos de acción: mientras el presidente es más confrontativo, la vice busca negociar y sumar apoyo opositor en el Senado. Incluso optó por no mostrarse públicamente con el Jefe de Estado y el equipo de Gabinete cuando por cadena nacional fueron lanzados el mega DNU y el paquete de leyes digitadas por Federico Sturzenegger y sus equipos técnicos.
Quiénes firmaron la carta
Entre las firmantes se encuentra Cecilia Pando, quien se distanció de la vicepresidente a pesar de compartir militancia en los inicios del 2000. Incluso la líder de la agrupación Memoria Completa apoyó a Patricia Bullrich durante las elecciones, a lo que se sumó que arremetió contra la actual vicepresidente en numerosas ocasiones, a quien le reprochó haber abandonado la causa por los “presos políticos”.
También firmaron Ana Magi, militante de la causa “la otra campana del Nunca Más” y esposa de Ernesto “Nabo” Barreiro, excarapintada condenado a prisión perpetua por crímenes de lesa humanidad en Córdoba; María Inés Lamolla, esposa de Carlos Esteban Pla, sentenciado a perpetua en San Luis, y Marta Ravasi, acusada de facilitar la huida de su marido Jorge Olivera del Hospital Militar.
Otras familiares que participaron fueron María Elena Vázquez y Lucracia Astiz, madre y hermana respectivamente de Alfredo Astiz; Graciela de la Villa, esposa de Adolfo Donda, y Patricia Isabel Mauriño, esposa de Rafael Barreiro, quien fue excarcelado días después de la asunción del nuevo Gobierno.
Sumado a esto, firmó la misiva la periodista tucumana Luz García Hamilton. García Hamilton se moviliza contra los juicios en Tucumán. Además, creó el grupo de “las chicas del Operativo Independencia” para asistir a las audiencias de dicho juicio para darles apoyo a los represores que estaban en el banquillo.