Misiones Para Todos

Iliquidez educativa 

Esto somos, Argentina se muestra al mundo como realmente somos, un país que prioriza el fútbol, la diversión más que la educación como política de estado.

No podemos desconocer como ciudadanos el mal que se acciona ante la falta de mirada política ante la vulnerabilidad del otro sobre todo por la falta de educación; a raíz de ella se amplía a la pobreza. Estamos transitando el mes de julio y en Pandemia, no sabemos a ciencia cierta la cantidad de estudiantes que no están cursando el Ciclo lectivo 2021, solo sabemos que cada vez estamos más pobre.

El promedio pre pandemia de abandono era superior a los 300.000 en Secundaria. Algunos estiman 1.000.000 en todo el sistema educación nacional, otros todavía más, esto lo sostuvo nuestro ministro de educación de la nación. Si siempre repetimos los mismos errores, es que no aprendimos nada, no escuchamos nada.

La labor docente era una de las pocas vías de movilidad social existentes en Argentina que había, además de una fuente de prestigio y reconocimiento con la educación cuando funcionó la ley 1420 hasta 1994, con ella se iba alcanzando territorios lejanos para que todos nos sintamos argentinos de verdad incluso los que venían de afuera a vivir acá. Hoy es poco lo que queda de ese reconocimiento de antaño a la labor docente, hoy somos los culpables de todo. ¿Cuántos Ministros de Educación han pasado en Argentina desde el retorno de la Democracia que realmente han sido docentes de aula? Yo creo que no muchos y esto hace que la educación tenga un carácter de disvalor por lo tanto no se sabe cuál es el lenguaje del aula.

Se podría decir que la mayoría de las personas cuentan con un teléfono celular, pero ¿es ese un instrumento ideal para realizar trabajos o recibir lecciones? La igualdad del salón implica que todos los allí presentes tienen las mismas oportunidades de aprender, más allá de su nivel socioeconómico, yo me eduque con el hijo del Intendente de ese entonces, con la hija de “la enfermera”, yo era la hija “del mecánico”, con la hija del cardiológico, etc. Hoy ¿Hay recursos? ¿Hay gestión? O se hace todo para que no funcione apoyado por la repetición de consignas vacías de eternas campañas electorales que se están anunciando nuevamente.

Las elecciones que vienen ofrecen siempre la oportunidad de un cambio, sobre todo en educación. A veces, ese cambio está sustentado en propuestas, otras, en el deseo de que las cosas mejoren, pero en Argentina todo es parches por lo tanto no hay planificación. Desde que la pandemia comenzó muchas personas se han visto afectadas, sin embargo, uno de los sectores más golpeados es la educación. El covid-19 mostró y agravó las desigualdades entre la población estudiantil, por ende los que tomaran los designios de neustro pais en un futuro próximo.

La educación depende de los gobernadores desde que está la ley de la descentralización del sistema educativo. Sin inversión educativa estamos construyendo un futuro pobre. El 60% de los menores de edad en Argentina son pobres. A veces pienso que los argentinos estamos encaprichados en ser un país de ignorantes, solo peones de ajedrez autómatas, sin ser capaces de pensar por nosotros mismos.

No Hay un reconocimiento a la importancia de la educación y al trabajo docente. Es necesario que los sistemas educativos estén preparados para reaccionar rápidamente, otorgar los apoyos y mantener la continuidad del proceso educativo. No se habla de garantizar una buena educación, ni ahora ni antes de la Pandemia. Si un año de Pandemia no ha servido para al menos entenderlo es que estamos llegando a una miopía que asista.

Hay mucho que hacer en educación en la educación de Argentina, pero todo será posible, solo a través de una responsable “administración de las realidades sociales y pedagógicas” y en todo el país no solo de una parte del país, Argentina es un país totalmente fragmentado.

La pandemia ha sido desfavorable para todos los argentinos comunes, no creo que para esa casta privilegiada que son los que no ven el problema, que no lo atacan en conjunto como por ejemplo ciertos políticos de todas las vertientes que solo viven peleándose por todos los medios, no viendo realmente las desigualdades que afectan a la población. No obstante, es nuestro deber como ciudadanos tomar esta situación, atacar los obstáculos y progresar juntos como país, pero…la gestión no se puede hacer desde los escritorios.

Por Daniela Leiva Seisdedos- Prof. de Historia, Directora de la Revista El Arcón de Clio. Ganadora de Seis premios UBA. Manuales de CDC Tinta Fresca-Alfaomega. Personalidad destacada de la Educación del HCD La Plata.