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Polémica con una candidata de Bullrich que dijo que las Malvinas “son de los Kelpers”

“Las Malvinas no existen. Las Falkland islands son de los kelpers”, escribió Sabrina Ajmechet en Twitter años atrás y ya fue repudiada por ex combatientes y familiares de caídos.

Viejos tweets de Sabrina Ajmechet, la candidata a diputada de Cambiemos que Patricia Bullrich ubicó séptima en la lista que encabeza María Eugenia Vidal, complican la campaña del oficialismo porteño por su polémica posición respecto a la cuestión Malvinas.

La historiadora sostiene en esos tweets que las islas “no son ni nunca fueron argentinas” y que el reclamo de soberanía es una cuestión “irracional”. Las expresiones de Ajmechet ya cosecharon el repudio de familiares de caídos y de ex combatientes de Malvinas.

La cuestión Malvinas es un reclamo que atraviesa el arco político nacional y todos los gobiernos reiteraron en Naciones Unidas, sin embargo para Ajmechet “la creencia en que las Malvinas son argentinas es irracional, es sentimental. Los datos históricos no ayudan a creer eso”, escribió en su cuenta de Twitter.

Ajmechet es doctora en historia y también funcionaria porteña: se desempeña como secretaria de Investigación, Desarrollo e Innovación en Unicaba, la universidad creada por Horacio Rodríguez Larreta para formar docentes.

Tweets como “Las Malvinas no son ni nunca fueron Argentinas” o “Las Malvinas no existen. Las falkland islands son de los kelpers”, publicados años atrás comenzaron a circular con intensidad en las redes sociales en los últimos días e incluso fueron repudiados en medios de comunicación con posiciones cercanas al macrismo.

“Si vos elegís una candidata porque tiene seguidores en Twitter te arriesgás a estas cosas. Es un papelón lo que escribió y nadie está de acuerdo con eso”, dijeron a LPO desde Cambiemos.

“Desperdicié la oportunidad de atropellar a un grupito de estudiantes del Pellegrini. Sepa la patria disculparme”, escribió en 2012 la actual vicepresidenta del Club Político Argentino que años atrás fue acusada de plagio por un artículo sobre el sufragio femenino que copió de dos colegas en la publicación Polhis. Tras el reclamo el artículo fue levantado y Ajmechet firmó una nota admitiendo su culpa en el caso.