Un aduanero y un agente de transporte fueron descubiertos en Encarnación con dinero de jubilados argentinos que no pueden cruzar a Posadas a buscar sus ingresos mensuales.
Dos argentinos, uno agente aduanero, su cómplice auxiliar de transporte de carga, ambos con prestación de servicios en el centro integrado de operaciones en la cabecera encarnacena del puente San Roque González de Santa Cruz, fueron descubiertos este miércoles en presuntas maniobras de tráfico de divisas, pero también bajo la sospecha de los delitos de estafa y asociación ilícita, como parte de una red de cobros de jubilaciones y pensiones en cajeros automáticos argentinos pero cuyos beneficiarios residen en el vecino país y a quienes les quitaban en concepto de “comisión” alrededor de tres mil pesos a cada uno.
La irregularidad fue descubierta a las 18 de ayer (17 hora paraguaya) cuando integrantes de la Armada junto a otros efectivos de control fronterizo interceptaron al aduanero argentino entregando una mochila con fajos de billetes en pesos al auxiliar de transporte. Vale aclarar que los controles administrativos para el transporte de carga de un país al otro se realizan en el centro integrado en Encarnación.
Según fuentes consultadas, el aduanero llegó hasta ese punto en su automóvil y allí -en motocicleta- lo esperaba el auxiliar mencionado, quien se encargaría de distribuir el dinero y devolver las tarjetas de débito a cada jubilado o pensionado argentino que reside en la vecina orilla pero también se intentará saber si no corresponden a beneficios sociales truchos u obtenidos de manera irregular.
Las mismas voces consultadas remarcaron que la maniobra no sería aislada y el monto incautado no superaría los 600 mil pesos, lo que no alcanzaría a los diez mil dólares que se pueden ingresar al Paraguay sin tributar los impuestos. Es decir, no constituiría el delito de “tráfico de divisas”.
De todas maneras, secretarios del Ministerio Público Fiscal de Paraguay realizaban anoche los trámites pertinentes para determinar la irregularidad y el delito.
“Estafa y asociación ilícita” no se descartaban también como posibles imputaciones o investigaciones. En el caso del aduanero la situación se agravaría por su condición de funcionario público y resta saber la infracción a las disposiciones de cada país ante el cierre de frontera migratoria para frenar la circulación de la pandemia de coronavirus.
Con “recibo”
La sorpresa de los encargados del control de tráfico en Paraguay fue grande, primero porque conocían a los argentinos involucrados, ambos con funciones aduaneras en el centro integrado, pero también por la irregularidad o delito que cometieron.
Hallaron fajos de pesos argentinos discriminados por tarjeta de débito y un papel con el monto de extracción, el saldo que quedaba en la cuenta y la “comisión” para los “gestores”, además del apellido y nombre del titular.
Las opiniones más halagüeñas que se oyeron en la cabecera paraguaya del puente resaltaron que se trató de un “favor” porque si los beneficiarios no podían retirar dinero por tercer mes consecutivo de las jubilaciones, el servicio podía cortarse o suspenderse en Argentina.
Si se comprueba que el “favor” es una coima obligada por los demorados ayer, no se descarta la sospecha de una red de estafas.
Fuente: Primera Edición