“Ad portas” del inicio de la fiesta musulmana del Ramadán, israelíes y palestinos llegaron este domingo 19 de marzo a un acuerdo para evitar cualquier tipo de altercado en los lugares sagrados de Jerusalén. Además, reafirmaron los acuerdos alcanzados en la reunión de Áqaba que llevaron a cabo el mes pasado donde se comprometieron a desescalar el conflicto.
El acuerdo alcanzado el domingo entre israelíes y palestinos para intentar frenar la violencia enfatizó en la necesidad de prevenir cualquier interrupción súbita en los lugares sagrados de Jerusalén de cara al inicio del Ramadán, a finales de la semana.
Tras las conversaciones que se llevaron a cabo en Egipto se dio una declaración conjunta, a la que asistieron funcionarios del país anfitrión, Estados Unidos y Jordania, donde reconfirmaron los compromisos asumidos en la reunión de Áqaba el 26 de febrero. Entre ellos, la promesa israelí de quitar de la mesa de discusión, durante cuatro meses, la creación de nuevos asentamientos.
En la reunión jordana de Áqaba, la primera de este estilo en años, no fue posible detener la escalada de violencia que vive la Cisjordania ocupada a pesar de las promesas de ambas partes. Este domingo volvieron a hablar de ellas en el centro turístico egipcio de Sharm el-Sheik y “acordaron establecer un mecanismo para frenar y contrarrestar la violencia, la incitación y las declaraciones y acciones incendiarias”.
Las partes en las conversaciones también “enfatizaron en la necesidad de que tanto israelíes como palestinos prevengan activamente cualquier acción que perturbe la santidad” de los lugares sagrados de Jerusalén, según la declaración conjunta.
En otros años, en medio de la fiesta sagrada musulmana del Ramadán, hubo enfrentamientos entre la Policía israelí y palestinos, en los alrededores la mezquita Al-Aqsa, el tercer lugar más sagrado del islam, y que es venerado como el Monte del Templo por los judíos. Este año el Ramadán coincide con la Pascua del judaísmo y la Pascua cristiana.
Desde acuerdos anteriores los judíos pueden visitar el sitio, pero no pueden rezar en el lugar, aunque en los últimos años el número de visitantes ha crecido, y algunos rezan en silencio.
En 2021, la presencia de judíos con banderas israelíes sirvió para encender la mecha que desencadenó una guerra de 11 días entre Israel y Hamás, que controla de facto la Franja de Gaza.
En 2022, las fuerzas israelíes fueron responsables de la muerte de unos 200 palestinos entre combatientes y civiles, además detuvieron a miles en Cisjordania. Los palestinos causaron la muerte de 40 israelíes.
Cisjordania ocupada ha estado en medio de ataques en los últimos meses. Militares israelíes han realizado incursiones casi diarias, además de verse un incremento de la violencia por parte de colonos judíos, en medio de ataques palestinos.
Este domingo, un pistolero palestino en Hawara, al sur de la ciudad de Nablus, abrió fuego contra una pareja israelí que iba en su automóvil, uno de los ocupantes del vehículo quedó herido. El Ejército israelí publicó una foto del vehículo que muestra el parabrisas lleno de agujeros de bala. Además, aseguró que el hombre herido y las tropas israelíes abrieron fuego y golpearon al agresor, quien fue arrestado más tarde.
Desde la Franja de Gaza, Hamás sentenció que el ataque era una respuesta natural a las constantes ofensivas israelíes en la zona.
Este incidente hizo recordar un hecho similar ocurrido en la misma ciudad que se registró mientras se sostenían las conversaciones de Áqaba. Un hombre perteneciente al grupo Hamás mató a dos colonos que iban en un automóvil. Los colonos respondieron e incendiaron casas y autos, y mataron a al menos un palestino.
Hamás, en contra las conversaciones
El grupo Hamás, que es considerado un grupo terrorista por Israel y varios países de Occidente y que gobierna de facto la Franja de Gaza, condenó a la Autoridad Palestina por participar en las reuniones de Egipto.
Hamás sentenció que el Gobierno israelí “está intensificando” su agresión contra el pueblo palestino.
Por su parte, Hussein Al-Sheikh, miembro de la Organización para la Liberación de Palestina (OPL) pidió la protección de “los derechos” del pueblo palestino “a la libertad y la independencia” y aseguró que seguirán exigiendo el fin de “la continua agresión israelí”.
Según un alto funcionario israelí, las partes renovaron en Egipto los compromisos con los acuerdos alcanzados en Áqaba.
El objetivo palestino
Tras la creación del Estado israelí en 1948, el pueblo palestino busca establecer un Estado en Cisjordania y la Franja de Gaza siendo Jerusalén Este la capital, territorios que Israel capturó en la guerra de 1967.
Desde ese entonces, se sostuvieron conversaciones de paz. Unas que se suspendieron desde 2014. Según los palestinos, Israel ha socavado las posibilidades de llegar a un acuerdo, al expandir los asentamientos judíos en las tierras ocupadas.
El Gobierno de tendencia derechista y ultraderechista del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, autorizó nueve asentamientos de colonos judíos en Cisjordania, antes de las conversaciones de Áqaba. Además, anunció la construcción de nuevas viviendas en los asentamientos ya construidos.
Netanyahu pareció restar importancia a los compromisos de Áqaba e informó que no detendría las construcciones, posiblemente para no perder el apoyo de los parlamentarios de extrema de derecha que hacen parte de su coalición. Esto, en un momento en que la polémica reforma judicial propuesta por el primer ministro está en el centro del debate.
Estados Unidos, a través del secretario de Defensa, Lloyd Austin, dijo que esperaba que Israel reduzca las tensiones en Cisjordania y que la Administración Biden está preocupada por la violencia de los colonos contra los palestinos.
Por Andrés Granadillo-France24 con Reuters y AP