El Secretario de Hábitat en el Ministerio de Desarrollo Territorial de la Nación, segundo de María Eugenia Bielsa, dialogó sobre el programa Argentina Construye al que Córdoba adhirió recientemente, Procrear, UVAs y mucho más.
Enumera de memoria cada una de las líneas que propone este flamante plan Argentina Construye, destaca las virtudes del viejo Procrear y la necesidad de mejorarlo en su nueva versión y se entusiasma al hablar de una política de Estado post pandemia en la que los planes de vivienda incorporen innovaciones tecnológicas y energías renovables.
Javier Fernández Castro, la mano derecha de María Eugenia Bielsa en el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat de la Nación, dialogó sobre una de las problemáticas que más afecta a las clases media y baja en nuestro país: la vivienda.
Destacó que el plan Argentina Construye al que Córdoba adhirió recientemente está pensado como una herramienta para mitigar los efectos económicos de la pandemia pero con una mirada y un proyecto a largo plazo. Y, en una mezcla de deseo y declaración de objetivos, propuso que la vivienda social con la que se acerca a los sectores más populares al viejo sueño del techo propio no sea sinónimo de algo mal hecho.
“El plan surgió por el contexto de pandemia. Hay un proyecto estratégico a más largo plazo que tenía previsto una cantidad de políticas activas bastante fuertes. Pero obviamente las limitaciones de trabajar en cercanía, de no poder reunir una determinada cantidad de trabajadores en obras grandes, nos obligó a sacar este plan que podría denominarse intermedio”, explicó el secretario de Hábitat de la Nación.
En ese sentido detalló que el programa “está pensado para durante la pandemia y la primera fase de post pandemia y nos permitirá hacer obras pequeñas, pero distribuidas, que ayuden a mantener el nivel de trabajo y al mismo tiempo respeten los códigos necesarios del covid. La idea es que se pueda trabajar de a pequeñas cuadrillas sin necesidad de masivos transportes de gente, etc.”.
Explicó además que Argentina Construye “tiene varias líneas de subsidios directos para mejoramientos, completamiento de instalaciones y demás, que en los barrios servirá para generar trabajo en los distintos gremios involucrados, o en cooperativas que ya estén organizadas”.
Pensando en la post pandemia
Fernández Castro explicó que el mismo plan prevé la construcción de edificios que serán claves en la lucha contra el coronavirus pero que luego se reutilizarán para otros fines. “Hay otras tres líneas en el programa. Una tiene que ver con la generación de edificios importantes para equipamiento público, pensados con una tecnología de prefabricación que hace que se puedan montar rápidamente en el lugar. La idea es que en una primera etapa sirvan para trabajar en el tema de la pandemia como por ejemplo en la elaboración de alimentos, aislamiento de personas de riesgo, o como edificio de higienización. Una vez superada la pandemia el plan es que esa inversión pueda ser aprovechada por los barrios en usos educativos, deportivos, culturales o lo que fuera. Que la inversión en la crisis no sea una carpa que se pone y se quita sino que sea algo permanente que pueda ser reutilizado de otra manera”.
Será un total de 30 de estos edificios en todo el país, ubicados principalmente en lugares con mayor presencia del coronavirus.
Adiós a las letrinas
“Otra línea es la que va a comenzar por la región del noroeste y noreste, que este año no le va a tocar a Córdoba pero sí el año que viene. Tiene que ver con la eliminación total de letrinas para reemplazarlas por baños y núcleos sanitarios reglamentarios. Obviamente es una medida de higiene muy importante para esta pandemia y para otras patologías”, explicó el funcionario nacional.
Además, una tercera línea es la que posibilitará “conexiones domiciliarias en todos los lugares donde hay redes ya tendidas y faltan las instalaciones al interior de los lotes hasta los baños y cocinas”.
Este arquitecto especializado en proyectos urbanísticos y que participó en proyectos como la reurbanización del Barrio 31 Carlos Mugica (en el que fue director), destacó que Argentina Construye trae consigo “posibilidades de generación de trabajo y empleo dentro de la línea de hábitat que no requieren mucha concentración de trabajadores”. “Son muchas obras micro en lugar de pocas obras grandes”, destacó.
En cuanto al futuro aseguró que “hay planes más ambiciosos para construcción de viviendas nuevas, urbanización de barrios, mejoramiento de conjuntos habitacionales que hoy están degradados, construcción de viviendas con sindicatos y cooperativas”.
Indicó además que estos planes se están trabajando en paralelo para que una vez que pase la pandemia estén listos para ser implementados. También ponderó la posibilidad de que en provincias más aliviadas puedan aplicarse antes.
La vivienda como política
Fernández Castro expresó que la iniciativa de apostar a planes de vivienda e infraestructura en medio de la crisis es una decisión política que tiene que ver con utilizar los recursos del Estado para mejorar la vida de la gente y a la vez reactivar un sector económico muy importante para la vida del país.
“Es tratar de generar oportunidades en medio de la crisis. Hay un cambio fundamental en el concepto de economía. Si hasta ahora pensábamos que la economía era la aplicación de los menores recursos posibles, ahora es la aplicación de todos los recursos que tenemos para lograr todos los resultados posibles. Es una visión muy distinta la que tienen los gobiernos populares de la que tienen los gobiernos neoliberales. El accionar del Estado es clave. En todas estas líneas que te comenté se piensa que los materiales utilizados sean industriales para garantizar la generación de empleo calificado perdurable en el tiempo”, aseguró.
La vuelta del viejo Procrear
Otra medida que está impulsando el Ministerio en materia de vivienda es el relanzamiento del Plan Procrear con el espíritu con que fue creado en 2012. Este programa entregó unos 111.000 créditos para la construcción de viviendas y 85.000 en las líneas de ampliación, terminación y refacción. Además, a través del programa se inició la construcción de 23.000 viviendas en Desarrollos Urbanísticos como el del sector sur de nuestra ciudad.
“Se está relanzando. Es una línea más dirigida a sectores medios a partir de un crédito subsidiado por el Estado para que con lo que hoy se paga de un alquiler se pueda pagar una cuota de una vivienda definitiva. Fue uno de los programas más virtuosos de la gestión anterior a la última, donde fue pasado al mercado inmobiliario y se desnaturalizó con el tema de las UVA. Es un relanzamiento que se está pensando y está bastante avanzado”, explicó Fernández Castro.
El funcionario acotó que será necesario llevar adelante una política para controlar que -como pasó en la etapa anterior- los precios de materiales y terrenos no se disparen ante la demanda que seguramente se generará.
“Esto tiene que ver con una política de suelos, de trabajo sobre el costo de los materiales y sobre la actuación de las empresas que es muy importante para controlar el precio final de los productos. En el anterior Procrear pasó que los terrenos comenzaron a subir mucho de precio y se hacía muy difícil encontrar uno para poder construir. Si dejás librado al mercado el precio de los insumos pasa eso de que ‘yo te hablo con el corazón y vos me respondés con el bolsillo’. Este nuevo lanzamiento va a incluir una política de suelo más inteligente, de control y acuerdos con las cámaras empresarias que tienen los materiales para que la generación de trabajo no genere necesariamente inflación”, aseguró.
En ese sentido agregó: “Hay un cambio de mirada sobre la obra pública, queremos recuperar el orgullo por la arquitectura de Estado. Que la vivienda social no sea sinónimo de vivienda pequeña o mal construida. Al contrario: que sea la mejor vivienda posible. También agregando tecnologías renovables para bajar el consumo, cuestiones ecológicas en el desarrollo de los barrios, queremos transformar esa mirada antigua por una más integral”.
“Córdoba en ese sentido tiene una historia en la arquitectura de la vivienda de muy buena calidad. El barrio Aeronáutico de los 30′, las viviendas del peronismo de los 40′ y 50′ e incluso viviendas de los 60′ y 70′ muy buenas. Queremos recuperar ese viejo perfil en clave contemporánea en todas las provincias. En el caso de la de ustedes, que son pioneros en el tema, es uno de los desafíos”.
La problemática UVA
Cuando el Procrear dejó de tener una tasa fija en la gestión del macrismo, se propuso el sistema UVA al que muchas familias adhirieron con la esperanza de que la inflación pueda ser contenida. Ocurrió lo contrario y hoy les representa un grave problema al no poder afrontar el valor de las cuotas.
Sobre este tema, Fernández Castro explicó que la idea es llegar a una legislación que pueda corregir las distorsiones de este sistema para llevarle alivio a las familias que ven cercano el riesgo de perder sus casas.
“Hubo varias asociaciones que nuclean a gente que está comprometida con estos créditos que estuvieron reunidas con la ministra Bielsa antes del inicio de la pandemia. Se avanzó bastante en tratar de sacar una legislación correctiva. Eso está en la agenda”, aseguró.
Fuente: La Voz de San Justo