La influencer ha compartido una fotografía en la que deja claro que ha retomado su relación con el futbolista tras su condena por violación
Tras la puesta en libertad condicional de Dani Alves, las especulaciones sobre su relación con Joana Sanz se han disparado. En medio de los rumores sobre si la influencer se encontraba o no en la casa que compartía en Barcelona con el futbolista, la canaria ha despejado todas las dudas este lunes publicando una fotografía que confirma que sigue junto al brasileño tras su condena por violación.
Sanz ha compartido en las stories de su perfil de Instagram una imagen de su mano entrelazada con la de Alves. En la instantánea se observa, además, que la pareja comparte un tatuaje como símbolo de su unión: ‘1+1=1′, se puede leer en la piel de ambos.
Con este gesto público, la influencer zanja los rumores de separación y confirma que seguirá junto a su pareja pese a ser condenado a cuatro años y medio de prisión por agredir sexualmente a una joven en el baño de una discoteca.
‘Story’ de Joana Sanz en la que aparece su mano entrelazada con la de Dani Alves. (Instagram)
Descarta la ruptura
Desde el inicio del proceso judicial contra Alves y durante su estancia en prisión preventiva, Joana ha permanecido en el domicilio familiar, aunque su actitud pública denotaba una posible ruptura que ahora ha sido descartada.
En un primer momento, la canaria decidió borrar todas sus fotografías con el brasileño y, hace justo un año, publicaba un texto manuscrito que se interpretaba como una separación definitiva. En la misiva, Joana confesaba la “sensación de abandono y soledad” que sentía en ese momento y lamentaba el daño que le estaba causando su marido: “Elegí como compañero de vida a una persona que ante mis ojos era perfecto”.
Imágenes del exjugador de fútbol, Dani Alves, y su abogada, Inés Guardiola, a la salida del futbolista de prisión en Barcelona.
“Me cuesta tanto aceptar que esa persona pudiera romperme en mil pedazos”, proseguía Sanz en su carta. Y agregaba: “Creo que me va a costar años de vida sacar su forma de mirarme, esa forma como si yo fuera lo más increíble del mundo”. Finalmente, la canaria escribía la siguiente reflexión: “Perdonar alivia, así que me quedo con lo mágico y cierro una etapa de mi vida que comenzó el 18/05/15. Doy gracias por las oportunidades y aprendizajes que la vida me da, por más difíciles que sean, aquí está una mujer fuerte que pasa a la siguiente etapa de su vida”.
Joana Sanz y Dani Alves, en una fotografía de archivo. (Michael Regan/Getty Images)
Sin embargo, en todo este tiempo Joana no ha dejado de estar al lado de Alves, evidenciando que lo que le causaba dolor era el hecho de que su esposo hubiera estado con otra mujer y no el delito que este ha cometido con esa relación sexual no consentida. De hecho, le visitó en varias ocasiones en la cárcel y se mantuvo en contacto permanente con él a través de las cartas o las llamadas telefónicas.
El pasado tres de marzo, solo dos días después de que la Audiencia de Barcelona condenara al futbolista por violación, Joana Sanz publicaba un polémico post en la red social Threads en el que afirmaba que le encantaría que le “jalaran del pelo” y la “empotraran contra la pared”, una confesión que se interpretó como una afrenta directa a la víctima de su marido.
Por Noé Guzmán-Infobae