Tras una investigación de tres meses, la entidad detectó las maniobras de un grupo a través de terminales de posnet y cuentas bancarias de sociedades falsas.
Luego de una intensa investigación, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) desarticuló una asociación ilícita que desviaba fondos a empresas fantasma para evadir el pago de impuestos.
Ante la sospecha de delito, la entidad allanó 36 domicilios correspondientes a contribuyentes identificados como deudores relevantes con escasos movimientos bancarios. En el operativo secuestraron una importante suma de dinero, documentos de interés para la causa.
La Dirección General Impositiva trabajó durante tres meses en una investigación que detectó el accionar de un grupo de empresas y profesionales que operaban en conjunto. De acuerdo a lo que indicaron, los titulares reales utilizaban distintas sociedades que se reemplazaban unas a otras, manteniendo a los dueños ocultos el manejo de la explotación comercial.
¿Cómo lo hacían? Bajo la creación de empresas “cascaras” que desarrollaban su actividad, generando deudas impositivas para después cambiar de razón social e interponer testaferros insolventes.
“Queríamos saber a dónde iban los fondos de las ventas con tarjetas de crédito. Ellos tienen que hacer una factura, pero no emitían facturas y cuando pasaban la tarjeta por el posnet, en vez de ir a sus cuentas, iban a otras cuentas falsas. A raiz de esto, vimos un grupo de contribuyentes que repetían las maniobras”, detallaron fuentes oficiales a TN.
Su finalidad era ofrecer “terminales POS” y cuentas bancarias de titularidad de sociedades falsas, que eran utilizadas por diferentes contribuyentes vinculados al rubro gastronómico y de indumentaria.
A través de esta maniobra desviaron alrededor de $2000 millones, que fueron depositados en las cuentas bancarias de los comercios y posteriormente utilizados para el pago a proveedores y los sueldos de los empleados.
Mediante el análisis de las IP utilizadas tanto por los locales como por los usuarios de los posnet, los domicilios y socios, entre otros datos relevantes, lograron establecer el vínculo con una sociedad profesional, la cual sería la organización delictiva encargada de la creación, administración y comercialización de estas complejas maniobras.
Al comprobar esa supuesta relación, la AFIP realizó una denuncia penal que quedo radicada en el Juzgado Federal en lo Penal Económico Nro.9, solicitando medidas de urgencia a fin de resguardar los intereses del fisco.
Los allanamientos fueron en Mar del Plata, Pilar, La Plata y AMBA. Allí se secuestró dinero en efectivo por un valor de 1 millón de dólares y 80 cajas con documentación. Según indicaron a este medio, los primeros días de julio se dispondrá la apertura de las mismas.